Pasar al contenido principal

ES / EN

Bancos extranjeros en México no se asustan con efecto Trump y mantienen interés e inversiones en el país
Miércoles, Marzo 22, 2017 - 14:15

Prueba de esto son las nuevas inversiones que han anunciado en los últimos meses grupos financieros globales como Citigroup y BBVA, propietarios en México de Citibanamex y Bancomer, respectivamente, entre otras entidades.

Pese al entorno de incertidumbre provocado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la banca extranjera mantiene su interés e inversiones en México.

Prueba de esto son las nuevas inversiones que han anunciado en los últimos meses grupos financieros globales como Citigroup y BBVA, propietarios en México de Citibanamex y Bancomer, respectivamente, entre otras entidades.

A principios de octubre pasado, apenas un mes antes de la elección presidencial en Estados Unidos, uno de los principales grupos financieros de ese país, Citigroup, anunciaba una nueva inversión en México para los siguientes cuatro años por 25.000 millones de pesos (alrededor de US$1.322 millones), que es para mejorar la experiencia de los clientes, adicional a los 20.000 millones de pesos anunciados en el 2014.

“El verdadero anuncio es la inversión que estamos haciendo y lo que eso demuestra respecto de nuestra visión en el México del futuro. Ésta es la inversión más importante para Citi después de Estados Unidos”, indicó en aquella ocasión Ernesto Torres Cantú, director general de Grupo Financiero Banamex.

Michael Corbat, CEO de Citigroup, comentó por su parte que “esta inversión confirma nuestro compromiso con México y nuestra confianza en sus perspectivas”.

El compromiso de la institución estadounidense con el país fue ratificado a principios de marzo pasado, cuando Citibanamex realizó su reunión plenaria de Consejo, ante la presencia de la directora del grupo para América Latina, Jane Fraser. Ahí se destacó la importancia de México para la institución financiera global.

El español BBVA, por su parte, también en los primeros días de marzo pasado, anunció una nueva inversión para los próximos cuatro años en México, ahora por 1,500 millones de dólares, que se canalizarán principalmente a reforzar su estrategia digital. Este monto se suma a los US$3.500 millones anunciados en el 2013 y que incluyeron, entre otras cosas, la construcción de sus nuevas sedes corporativas y la remodelación de sus sucursales en modelos más digitales y multiservicios.

“Esta inversión va a ser mucho más de software, de big data, de inteligencia artificial”, mencionó en esa ocasión Francisco González, presidente de BBVA.

Ahí añadió: “La relación México-Estados Unidos es muy potente. Nuestra previsión de inversión no cambia en absoluto por la llegada de Trump, sino al revés, esto será una oportunidad para México en el tiempo”.

En diciembre del 2016, después de la elección de Estados Unidos, el español Santander también había anunciado una inversión por 15.000 millones de pesos (alrededor de US$800 millones) para los siguientes tres años. Se trata, dijo en aquella ocasión Héctor Grisi, director general del banco, de la inversión más grande desde que el grupo financiero llegó a México.

“Suceda lo que suceda, Santander tiene un compromiso con el país de largo plazo”, decía Grisi. Apenas hace unos días este banquero reiteraba que el efecto Trump no afecta en nada las inversiones del banco español en México.

Otro banco de capital extranjero, Scotiabank, inauguró también a principios de marzo pasado su Fábrica Digital en México, con lo que ratificó su compromiso con el país azteca. Directivos de esta institución canadiense han dicho que México es uno de sus mercados estratégicos por las ventajas que representa.

El español Banco Sabadell, por su parte, dio a conocer que en diciembre del 2016 hubo una nueva inyección de capital para su filial mexicana, misma que será utilizada para seguir con el otorgamiento de crédito a corporativos y grandes empresas. En estos meses se estaría dando otra inyección similar.

En general, estos bancos extranjeros que operan en México han indicado que la nueva Presidencia de Estados Unidos y su discurso proteccionista, en especial contra México, no ha modificado sus planes con el país azteca.

Más bancos globales operan aquí. Pero además de las inversiones, otros bancos extranjeros conservan su interés de venir a México a brindar servicios financieros en una sociedad aún sub-bancarizada.

En el 2016 iniciaron operaciones como tal el español Banco Sabadell y el Industrial and Commercial Bank of China (ICBC), este último uno de los más grandes del mundo.

Además fueron autorizados, aunque todavía no operan como tales, el Bank of China México y Banco S3, filial de Santander España, especializado en custodia de valores.

A éstos se suman otros bancos asiáticos que en años previos han sido autorizados, pero que aún no se les da luz verde para operar; tal es el caso del japonés Mizuho Bank y el coreano Shinhan Bank.

Tanto autoridades financieras como la Asociación de Bancos de México (ABM) han coincidido en que hay interés de otras instituciones financieras internacionales de entrar a operar en el país, aunque hasta la fecha, además de los que ya están autorizados, no hay nada concreto.

“México es un mercado enorme, lo que pasa es que a veces no dimensionamos lo que somos: 120 millones de habitantes. Es un mercado enorme, y por lo tanto es un mercado muy atractivo”, ha dicho Luis Robles, aún presidente de la ABM.

Hoy en día operan en el país 47 bancos (y cuatro están pendientes de iniciar labores), pero lo mayoría de los activos están concentrados en cinco que son de origen extranjero: BBVA Bancomer, Santander, Citibanamex, HSBC y Scotiabank.

Autores

El Economista (México)