Flores, que está imputado por "perturbación de la paz pública", fue detenido el 13 de octubre en la capital paraguaya, once días después de que acudiera a filmar una manifestación de estudiantes paraguayos.
Asunción. Un juez rechazó este jueves el pedido de la Fiscalía de expulsar de Paraguay al activista chileno Patricio Javier Flores, en arresto domiciliario en la embajada de su país en Asunción tras participar de una protesta estudiantil.
Flores, que está imputado por "perturbación de la paz pública", fue detenido el 13 de octubre en la capital paraguaya, once días después de que acudiera a filmar una manifestación de estudiantes paraguayos.
"El juez resolvió rechazar el criterio de oportunidad solicitado por el fiscal y mandó el trámite al fiscal general del Estado", dijo a Efe Gustavo Noguera, defensor técnico de Flores.
Noguera explicó que el fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, tiene ahora un plazo de diez días para pronunciarse.
Según Noguera, la Fiscalía puede optar por reiterar el pedido de expulsión, pedir otro tipo de acuerdo o solicitar la elevación a juicio oral. La otra opción sería el sobreseimiento definitivo del caso, como quieren Flores y su defensa.
"Nosotros pedimos el sobreseimiento. Él (Flores) quiere demostrar su inocencia. Desde un principio dijo que no cometió ningún delito en este país. No acepta la expulsión y además quiere regresar a Paraguay", declaró Noguera.
Diversos grupos políticos y asociaciones estudiantiles estuvieron presentes en la audiencia preliminar, celebrada en el Palacio de Justicia, para mostrar su apoyo a Flores, militante del Partido Comunista chileno.
Flores permanece en la embajada de Chile de Asunción en arresto domiciliario y tiene prohibido comunicarse con el grupo de estudiantes paraguayos con el que participó en una manifestación el pasado 2 de octubre en el Ministerio de Educación.
En una entrevista a Efe tras su detención, Flores dijo que en el momento del arresto pensó que sufría un secuestro, porque tres personas de civil lo asaltaron en el centro de Asunción a punta de pistola sin identificarse y lo metieron en un vehículo.
La protesta en la que participó estaba convocada por la Federación Nacional de Estudiantes Secundarios (Fenaes) de Paraguay, que representa a unos 40.000 jóvenes de todo el país.
