Complicado escenario tienen hoy las autoridades de Guerrero. Han dejado desde hace tanto tiempo que la Ceteg haga y deshaga en las plazas, en las calles, en las casetas, en el Congreso local, en las oficinas de gobierno, en las empresas privadas (como Coca-Cola), en los aeropuertos... en las autopistas. Ayer y el sábado escribíamos aquí al respecto. Los han dejado operar y violentar el ya de por sí violentado clima del estado. Ahora, los integrantes de esta Coordinadora ya tienen lo que querían: cargar con el mantra de víctimas, la sombra que se hace caldo de cultivo para vivir muchos años más en la impunidad. Ganar así un poco más de respaldo porque “pobres, miren cómo los tratan”.

Jamás podremos justificar que alguien pierda la vida. Mucho menos en las condiciones como las que se dio la muerte del profesor jubilado Claudio Castillo Peña. Pero sí debemos entender la coyuntura: la Ceteg se ha encargado de romper sistemáticamente la ley y de asegurarse de que ésta no los toque ni con el pétalo del Código Civil (ya no diga usted penal). Oh, pero claro, ellos pueden robar porque están realizando “actos de protesta”, quemar camiones, destruir instalaciones, incendiar edificios, secuestrar personas... Ayer las calles de Chilpancingo y Acapulco se llenaron de nuevo de miembros de la CETEG, en protesta por lo ocurrido la noche de Acapulco. El desafortunado enfrentamiento entre cetegistas y la Policía Federal se dio en pleno curso del Abierto Mexicano de Tenis, uno de los más importantes eventos que se realizan en el puerto y que tanto oxígeno representan para la población del puerto que vive casi en su totalidad de la actividad turística. Los maestros guerrerenses en contra de los ciudadanos guerrerenses. ¡Vaya cosa!

Me contó ayer en entrevista Raúl Domingo Miliani Sabido, secretario de Protección Civil de Guerrero:

“Había un grupo de granaderos y tenía enfrente a los manifestantes que avanzaron en el camión, y que atropelló a las filas de la Policía Federal, en donde resultaron 15 policías lesionados. De ahí que la PF repelió la agresión, el camión se echa en reversa y atropella a los manifestantes que estaban detrás suyo. Adicionalmente a esto, al momento de dispersarlos en el operativo de repeler la agresión, algunos quedan resguardados en la instalación de Protección Civil, en nuestra base ahí en Diamante (...) posteriormente la propia PF empezó a acercar a las personas que resultaron lesionadas a nuestras instalaciones para recibir atención hospitalaria...”.

“A las 19.35 horas fue trasladado el maestro de apellido Castillo por la ambulancia 309 de la Cruz Roja Mexicana; es la persona que falleció en la madrugada de hoy...”.

Los miembros de la Ceteg han anunciado más protestas: para ellos la muerte del profesor -quien por su edad y estado de salud, 65 años, poliomielitis que lo obligaba a caminar con un bastón- es responsabilidad del Estado. ¡Obviamente! Jamás van a reconocer su falta de tacto ni sus actos vandálicos ni su falta de sentido común. Claman represión, pero jamás admitirán que la agresión, en primera instancia, provino de sus propias filas, al utilizar un camión para embestir contra los uniformados. Lo importante para este caso será saber qué fue lo que realmente lesionó al profesor. Ahí está la clave para tirar los argumentos y posturas de los cetegistas. Por ello pregunté también a Miliani Sabido:

–¿Hay certeza de que el traumatismo que recibió en los enfrentamientos se debe a agresión policiaca o es resultado del embate del camión que los atropelló cuando se echó en reversa?

–No tenemos todavía ninguna certeza. El mecanismo de lesión se determinará por la necropsia de ley que estamos realizando y esto será lo concluyente: ¿qué tipo de lesión tuvo el profesor..?

–¿Cuándo lo sabremos?

–Los tiempos son los del Servicio Médico Forense. Yo no podría dar con certeza una fecha para que se entregue el resultado de la necropsia...

–¿Existe evidencia en video o fotografía en donde se vea que el profesor de 65 años de edad sea atacado por los granaderos  o, en su defecto, de cuando el camión los arrolló?

–No, eso lo tiene que hacer la Procuraduría...

Cosa curiosa es que ayer mismo maestros de la Ceteg responsabilizaron a Antonia Morales Vélez, dirigente de la Comisión Política de la Región Centro, de no haberles avisado que no habría reunión con Gobernación, el motivo que los llevó al lugar del enfrentamiento. Aunque lo terrible es que, mientras el resultado de la necropsia al profesor Castillo no se dé a conocer -y mientras las autoridades no apliquen la ley-, la Ceteg seguirá en las calles usando de carne de cañón a quienes no deberían asistir a manifestaciones que se caracterizan por las provocaciones y que suelen acabar en enfrentamientos en los que los propios policías todavía no están plenamente capacitados para observar, con absoluta pulcritud, los protocolos. Incluso cuando les vaya la propia vida de por medio...

*Esta columna fue publicada originalmente en Excelsior.com.mx.