Pasar al contenido principal

ES / EN

Panamá inaugura con euforia ampliación del Canal pese a la incertidumbre por el comercio mundial
Lunes, Junio 27, 2016 - 09:33

Tras recorrer los 80 kilómetros del Canal en unas ocho horas, el portacontenedores chino "COSCO Shipping Panamá" hizo historia al convertirse en el primer buque neopanamax en llegar a la esclusa de Cocolí, en el Océano Pacífico, tras salir de Agua Clara en el extremo Atlántico.

Ciudad de Panamá. Panamá inauguró este domingo la demorada ampliación de su célebre Canal interoceánico en un ambiente de júbilo en el país centroamericano, que ahora enfrenta el desafío de rentabilizar la obra de US$5.400 millones en momentos de incertidumbre para el comercio mundial.

Tras recorrer los 80 kilómetros del Canal en unas ocho horas, el portacontenedores chino "COSCO Shipping Panamá" de 9.472 TEUs hizo historia al convertirse en el primer buque neopanamax en llegar a la esclusa de Cocolí, en el Océano Pacífico, tras salir de Agua Clara en el extremo Atlántico.

Una década después de aprobarlo en un referendo, los panameños celebraban exultantes la expansión liderada desde 2009 por la española Sacyr y la italiana Salini Impregilo, y que se retrasó un año y medio respecto a la fecha original por sobrecostos, huelgas y fallas en la construcción.

"Ver esta gran obra me hace sentir verdaderamente orgulloso de ser panameño y de que hayamos recuperado el canal de Estados Unidos, por eso yo me propuse ser parte de esta historia", dijo Francisco Zurdo, obrero de 40 años que trabajó en el proyecto.

Pero al entusiasmo del estreno le sigue el reto de hacer rentable la arteria marítima, que ha dejado un conflicto judicial entre la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y el consorcio por sobrecostos de US$3.587 millones en un panorama marcado por la ralentización de la economía global.

"Nuestra nueva ruta de tránsito viene para impactar a la economía internacional (...) generando ahorros en el costo de transporte y permitiendo rutas más rentables con buques que pueden transportar tres veces más carga", dijo Jorque Quijano, jefe de la ACP, en el acto final.

Además, el Canal enfrenta desafíos como asegurar el agua dulce para mover las gigantescas esclusas, el manejo seguro de los buques neopanamax y los bajos precios del crudo que le restan competitividad frente a rutas como la de su competidor de Suez, que está haciendo rebajas para no perder clientes.

La ACP, un ente público autónomo, es optimista tras recibir 170 reservas de navieras para los tres primeros meses de operaciones y espera incrementar un 40% sus aportes al Estado en el primer año fiscal hasta US$1.400 millones, con un tránsito récord de 388.000 toneladas.

Ceremonia aguada. La obra triplica la capacidad de los buques hasta 14.000 TEUs (contenedores de 20 pies), con lo que el Canal puede aceptar ahora al 98% de la flota mundial activa.

Para 2021, el Canal ampliado -en el que trabajaron unas 40.000 personas, se utilizaron 292.000 toneladas de acero y 4,8 millones de metros cúbicos de concreto- llegaría a aportar más de US$2.100 millones anuales al Estado, o un 2,8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) panameño.

Apenas una docena de los 70 presidentes y jefes de Estado invitados asistían al estreno del tercer juego de esclusas, incluyendo mandatarios de Centroamérica y el Caribe, Chile, Paraguay y Taiwán, a los que se sumaron directivos de las mayores navieras del mundo.

La Cancillería panameña consideró el acto un éxito diplomático por la asistencia de representantes de casi todos los países invitados, incluyendo grandes clientes como China, Japón, Perú, Corea del Sur, Colombia y México.

Pero analistas creen que el nivel de las delegaciones se vio afectado por la filtración en abril de millones de documentos del bufete de abogados panameño Mossack Fonseca, que puso en evidencia cómo ricos y poderosos de todos el mundo utilizan sociedades offshore para evadir impuestos y lavar capitales.

La delegación estadounidenses fue encabezada por Jill Biden, esposa del vicepresidente Joe Biden, pese a que se llegó a esperar la asistencia de Barack Obama, dado que el país norteamericano terminó el canal en 1914, lo controló hasta 1999 y sigue siendo su principal usuario.

"Desafortunadamente, sí ha habido una afectación en la reputación (por los Papeles) y eso indudablemente afecta al clima de negocios, incluyendo al Canal de Panamá", dijo el analista comercial Ernesto Bazán.

Autores

Reuters