La Telemedicina es una realidad en los países desarrollados. Las naciones que están un peldaño más abajo, poco a poco la han ido adoptando.

En América Latina, la Telemedicina se ha convertido en un ejemplo de innovación. El video de alta definición interactivo y en tiempo real ha generado impactos significativos en el acceso, la calidad y la relación costo-eficiencia.

Hasta ahora, la forma más común de Telemedicina era la lectura de imágenes en modalidad “store and forwards”. Esto permitió que un radiólogo, por ejemplo, pudiera leer, interpretar y diagnosticar a 500 kilómetros de distancia y generar el mismo resultado que si estuviese ahí.

En la actualidad, se habla de “real time interactive video telemedicine” por la interacción médico-médico y con el paciente a través del video. La madurez del mercado permite expandir esto a países donde esta tendencia no está consolidada.

El gran valor de la Telemedicina para el médico es que gana productividad, ahorra tiempo y puede hacer consultas en lugares donde no hay especialistas. Como consecuencia, el paciente gana acceso igualitario y oportuno y calidad de la información.

Este enfoque de la Telemedicina es un planteamiento integral para la industria, entendiendo por ella no solo los hospitales y seguros médicos sino también las empresas farmacéuticas, bioquímicas, biotecnológicas, y los proveedores de equipos médicos.

Por ejemplo, Cisco desarrolló las “Redes de grados médicos”. En ella, han certificado a los proveedores en una sola red, lo que permite un trabajo en conjunto. Cisco también tiene acuerdos y certificaciones para “ecopartners” en todo el espectro de soluciones y aplicaciones.

La Telemedicina contempla además el cuidado a distancia, integración de equipos médicos y colaboración y educación médica continua. En integración se consideran los programas de capacitación al paciente y programas de entretenimiento (cómo será el postoperatorio a un paciente). La colaboración ayuda a resolver el gran capital humano que requiere cualquier intervención. Este ítem se liga con una capacitación médica continua.

Cuando nos imaginamos la Telemedicina, con el alto desarrollo de las redes de networking y la fuerte incorporación de tecnología de computación tanto en hospitales como en los hogares, vemos que ya estamos a punto de contar con soluciones que estén al alcance de los sistemas de salud públicos y privados.

Sin duda, la Telemedicina ya es una realidad que no sólo brinda grandes beneficios para los pacientes sino que también permite un mejor aprovechamiento de los profesionales médicos.