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Qué es el ''turismo oscuro'' y qué destinos ofrece México
Martes, Julio 19, 2016 - 09:51

Lugares emblemáticos para el narcotráfico, la guerrilla o la inmigración ilegal atraen a visitantes.

México ofrece una riqueza impactante no solo para quien busca playa, sol o sitios históricos, por sus condiciones culturales y tradicionales, resulta un campo fértil para el llamado “turismo oscuro”, con destinos ligados a la muerte, el riesgo, el desastre o a lo macabro.
 
El investigador del Instituto de Geografía de la UNAM Álvaro López señaló que aunque no se sabe desde cuando se practican este tipo de actividades, cada vez hay más interés por conocer sitios con esas características, pese a la falta de difusión.
 
En Ixmiquilpan, Hidalgo, en una localidad llamada El Alberto se oferta la ‘caminata nocturna’, donde los turistas simulan ser ilegales que pretenden cruzar a Estados Unidos. Los locales representan a los polleros o a la migra.
 
El terreno es agreste, el viaje incómodo, y a lo largo del recorrido los visitantes se encuentran con cholos que los quieren asaltar, narcotraficantes y la migra. El lenguaje y el trato son fuertes, y la situación puede durar dos horas, o toda la noche, añadió.
 
 
Los "zapatours" son una alternativa que giran en torno al Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Inicialmente se enfocó a la venta de artesanías, pero hoy los propios zapatistas reciben viajantes con el fin de dar a conocer su movimiento.
 
A la gente le interesa conocer sitios ligados al narcotráfico, como la Torre Miramar, en Mazatlán, donde se capturó la penúltima vez al Chapo Guzmán; la capilla Jesús Malverde, en Culiacán, Sinaloa; o el panteón Jardines del Humaya, que se asume como el cementerio de los narcotraficantes en México.
 
En la Ciudad de México se encuentran casos como la Plaza de las Tres Culturas, que resulta atractiva no tanto por lo que simboliza, sino porque ahí se dio la matanza de estudiantes durante el Movimiento del 68, precisó Álvaro López.
 
Un caso interesante son los ‘tepitours’, donde además de mostrar al visitante algunas cuestiones del comercio informal, los habitantes del barrio bravo de Tepito exponen parte de su cultura urbana y buscan reivindicar su espacio, muchas veces considerado riesgoso. Ahí también se puede visitar el templo de la Santa Muerte, o los espacios por los que es considerado la cuna del box en México.
 
 
El experto explicó que se trata de una actividad económica lícita, promovida por la gente local como un modo de sobrevivencia, bajo el argumento de que la población conozca estos espacios para que no se vuelvan a repetir historias de guerra o muerte.
 
López trabaja en un proyecto en el que se analizan diversas expresiones de este tipo de turismo, para generar conocimiento a fin de eliminar los temores a conocer las realidades y manifestaciones sociales a través de diversas experiencias turísticas.
 
Entre las que se investigarán están las más comunes, como la celebración del Día de Muertos en el Lago de Pátzcuaro y localidades cercanas como Janitzio o Tzintzuntzan, en Michoacán, así como Huaquechula, Puebla, y otros estados.
 
“Al ofrecerse esta opción también se quitan ataduras sociales. Actualmente, hay mayor apertura y permisividad, las personas ya no se sienten avergonzadas de visitar espacios antes impensables porque ahí otros habían sufrido riesgo, dolor, tortura o muerte”, expuso.
 
A nivel mundial, los sitios más visitados en “turismo oscuro” son los túneles de Cu Chi, en Vietnam; la Zona Cero en Nueva York; un viaje en Mercedes Benz por el Eurotúnel, simulando el recorrido de la princesa Diana cuando murió, o hacer el recorrido del presidente Jonh F. Kennedy cuando fue asesinado.

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Excélsior/ LifeStyle