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Católicos chilenos protestan por nombramiento de obispo vinculado a abuso sexual
Sábado, Marzo 21, 2015 - 16:33

Se trata de la designación del obispo Juan Barros, acusado de proteger al religioso Fernando Karadima, uno de los más conocidos pederastas del país.

Santiago. Cientos de católicos se reunieron el sábado en una iglesia de la pequeña ciudad chilena de Osorno para protestar por la designación del obispo Juan Barros, acusado de proteger a uno de los más conocidos pederastas del país.

El nombramiento desató la ira de muchos parroquianos y puso en duda la promesa del Papa Francisco de acabar con los abusos sexuales en la Iglesia.

Sus críticos dicen que Barros estaba al tanto y ayudó a encubrir los abusos del padre Fernando Karadima, cuyo caso es el más infame de varias acusaciones de pedofilia dentro de la Iglesia Católica en Chile.

En el 2011, Karadima fue hallado culpable por el Vaticano de abusar de niños adolescentes durante muchos años. Libre de cargos penales después de que la investigación en su contra naufragara por cuestiones técnicas, la Iglesia lo castigó prohibiéndole celebrar misas públicas.

Karadima fue mentor de varios sacerdotes jóvenes, incluyendo a Barros.

Juan Carlos Cruz, una víctima de Karadima que ahora vive en Estados Unidos dice que Barros hacía el "trabajo sucio" del cura pederasta, rompiendo cartas de víctimas que detallaban los abusos, y que el recién nombrado obispo estaba presente cuando los abusos ocurrieron.

"Esto contradice exactamente todo lo que ha dicho el Papa. Y sin embargo estando informado, el Papa lo nombró" a Barros como obispo, dijo Cruz a Reuters.

"Estábamos acostumbrados a las bofetadas de la jerarquía católica (en Chile) (...), pero recibirla de la propia mano del Santo Padre, esta bofetada es lo más triste", agregó.

Muchos católicos chilenos habían repudiado el planeado nombramiento.

El padre Alex Vigueras, superior provincial de la Congregación del Sagrado Corazón de Jesús y María en Chile, dijo esta semana que la designación los "dejó perplejos".

Unos 30 sacerdotes y diáconos de la zona de Osorno escribieron una carta el mes pasado al nuncio papal pidiendo la renuncia de Barros, y algunos políticos también cuestionaron el nombramiento.

Barros ha buscado distanciarse de Karadima y niega haber tenido conocimiento de los abusos.

Autores

Reuters