Pasar al contenido principal

ES / EN

Poder local
Lunes, Diciembre 17, 2012 - 14:57

El mapa del poder económico está cambiando en América Latina. Las 50 mayores operaciones de fusiones y adquisiciones muestran una retirada de capitales europeos y una consolidación de grandes actores locales.

La noticia tomó a muchos por sorpresa: a mediados de octubre el Grupo Cencosud, controlado por el empresario chileno-alemán Horst Paulmann, anunció un acuerdo para comprar las operaciones de la francesa Carrefour en Colombia: US$ 2.600 millones por una robusta red de hipermercados, tiendas de conveniencia, gasolineras y tiendas de menor formato.

La operación no fue la más grande del año, pero es significativa por varios motivos, y dice mucho respecto del momento que viven los grandes grupos latinoamericanos. Tenemos a un actor regional del comercio al detalle que aprovecha el momento para ocupar el espacio que está dispuesto a dejar un peso pesado mundial.

“El menor ritmo de crecimiento en los países desarrollados ha llevado a las compañías que buscan oportunidades de crecimiento y diversificación de riesgo a buscar otros caminos”, enfatiza Peter Jancso, profesor de la Business School São Paulo en Brasil.

Según cifras compiladas por MergerMarkets, las 50 mayores fusiones y adquisiciones de empresas en América Latina suman un total de US$ 77.528. Casi la cuarta parte de estas operaciones correspondió a activos puestos en venta por empresas europeas. Exceptuando la compra del 49% de la mexicana Grupo Modelo por la cervecera belga Anheuser-Busch InBev, las grandes operaciones protagonizadas por compradores europeos se cuentan con los dedos de la mano.

“El buen nivel de crecimiento de las economías de países como Brasil, Chile, Colombia y Perú y el aumento de liquidez de los mercados han potenciado a la región”, explica Jorge Ardiles, profesor de la Universidad del Desarrollo (UDD) en Chile.

De acuerdo al académico, hay varias ideas centrales detrás de las fusiones y adquisiciones que se han sucedido este año en la región: el buen nivel de crecimiento experimentado en Latinoamérica, la liquidez del mercado y la crisis económica que ha llevado a muchos grupos europeos a buscar compradores para sus activos en América Latina. Ardiles cita también entre los factores la gran cantidad de empresas familiares con proyecciones, que por conflictos internos y por falta de sucesión han preferido vender, y los procesos de reorganización que han iniciado varios de los más importantes grupos empresariales.

Según cifras de la CEPAL, la inversión extranjera en América Latina creció durante el primer semestre de 2012 en torno a un 8%. Pero el dato clave es que las inversiones latinoamericanas en el exterior crecieron un 129%, en particular en los sectores de minería e hidrocarburos. En otras palabras, se está viviendo una nueva oleada de consolidación de los grandes grupos regionales y reconfigurando un mapa económico que hasta hace no mucho estaba dominado por conglomerados del primer mundo.

2137

Fórmula para crecer

Las 50 mayores operaciones de F&A en la región reproducen la escala económica de los países, ajustada por las perspectivas económicas y los factores que tornan a cada país relativamente atractivo o riesgoso para la inversión extranjera.

“Por un lado está Argentina, con políticas económicas que no son beneficiosas para el país y que ha repercutido en un éxodo de capitales. Por el otro, nos encontramos con la consolidación de Chile, el crecimiento de Perú y la confianza en Colombia, explica Gonzalo Jiménez, director del Centro de Empresas Familiares de la Universidad Adolfo Ibáñez en Chile.

En el caso de Chile, sólo durante los primeros nueve meses de este año tuvo 118 operaciones de este tipo, superando con creces lo sucedido el año anterior cuando sólo llegó a 71 operaciones. En el ránking de las 50 mayores, las operaciones con foco en Chile sumaron  en torno a los US$ 8.344 millones. El principal movimiento empresarial fue el que protagonizó Principal Financial Group con el Grupo Cruz del Sur.

En contraste con la hiperactividad observada en Chile, en Argentina se realizó apenas una operación entre las 50 mayores: el banco suizo UBS vendió el 36% de la cadena Jumbo Retail en US$ 484 millones a… Cencosud.

En Brasil se realizaron 25 de las 50 mayores operaciones de la región, por un contundente total de US$ 32.961 millones. Y en la mitad de ellas el comprador fue otra empresa brasileña. Es el caso de Itaú Unibanco, que realizó la segunda mayor operación del año: compró el 44% de Redecard S.A. por US$ 5.184 millones. “Esta transacción en particular se dio por tres motivos: la evolución del mercado de transacciones electrónicas, el análisis de los costos y beneficios, y las potenciales sinergias de que el banco se convirtiese en dueño de un 100% de la compañía e integrara la compañía a las actividades financieras”, explica Peter Jancso, profesor de la Business School São Paulo en Brasil.

Las cifras de México estuvieron sesgadas por una operación inusualmente grande: la compra de Modelo por Anheuser-Busch InBev, por US$ 20.100 millones.  “Esto habla de que los grupos empresariales que tienen una fuerte posición financiera salen a comprar empresas en la región que están a buen precio y buscan expandir sus productos actuales y entrar a nuevos mercados”, explica Norma Hernández, directora de Finanzas y Economía de la EGADE Business School.

En Perú se registraron dos operaciones importantes, por un total de US$ 1.180 millones. Ambas dan cuenta de los sectores que están moviendo esta economía: la minería y la construcción.

Colombia, por su parte, presenta indicadores positivos de desempeño económico, como el aumento de la inversión extranjera directa, la firma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, la obtención del grado de inversión y la disminución de la pobreza. Ellos explican en su conjunto el incremento que registran año a año las fusiones y adquisiciones en este país, las que alcanzaron un total de US$ 6.245 millones. “El sector financiero ha tenido un proceso de globalización y consolidación de los grupos mayoritarios en el país”, explica Diego Cardona, profesor de la Universidad del Rosario en Colombia.

Queda por ver el impacto de la reciente crisis de Interbolsa, la mayor firma comisionista del país, situación que genera incertidumbre “no sólo por el impacto sobre sus clientes, sino por la desconfianza en el mercado de valores y las medidas regulatorias que puedan surgir”, según indica Luz María Rivas Montoya, de la EAFIT.

Durante 2013 la situación observada en los primeros trimestres del año no debiera cambiar. Nada lleva a pensar que las multinacionales europeas (en particular las españolas) terminen de ordenar la casa y vuelvan a la carga en América Latina. De mantenerse el actual ritmo de crecimiento y el actual escenario financiero internacional, sólo cabe esperar que los grupos locales sigan creciendo.

Autores

Tamara Muñoz