Pasar al contenido principal

ES / EN

¿Podrán las ciudades europeas aprender de América Latina?
Jue, 17/04/2014 - 09:02

Carolina Piedrafita

Carolina Piedrafita
Carolina Piedrafita

Carolina Piedrafita es Especialista Senior en Desarrollo Urbano y Vivienda. Ha trabajado en proyectos de desarrollo social y urbano en casi toda la región, especialmente en Brasil, México, Argentina, Uruguay, Ecuador, Colombia, Chile y Bolivia. En la actualidad lidera proyectos de desarrollo urbano y vivienda en México y Suriname. Antes del BID, trabajó en el Banco Mundial, en la división de infraestructura, finanzas y sector privado para la región de América Latina. Posee un Master en Administración Publica con especialidad en desarrollo urbano de la Universidad de Columbia, y es licenciada en Ciencias Políticas de la Universidad de San Andrés, Argentina.

El sistema de bus rápido (Linha Verde) que se inventó en Curitiba, Brasil, a principios de los años 70, hoy existe en Bogotá, Ciudad de México, Río de Janeiro, Guadalajara, Brisbane (Australia), Estambul (Turquía), Jakarta (Indonesia) y Guangzhou (China).

Los ejemplos abundan. El boom del “urbanismo social” que lidera Medellín fue inspirado -según admiten sus responsables- por las intervenciones urbanas integrales que visitaron en Río de Janeiro y en Barcelona, cuando esta última se preparaba para las olimpiadas.

Los seres humanos aprenden de los libros o de los errores propios, pero también conociendo la experiencia de los demás. Este principio aplica también a las ciudades. Y por eso hay una fascinante historia detrás de cada innovación urbana.

Las soluciones específicas siempre necesitan algún grado de adaptación local, pero el diálogo entre ciudades es el primer paso. Una iniciativa interesante es Urbelac, una red de ciudades europeas, latinoamericanas y del Caribe. Existe desde el 2010 y busca fomentar el desarrollo sostenible. Tradicionalmente, las ciudades europeas han sido tutoras de las ciudades latinoamericanas. Así fue en la primera etapa de Urbelac. Pero desde la segunda etapa, dos años después, todas las ciudades pueden ser tutoras o tutoradas.

¿Qué puede aprender de América Latina, Edimburgo, ciudad declarada en 1480 “la más importante del Reino de Escocia”? ¿Qué puede aprender Venecia, una ciudad tan rica que ya en el año 828 tenía una basílica con preciadas reliquias?

En Urbelac las buenas ideas importan más que la historia. Por eso Mar del Plata (Argentina) lidera el grupo en temas de movilidad sustentable, asesorando a Edimburgo y a Cuenca (Ecuador). Edimburgo a su vez asesora a las ciudades de La Laguna (España), Porto (Portugal) o Venecia (Italia) sobre cómo fomentar la participación ciudadana en la gestión del Centro Histórico.

Las buenas ideas necesitan buenos promotores, y por eso esta red se dirige directamente a políticos y técnicos municipales. El esquema de colaboración es bianual, y se basa en la agrupación de problemáticas urbanas en tres ejes (modelo de gestión de áreas urbanas específicas, ciudad compacta y turismo).

Ahora viene una tercera etapa de colaboración con nuevas ciudades el 2014/2015. En base a los resultados del 2012/2013 podremos saber cuánto han aprendido las centenarias ciudades de Europa de sus pares en América Latina.

*Esta columna fue publicada originalmente en el blog Urbe & Orbe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).