Entérese del futuro de la economía peruana, según el ministro Luis Miguel Castilla
El titular del MEF da cuenta de las reformas que se darán el próximo año. Cambios en la distribución del canon, la flexibilización del mercado laboral y una modificación integral de la Ley de Contrataciones del Estado están en la agenda.
-El 2013 resultó más volátil de lo esperado.
-Ha sido un año que ha afectado al mundo entero. Inicialmente se preveía que el mundo iba a crecer a tasas mayores y acabó con una revisión a la baja en los países industrializados, como EE.UU. y Europa, y especialmente los países emergentes. Los más grandes –China, India, Brasil y México– han crecido por debajo de lo esperado. Eso evidentemente ha tenido un impacto en la economía peruana. Un punto menos de crecimiento en el mundo tiende a volar un punto de crecimiento al Perú. Y esto es lo que ha pasado.
-¿Qué hechos afectaron más?
-Los dos hechos exógenos que no se preveían a comienzos del año fueron el deterioro mayor de lo esperado en términos de intercambio. Experimentamos una caída importante en los precios de los metales que exportamos y a la vez un incremento del petróleo que importamos. Ese fue el primer shock y corresponde a China, que crece debajo de lo esperado. El otro shock que afectó fue el anuncio del retiro del estímulo monetario por parte de la Reserva Federal, pues provocó una salida importante [de capitales] y una recomposición en el portafolio de los inversionistas. Ambos factores han hecho que el crecimiento previsto a inicios del año en torno al 6,3% no sea tal. Dicho eso, vamos a tener el crecimiento más alto de la región. De hecho, en su último pronóstico, el Fondo Monetario Internacional [FMI] publica que el crecimiento peruano que duplica el promedio de América Latina.
-¿Cómo viene 2014?
-Tendremos un año mucho mejor sustentado en cuatro factores. Primero, la recuperación del mundo, especialmente de EE.UU. y China. Segundo, van a entrar varios proyectos mineros en producción, como Toromocho, y ampliaciones como Cerro Verde, Antamina. Lo tercero es que comienza la construcción de importantes obras de infraestructura que se van a dar en concesión. Se inicia la construcción de la línea 2 del Metro y del aeropuerto de Chincheros. Además se continúan con distintos tramos de la Longitudinal de la Sierra, comienza el tendido de la red de fibra óptica del país y hay un compromiso de dar fibra óptica a las 195 capitales del país. Por lo tanto va a haber un shock de inversiones fuerte en el ámbito de las asociaciones público-privadas (APP).
Lo cuarto, tiene que ver con todo este esfuerzo por lograr destrabar las inversiones. De hecho, en mayo, el presidente Humala declaró como hecho de importancia nacional la inversión en todas sus denominaciones: pública, privada y público-privada. Se creó un grupo especializado en el MEF y han salido un conjunto de normas para poder facilitar los procesos de permisos, de barreras burocráticas, y esto obviamente ha alentado una recuperación de la confianza empresarial.
Quizá un quinto aspecto sea que tenemos una economía con un amplio potencial de crecimiento. Hay muchos sectores que aún son pequeños comparados con el nivel de ingresos. El sector bancario es pequeño, el hipotecario también lo es comparado con el nivel de ingresos, la poca penetración que hay en servicios y centros comerciales. Todo eso vislumbra un crecimiento de la demanda interna que va a continuar.
-¿Cuánto creceremos en 2014?
-La conjunción de estos cinco aspectos vislumbra un crecimiento cercano o por encima del 6%. Obviamente aquí los grandes supuestos son que el mundo se recupera, y eso presume un rebalanceo ordenado de crecimiento de la economía china, más basado en el consumo y que mantenga una tasa de 7% a 8% y un retiro del estímulo ordenado por la Reserva Federal de EE.UU. Bajo esos dos supuestos, y de no mediar ningún accidente petrolero de alguna índole geopolítica que no se controle, entraremos hacia 2014 con una mejor perspectiva de crecimiento, generación de empleo y reducción de pobreza.
-¿Este año cuánto crecemos?
-El crecimiento va a tocar fondo en el tercer trimestre del año con tasas alrededor de 4,5%. No obstante, a partir del último trimestre se vislumbra una recuperación importante, y ya estamos viendo indicadores líderes de crecimiento de la recaudación por concepto de IGV, crecimiento de la electricidad en torno al 8%, y una recuperación a partir de octubre de la construcción. Por ello, hay indicios para estimar que la economía va a crecer en torno a 5,5% este año.
-En el año se habló de vacas gordas y vacas flacas. ¿Esta época de vacas gordas ha sido bien aprovechada en cuanto a hacer lo que se tiene que hacer para sostener el crecimiento?
-Nos plantearon esa pregunta cuando participamos recientemente en las juntas anuales del FMI y del BM, y se aplica básicamente a las economías emergentes. En cómo vamos a desempeñarnos si pasaban estas épocas extraordinarias de los altos precios de los commodities y costos de capital básicamente cero. Pongo las cosas en perspectiva porque los precios siguen estando en picos históricos, pues el precio del cobre todavía está en 35% o 40% por encima del promedio de la década anterior y el del oro a casi el doble del promedio de hace diez años. No obstante, lo que hemos hecho en las épocas de mayor bonanza ha sido reducir nuestros pasivos, de tal manera que nuestro nivel de deuda es bastante bajo. Lo segundo es que acumulamos ahorro público para poder enfrentar cambios de volatilidad en los mercados y lo tercero es que duplicamos la tasa de inversión pública. Antes de la bonanza la tasa estaba por debajo de 3 puntos del PIB; ahora supera los 6 puntos. Y han sido inversiones principalmente en el stock de capital físico.
Obviamente aún tenemos tareas fundamentales, y capaz para poder sostener el crecimiento hacia adelante tenemos que ir más allá de esto. Tenemos que implementar reformas que mejoren la productividad, que mejoren la efectividad del Estado, la eficiencia del Estado y que puedan en cierta forma apalancar el desarrollo hacia producción con mayor valor agregado partiendo de la base que somos un país rico en recursos naturales. Sin embargo, lo que hemos hecho hasta la fecha nos posiciona de manera importante. Tenemos una posición envidiable reconocida por las agencias calificadoras de riesgo. De hecho, una de ellas menciona que parte del sustento de haber incrementado la calificación crediticia del Perú es que comparado con un grupo de países con igual nota, el Perú ha tenido el mayor crecimiento económico, manteniendo fundamentos macroeconómicos sólidos.
-Hace un año comentó a AméricaEconomía los planes en cuanto a reformas para 2013. ¿Cómo van estas?
-Estaba revisando la edición de hace un año [AméricaEconomía Perú No. 056]y pasaba revista a las reformas que habíamos planificado para este año, y muchas de ellas se han cumplido, si no todas. Nos propusimos comenzar a modernizar el Estado, y esto se ha reflejado en dos aspectos: uno, tiene que ver con la promulgación y ahora la reglamentación de la Ley del Servicio Civil. Lo principal de esta reforma fue añadir meritocracia al servicio civil, una línea de carrera, evaluación para tener un estado eficiente porque tiene un capital humano de calidad y que podamos captar talento del sector privado. El segundo componente tiene que ver con todo este esfuerzo de destrabar las inversiones y hacer mucho más fácil y menos costoso lidiar con el Estado, tanto para el ciudadano como para la empresa, y hemos aprobado leyes y reglamentos que van en esa dirección.
Un segundo ámbito de reformas donde avanzamos ha sido en lo que se refiere a profundizar el Mercado de Capitales y a democratizarlo. Hemos aprobado una reforma importante que está en proceso de reglamentación cuyo principal objeto era reducir los costos para entrar en el mercado, y así sea mucho más receptivo en empresas de menor tamaño. A esta reforma la acompañan otras dos que van en paralelo. Una es la actualización del Código del Buen Gobierno Corporativo, especialmente para empresas de corte familiar, y otra es todo el proceso de adecuación y de mayor integración a la normatividad de nuestros vecinos de la Alianza del Pacífico. De hecho ha habido dos reuniones con mis pares de la Alianza del Pacífico y se ha convenido en una agenda para poder profundizar la integración financiera, tomando al MILA como base, pero yendo más allá.
-¿Qué otras reformas hubo?
-Hemos trabajado en poder institucionalizar el buen manejo fiscal. Hace más de un año se creó una comisión independiente de expertos en el marco del plan de reformas para aprobar una nueva Ley de Fortalecimiento de la Responsabilidad de la Transparencia Fiscal. Así, recientemente el Congreso ha aprobado un mejoramiento de este marco legal que tiene tres atributos importantes. Lo primero es que desvincula el ciclo de precios con el objetivo de tener mayor predictibilidad en el tiempo para poder fomentar inversiones y gasto público. Lo segundo es tener reglas fiscales a nivel de los gobiernos regionales y locales que sean más simples y, por lo tanto, más fácil de cumplir y que si no se cumplen, haya correctivos de ser el caso. Lo mismo aplica para el cumplimiento por parte del gobierno nacional. Y el tercer componente tiene que ver con construir una institucionalidad fiscal que sea más transparente y que haya una rendición de cuentas más constante.
Finalmente está la implementación de la reforma del sistema privado de pensiones que ha tenido dos episodios. Más allá de la fase inicial de lograr una mayor competencia en el mercado y una reducción de las comisiones, se optó por lograr una mayor cobertura homologando el tratamiento de los trabajadores dependientes e independientes.
LAS REFORMAS QUE VIENEN
-¿En qué reformas trabajarán hacia adelante?
-La primera tiene que ver con la eficiencia en el gasto. Cuando hablamos de presupuesto por resultado tenemos evaluaciones independientes, pero encontramos que la Ley de Contrataciones tiende a ser un corsé que limita el uso eficiente de los recursos públicos. Por ello se está planteando un proyecto de reforma integral de la Ley de Contrataciones del Estado para ser más eficientes, obviamente velando por el buen uso de los recursos públicos. Estamos yendo hacia un esquema de una ley menos reglamentarista, más principista y que dé un poco más de flexibilidad para lograr una mayor eficiencia en el manejo de los recursos públicos.
La segunda reforma tiene que ver con la reducción del impuesto a la renta que pagan las empresas mineras y que se ha traducido en una reducción de transferencias por concepto de canon.
-¿Está pensando en un cambio en la distribución del canon?
-De hecho eso fue parte de la reflexión que el presidente de la República mencionó en su discurso por Fiestas Patrias, que tiene que ver cuán efectiva es la descentralización en el país. Y evidentemente eso pasa por revisar cómo se vinculan las regiones con el gobierno nacional y en particular cómo se reparte la renta minera.
-¿Qué aspectos contiene la reforma de distribución del canon?
-Tendría tres componentes. Uno que tiene que ver con una mejor distribución dentro de una misma región. Lo segundo tiene que ver con una mayor eficiencia en el uso de los recursos por canon que tienden a incrementarse en saldo de balance que tienen los gobiernos locales y regionales, y tercero tiene que ver con tratar de suavizar el patrón de ingresos por concepto de canon creando un fondo de estabilización regional, donde los gobiernos locales y regionales puedan ahorrar parte de sus recursos para compensar épocas en que se les reduzca el ingreso por efecto de caídas de precios, como hemos visto últimamente.
-¿Cuál es la tercera reforma?
-Tiene que ver con aquellos aspectos que incidan en una mayor productividad del país, una mayor agregación de valor y competitividad en general. Está anunciado un plan de desarrollo industrial en el país, que está llevando adelante el Ministerio de la Producción de manera consensuada con distintos sectores. Pero creemos que un factor muy importante en esta mejora de la productividad es atacar los altos índices de informalidad laboral que aún tiene el país, y esto pasa por ver modalidades y ver cuáles se tienen que mejorar para ser formal.
De hecho en una ley que aprobamos en julio hemos, en cierta forma, calibrado las distintas responsabilidades que tienen las empresas de menor tamaño, léase, responsabilidades laborales y tributarias, al tamaño de la empresa por rentas. El objetivo es ver la manera de generarles costos de formalidad que sean adecuados y que no sean sobrecostos que finalmente incidan en una mayor informalidad.Obviamente es un tema que demanda una mayor discusión. Respecto a la flexibilidad del mercado laboral, tenemos un buen ejemplo, que es lo que se hizo en el régimen agrícola. Se trata de un sector que tuvo ciertas reglas de juego, un sector atomizado y altamente informal y que luego de diez años tuvo un salto importante en formalización y en productividad. Se redujeron sobrecostos laborales y la carga social, por ejemplo se paga a EsSalud. Hubo una reducción de los impuestos e incluyeron una modalidad de contratación que era idónea para la actividad agrícola, y eso en cierta forma explica el boom agroexportador que hemos tenido y la mayor formalización. Entonces yo creo que de cara a esta experiencia debemos plantear qué tipo de mercado laboral requerimos para afrontar un mundo más competitivo donde la productividad diferencie a los países más exitosos de los menos exitosos y poder efectivamente beneficiarnos de la apertura que hemos realizado, de los TLC. Tenemos una clara apuesta por la apertura, pero para que esta apertura reditúe en beneficios tenemos que mejorar la productividad y la competitividad, y esto pasa por atacar dos temas: la mejora de la infraestructura y del capital humano, que es parte de las reformas microeconómicas que el país requiere para seguir creciendo a tasas elevadas.
-Será muy complicado lograr una distribución del canon, pues se tendrá que quitar a los que reciben más, para dar a los que reciben menos. Además estamos cerca de las elecciones regionales. ¿Cómo piensa lograrlo?
-No hay peor reforma que la que no se intente. Mi propuesta es comenzar un proceso de diálogo para estos temas que son centrales. Tal vez el cambio de autoridades regionales y locales ayude porque todas estas leyes no las aplicarán las actuales, sino las que vienen. Pero, sin duda, no atacar estos problemas es esconder un elefante debajo de una alfombra porque tenemos problemas de distribución. Acordémonos que el distrito productor recibe hasta tres veces los recursos que reciben distritos que están fuera del distrito productor.
-¿Ya sondeó a las regiones?
-He conversado con un conjunto de presidentes regionales y habría cierto consenso de redistribuciones dentro de una misma región. Obviamente es fácil decirlo y complicado hacerlo, pero si logramos un consenso especialmente de cara a lo que piensan los gobiernos regionales y la mayoría de gobiernos locales podemos avanzar.
-¿Cómo ve al Perú en diez años, si seguimos con un crecimiento sostenido en cuanto a ubicación económica en la región, de cara al mundo?
-Definitivamente el crecimiento económico es el medio para poder generar empleo y oportunidades vía políticas públicas efectivas. Si logramos un crecimiento sostenido en el tiempo manteniendo la tasa con la que hemos venido creciendo de 6% anual en promedio no en los siguientes diez años, sino en los próximos 25 años, vamos a estar entre las 27 economías más importantes del mundo, y entre las 10 economías más dinámicas del mundo. Eso va a significar pasar a un estado de país de renta media alta. Aún tenemos un nivel de PIB per cápita que si bien se ha triplicado en los últimos diez años, todavía dista del nivel de ingreso per cápita que se observa en otros países, como Chile o Uruguay. Esperemos que si seguimos con este ritmo de expansión más políticas públicas efectivas que de cierta forma logren una mayor inclusión de todos los actores y ciudadanos del país vayamos a ser un país que supere la pobreza, de clase media pujante y de una economía relevante.
-Tiene casi dos años y medio al frente del MEF. ¿Hay Castilla para rato en el ministerio?
-Sí, en tanto el presidente de la República me reitere su confianza.
-¿No hay renuncias a la vista tal y como se comenta cada dos o tres semanas?
-No hay renuncias a la vista.