Quienes manejan las políticas de generación eólica están alejándose del modelo tradicional subvencionado a otro de subastas, que favorece a los promotores de parques que pueden hacer ofertas bajas, algo que a su vez ejerce una enorme presión en los fabricantes de equipos.

Fráncfort. El fabricante alemán de aerogeneradores Nordex siguió los pasos de otros rivales el martes al recortar su objetivo de ventas para 2017, señalando que la transición del sector hacia la adjudicación de pedidos a través de subastas de potencia está impactando tanto en los márgenes como en la demanda de su principal mercado europeo.    

Quienes manejan las políticas de generación eólica están alejándose del modelo tradicional subvencionado a otro de subastas, que favorece a los promotores de parques que pueden hacer ofertas bajas, algo que a su vez ejerce una enorme presión en los fabricantes de equipos.

Vestas, el mayor fabricante de turbinas eólicas del mundo, vio como sus acciones cayeron casi un 20% la semana pasada tras recortar su objetivo de beneficio anual, apuntando como causas a las subastas competitivas y los posibles cambios regulatorios en Estados Unidos.    

El jarro de agua fría de la compañía danesa se produjo a pocos días de que el número dos del mercado, la hispanogermana Siemens Gamesa, anunciase el despido de hasta 6.000 empleados o una quinta parte de su plantilla.