Alta abstención electoral amenaza segunda vuelta presidencial en Chile
Si la candidata opositora Michelle Bachelet gana con un relativo bajo número de votos, sería la presidenta elegida con menos sufragios desde el retorno a la democracia en ese país en 1990.
Santiago, Xinhua. El "fantasma" de la abstención se ha posicionado en las candidaturas de la ex mandataria Michelle Bachelet y la oficialista Evelyn Matthei, con vistas a la segunda vuelta de los comicios para elegir al presidente de Chile el próximo 15 de diciembre.
En la primera vuelta del pasado domingo votaron unos seis millones de chilenos, menos del 50% del padrón electoral que llega a 13,5 millones, donde Bachelet obtuvo 46,67% de los votos frente a 25,01% de Matthei, quien logró la segunda mayoría entre un total de nueve candidatos.
Chile tiene un sistema de mayoría absoluta y como la ex mandataria no alcanzó el 50% más uno de los votos, ambas candidatas deberán enfrentarse en una segunda vuelta.
Todos los sondeos indican que es prácticamente imposible que Matthei pueda imponerse, pero si Bachelet gana con un relativo bajo número de votos, sería la presidenta elegida con menos sufragios desde el retorno a la democracia en 1990.
Para llevarse el triunfo, Matthei necesita que nueve de cada 10 electores que apoyaron alguna de las siete candidaturas alternativas en la primera vuelta votaran por ella, lo cual resulta casi imposible.
La candidata de la derecha insiste sin embargo que "es un desafío enorme y una tarea titánica, aunque no imposible".
Según los expertos, en caso de obtener de nuevo 25%, sería una catástrofe para su sector político.
El voto voluntario se estrenó en Chile el año pasado en las elecciones de alcaldes, con una baja participación ciudadana de casi 60% de los inscritos en el padrón electoral.
Más allá de las consecuencias electorales de la abstención, que no permitió el triunfo a Bachelet en primera vuelta, ésta demostró las trabas del sistema binominal electoral, que sólo favorece a las grandes coaliciones, La Nueva Mayoría, de la ex presidenta, y la Alianza por Chile, ahora en el gobierno, pero perjudica a los pequeños partidos.
La baja participación popular y la poca adhesión de los jóvenes a las elecciones han puesto en entredicho la eficacia de un sistema del voto voluntario.
"Más de la mitad de la gente no salió a votar y hay que buscar motivar a las personas para que lo hagan el día de la elección, porque muchos son votos más bien nuestros", dijo este miércoles Matthei.
Analistas indicaron que mucha gente no sufragó porque todos los sondeos coincidían en que Bachelet iba a obtener una victoria fácil y pensaban que era innecesaria acudir a los colegios electorales.
Esa apreciación puede repetirse el próximo 15 de diciembre, por eso, ambas candidatas reiteran sus llamados para que la gente no se quede en sus casas ese día.
La candidata de la Nueva Mayoría afirmó este miércoles que durante un eventual gobierno analizará el tema del voto voluntario.
"Yo siempre postule que el voto voluntario era importante porque obligaba al mundo político a hacer ofertas atractivas", pero "creo que hay que mirar el tema y ver cuál ha sido su efecto", dijo Bachelet.
En abril de 2011 el gobierno del presidente Sebastián Piñera emitió un documento, donde se abordaban "10 mitos" que existen sobre voto voluntario en el extranjero, al señalar que era un mecanismo más democrático que no dismiye la participación ciudadana ni perjudica a los más pobres.
Sin embargo, las elecciones municipales de 2012, las primarias en junio de 2013 y los pasados comicios presidenciales del último domingo cuestionan las conclusiones del informe.
Los análisis apuntan que la participación ha bajado y que son efectivamente los sectores acomodados quienes más van a votar, en desmedro de las zonas geográficas asociadas a sectores de menores ingresos, donde el caudal de votantes ha disminuido.
Un estudio de la Universidad Diego Portales analizó los datos entregados por el Servicio Electoral y representó la geolocalización de los votantes del pasado 17 domingo.
Según el profesor Mauricio Morales, los resultados "generan un problema para la democracia, porque a participación desigual, representación desigual, la cual se mantiene en todo el país".
Morales mencionó a la Región Metropolitana (la capital), que es particularmente desigual, y cada vez que hay elecciones los pobres se retiran de la política, en lugar de incluirse.
En su opinión "el desafío del voto voluntario, que consistía en incorporar más gente, está fracasando desde todo punto de vista, desde el punto de vista del volumen del votante, como desde la composición del votante", explicó.
"El gran problema es que con la voluntariedad se está elitizando más el voto, los ricos tienen mayor capacidad en la toma de decisiones", agregó.
Para el historiador Ricardo Nazer, "las masas ciudadanas se activan políticamente en momentos de crisis, fundamentalmente económicas y sociales y esta votación no se dio en un momento de crisis. En Chile todos los cambios políticos importantes se han producido a raíz de estas crisis y este modelo no ha enfrentado una".
Losdebates continuarán en el país sudamericano sobre el voto voluntario, pero el tema de abstención parece más profunda porque la política, los partidos políticos y las instituciones estatales registran un alto grado de descrédito, mientras los ciudadanos protestan y critican más por estar más empoderados que nunca en este siglo.