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5 claves de la historia y éxito del co-fundador de Instagram
Miércoles, Diciembre 31, 2014 - 08:00

Conoce las claves de Kevin Systrom, el emprendedor que creía tener todas las probabilidades de fracasar con Instagram, pero que consiguió precisamento lo contrario.

Instagram perteneció a esa primera oleada de redes sociales que saltaron a la fama de la nada. Sin publicidad, ni grandes campañas de marketing, sin modelo de negocios, fue meramente viral.

Kevin Systrom, su fundador, nació el 30 de diciembre de 1983 en Holliston , Massachusetts, se graduó de la Universidad de Stanford en 2006. Antes de crear Instagram tuvo varios trabajos en empresas de tecnología. Hizo una pasantía en Odeo, la empresa que daría origen a Twitter, también estuvo un par de años en Google en proyectos como Gmail y Google Reader.

A continuación te presentamos cinco cosas de Kevin Systrom, un emprendedor que desde siempre, encontró en la tecnología un lugar para desarrollar su creatividad.


1. Influencia emprendedora de su mamá

La actitud emprendedora de Kevin Systrom proviene de su mamá, ya que Diane Systrom trabajaba en empresas de tecnología. Ella participó en las primera generación de startups en plataformas como Monster.com y Zipcar.


2. El proyecto que nació en la universidad

Casi como un caso similar al de Mark Zuckerberg, Systrom comenzó a gestar la idea de Instagram durante sus días de universidad. La fotografía social aún no comenzaba, pero dentro de su escuela había un sistema para compartir imágenes entre la comunidad de estudiantes. Además, uno de sus profesores le presentó una cámara Holga y el resultado que tenían los filtros de las fotografías.

En sus empleos había conectado con Jack Dorsey, previo al lanzamiento de Twitter. Mientras que en Google había aprendido del gran movimiento corporativo, y de cómo hacer dinero con la tecnología.

3. En busca de un cofundador

Luego de tener las cosas claras, y de comenzar a perseguir su pasión por la fotografía, Systrom decidió que debía encontrar un cofundador. Como muchas empresas grandes de tecnología, Systrom tuvo el atino de notar que todas estaban conformadas por dúos, o a veces tríos, y al parecer eso era lo que funcionaba.

Se acercó a su amigo Mike Krieger para proponerle a trabajar en una plataforma de fotografía. En su momento Krieger también trabajaba en su propia aplicación. Para marzo de 2010, comenzaron a trabajar en la plataforma, la cual, convirtieron en una herramienta para fotografía hecha a la medida de la cámara del iPhone 4, y se incluyeron los “filtros” que eran similares a las lentes de la Holga.

Systrom pensó en el nombre como un “instant telegram”, el cual se convirtió en Instagram.


4. Desarrollo al revés

Trabajaron en la aplicación durante unas ocho semanas, dedicaron todo el tiempo que pudieron para entregar una plataforma bastante afinada y terminada. Desarrollaron tanto diseño, botones para compartir, filtros y código.

La noche del 6 de octubre decidieron lanzar la aplicación, mandaron algunos tweets para hablar sobre ella, y escribieron posts en blogs. Krieger y Systrom no esperaban mucho, pensaban que las probabilidades de fracasar eran muy grandes.


5. No planeaban crear una gran empresa

En 24 horas lograron obtener 25,000 usuarios. Las personas quedaron encantadas por la facilidad con que se podía manejar la aplicación, además, daba un toque único a las fotos y los colores que se podían dar a las imágenes.

En nueve meses consiguieron siete millones de usuarios y las celebridades comenzaron a adoptar la plataforma. Muchas personas dejaron de utilizar Facebook para compartir fotos porque Instagram era más adecuada para hacerlo.

Para abril del 2013 Facebook anunció la compra de Instagram, trato que se cerró en US$1.000 millones.

Autores

Excelsior.com.mx