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China mantiene el avance de sus cambios financieros
Vie, 05/12/2014 - 13:52

Gabriela Correa López

China mantiene el avance de sus cambios financieros
Gabriela Correa López

Gabriela Correa López inició su carrera laboral como profesora de educación primaria en escuelas públicas de México y posteriormente como economista para diversas instituciones del gobierno federal. Ingresó como profesora del Departamento de Economía de la UAM Iztapalapa en 1983 y como investigadora de tiempo completo en 1998. Posee una licenciatura en Economía de la UAM Iztapalapa; una Maestría en Economía en el CIDE y un Doctorado en el Área de Relaciones Internacionales Transpacíficas de la Universidad de Colima. Las líneas de investigación que sigue actualmente se relacionan con el Desarrollo económico y las Relaciones internacionales.

Con mayor fuerza, desde 2013, el gobierno de la República Popular China ha impulsado dos reformas claves en su sistema financiero que estaban considerados en el XII Plan Quinquenal aprobado en octubre de 2010, en el cual se reconoció la importancia de realizar cambios estructurales para fortalecer el mercado interno, proponer la reducción de desigualdades sectoriales, regionales y de ingreso, así como avanzar en la liberalización financiera.

Las dos medidas financieras relevantes y que se refieren en este texto consisten en mantener el impulso de la internacionalización de su moneda (Yuan Renminbi) y la operación de zonas de libre comercio financiero, entre las cuales la de Shanghai es la más importante.

Los chinos además no cejan de fortalecer sus capacidades de negociación en la representación en organismos internacionales como el FMI y la OMC, proponiendo en 2014 nuevas instituciones financieras asociadas a los BRICS, así como manteniendo el liderazgo en el cuestionamiento de lo que llaman mundo unipolar.

En 2014, se anunció la organización de un Acuerdo Contingente de Reservas y un Nuevo Banco de Desarrollo, asociado al grupo de países BRICS; que aunque no tendrían la capacidad financiera y de representación para retar al FMI y al BM, se convierten en un elemento fundamental de la propaganda para proyectarse como líderes de la defensa de los intereses de países subdesarrollados. Si se hace un ejercicio rápido de comparación entre los US$100 millones de aportaciones iniciales a cada una de estas dos nuevas instituciones, frente a los US$1,4 billones que podría movilizar el FMI, se advierte la enorme diferencia en la capacidad de recursos involucrados.

Zona piloto de libre comercio de Shanghai. El 2 de diciembre de 2013 el banco central chino dio a conocer los mecanismos de apoyo a la Zona Piloto de Libre Comercio (ZPLC) de Shanghai, con una estrategia gradual y controlada para promover servicios financieros liberalizados que operarán con convertibilidad del yuan en operaciones financieras, emisión de acciones y canalización de capital al exterior.

La tradición y experiencia financiera de Shanghai ofrece mayor atractivo que las previas experiencias de libre comercio financiero, como la implementada en Qianhai, una localidad continental cercana a Hong Kong.

Los residentes en la ZPLC de Shanghai podrán mantener cuentas para transacciones en yuanes y otras monedas, invertir en mercados de acciones en el exterior sin autorizaciones previas y transferir ingresos obtenidos en la ZPLC a cuentas en el exterior. Además, las empresas que se registren podrán invertir en acciones y mercado de futuros en la ZPLC, y las empresas del exterior podrán emitir bonos denominados en yuanes en el continente.

Las empresas registradas en la ZPLC de Shanghai disfrutarán extensiones de tiempo para pagar sus impuestos por ingresos asociados a activos no monetarios, realizando pagos regulares por conceptos obtenidos de inversiones no monetarias en el exterior, en un periodo de uno a cinco años. Es decir, una empresa podrá adquirir activos en el exterior para sus operaciones y disfrutar de periodos prolongados para pagar los impuestos generados.

Según la consultora Deloitte, la ZPLC de Shanghai combina cuatro elementos: zona de libre comercio (Waigaoqiao), zona de servicios logísticos (Waigaoqiao), puerto de servicios (Yangshan) y el aeropuerto (Pudong). Estas cuatro áreas cubren una variedad de operaciones requeridas para las actividades que se realicen en los 28,78 kms cuadrados que es el espacio físico de la ZPLC de Shanghai.

Internacionalización del Yuan Renminbi. La internacionalización de una moneda nacional significa el uso de su función de medio de pago para transacciones internacionales, pero sobre todo que su función de reserva de valor a futuro es considerable y aceptada por otros países.

Normalmente los bancos centrales de los países establecen acuerdos bilaterales de intercambio de las respectivas monedas (swaps), y por ese mecanismo se aceptan pagos relacionados con el comercio de bienes y servicios. Cuando los pagos se refieren a operaciones de intercambio de activos y deudas son operaciones de la cuenta de capital que en algunos casos se acompañan de acuerdos de tenencia de monedas para formar parte de las reservas internacionales del país, estableciendo periodos de vigencia, montos aceptados de la tenencia de moneda extranjera y rendimientos sobre estas tenencias.

China ha mantenido en los últimos años un programa de expansión de acuerdos bilaterales con bancos centrales, en los que el uso de swaps ha reforzado la colocación del yuan como divisa para operaciones financieras. Estos son los casos de los acuerdos con alrededor de 15 países como Nigeria, Mongolia, República de Corea, Brasil y Argentina, entre otros.

Esta internacionalización del yuan amplía considerablemente las operaciones entre el continente chino y Hong Kong que en la práctica funciona como un sistema de cambios dual, ya que el tipo de cambio del dólar estadounidense en Hong Kong es distinto al que opera en el continente chino, a pesar de los mecanismos de “liga” de cotizaciones que se refiere a información y operación instantánea.

Cabe recordar que el uso de swaps disminuye costos de transacción al evitar la conversión de los pagos a una tercera moneda. Técnicamente es un arbitraje incompleto ya que los bancos centrales se hacen cargo de abastecer las solicitudes de moneda extranjera sin recibir la totalidad del aprovisionamiento de ellas.

En otras regiones económicas los movimientos de capital se realizan mediante bancos autorizados para liquidar (clearance) las operaciones con la conversión entre monedas, que es el caso de los acuerdos establecidos entre bancos chinos y bancos corresponsales en Londres, Frankfurt, Nueva York y Toronto.

Un aspecto adicional que conviene no olvidar es que China ha mantenido su solicitud de que el yuan sea considerado como divisa para el cálculo de los DEG del FMI, lo cual es discutible y significaría el pleno reconocimiento a la calidad de divisa de su moneda.

El conocido refrán de sentir las piedras para cruzar el río sigue siendo útil para describir la velocidad de las reformas financieras, quedando claro que China no arriesgará avances de liberalización financiera que presionen su sistema bancario doméstico que sigue teniendo controles gubernamentales, apoyos opacos y riesgosas contabilidades.

*Este artículo de opinión fue publicado originalmente en el Reporte Macroeconómico de México, Noviembre 2014.

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