Pasar al contenido principal

ES / EN

Oposición de Venezuela denuncia "ventajismo" tras derrota electoral y promete convocar a protestas
Lunes, Octubre 16, 2017 - 13:04

"Ayer fue particular el exagerado ventajismo por parte del Estado, porque esta no fue una lucha contra un partido del Gobierno, fue una lucha contra todo el Estado", dijo Carlos Ocariz, candidato opositor a la gobernación de Miranda.

Caracas. La oposición de Venezuela denunció al gobierno por "ventajismo" electoral luego de que el oficialismo fuera declarado el ganador de las elecciones a gobernadores, y prometió lanzar protestas pacíficas para cambiar el sistema electoral del atribulado país.

La coalición opositora desconoció los resultados del domingo, que contradijeron a los últimos sondeos que daban la ventaja a los rivales del presidente Nicolás Maduro en medio de una prolongada crisis económica que desató meses de protestas.

"Ayer fue particular el exagerado ventajismo por parte del Estado, porque esta no fue una lucha contra un partido del Gobierno, fue una lucha contra todo el Estado", dijo Carlos Ocariz, candidato opositor a la gobernación de Miranda.

Según el político opositor, muchos testigos de la coalición fueron sacados de centros de votación, la señal telefónica en centenares habría sido cortada para impedir la comunicación y mucha gente amedrentada para votar a favor del oficialismo.

"No es un tema solo de actas, va mucho más allá de las actas", sostuvo Ocariz. "Todo ese sistema fraudulento hizo que los resultados no fueran como la gente votó".

Los datos difundidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE) mostraron que el chavismo gobernante se hizo con al menos 17 de los 23 estados en disputa.

Antes de los comicios del domingo, los adversarios de Maduro dijeron que se enfrentaron a complicaciones como la inhabilitación de candidatos, confusas papeletas de votación y la reubicación de última hora de casi 300 centros de sufragio, algo que redujo la participación y las chances de la oposición.

El partido gobernante asegura que fue una elección limpia, pero por las restricciones legales locales no hubo observadores internacionales.

"Vamos hacer protestas pacíficas para hacer valer nuestros derechos", dijo Ocariz, que perdió a manos del oficialismo lo que era considerado un bastión opositor.

Con este escenario, algunos observadores creen que el clima político subirá de temperatura nuevamente, e incluso, que los llamados allanarían el camino para nuevas protestas como las que cobraron más de un centenar de vidas entre abril y julio.

"No hay dinero, comida, medicinas y sin embargo, según el Gobierno, ¿todos votaron por ellos?", se preguntó Gloria Torres, una jubilada de 56 años y antigua seguidora del fallecido líder Hugo Chávez, que confesó haber votado contra Maduro. "Al menos logramos que el mundo sepa que estamos en dictadura".

Pero aún no estaba claro el grado de apoyo que tendría el llamado a defender los votos en las calles, sobre todo después de que muchos adversarios del presidente terminaron frustrados porque las protestas no lograron su cometido: elecciones presidenciales, ayuda humanitaria para aliviar la escasez de medicinas y la liberación de cientos de "presos políticos".

Bajando el tono. Algunos dirigentes dentro de la oposición empezaban a poner en duda que se hubiese cometido fraude, como inicialmente denunciaron.

"Yo no hablaría de fraude, porque tienes que tener las pruebas y ¿dónde están las pruebas? Ventajismo es una cosa y fraude otra", dijo a Reuters el diputado opositor José Guerra.

"Los hechos son que el Gobierno sacó un poco menos de votos que en las parlamentarias de 2015 y nosotros sacamos muchísimo menos que en 2015 (...) A nosotros nos mató fue la abstención, nos hicimos daño nosotros mismos", agregó.

Durante las protestas, el logro más claro de la oposición fue alinear a la comunidad internacional con su reclamo de democracia y exigir sanciones más fuertes para debilitar el financiamiento de lo que llaman una "cúpula corrupta".

Las sanciones de Estados Unidos complicaron al Gobierno de Maduro el pago de millonarios compromisos internacionales. Y Washington pidió a la Unión Europea sumarse a sus medidas contra la administración de Maduro.

El lunes, el ministro de Exteriores español, Alfonso Dastis, se mostró proclive a aclarar los resultados de las elecciones a gobernadores del domingo y Francia expresó su "preocupación".

Con nuevas sanciones, el gobierno de Venezuela sufriría más presión no sólo sobre los pagos de su millonaria deuda sino sobre la disponibilidad de alimentos y medicinas, ya que la mayoría son importadas por el propio Estado.

El precio de los bonos venezolanos que se negocian en el mercado internacional retrocedían en la jornada, por la preocupación de los inversionistas frente a los resultados de la votación y un retraso en el pago de intereses la semana pasada.

Después de una controvertida votación en julio para elegir una asamblea constituyente progubernamental, Smartmatic, la compañía que brindó la plataforma para el voto, dijo que los resultados habían sido manipulados, pero el gobierno lo negó. Una empresa argentina fue la que prestó el servicio el domingo.

Analistas temen que si persiste la duda sobre los resultados del domingo, se dificultará la participación de todas las facciones en las elecciones presidenciales, previstas para 2018.

"La UE y algunos de sus Estados miembros (subordinados a Trump), cuestionan la voluntad del Pueblo Venezolano", escribió en su cuenta de Twitter el canciller de Venezuela Jorge Arreaza. "Se comprueba así el plan alevoso y desesperado, concebido en capitales europeas días antes de las elecciones, para atacar nuestra democracia".

Autores

Reuters