El gobierno del presidente Juan Manuel Santos y el ELN, la segunda fuerza rebelde de Colombia, comenzaron en febrero en Quito una negociación de paz en busca de poner fin a un conflicto de más de medio siglo.
Bogotá. Ecuador apoyará a Colombia para lograr la paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y seguirá siendo la sede permanente de los diálogos con esa guerrilla hasta que se consiga un acuerdo que permita poner fin por completo al conflicto armado, dijo este lunes su presidente electo, Lenín Moreno.
El gobierno del presidente Juan Manuel Santos y el ELN, la segunda fuerza rebelde de Colombia, comenzaron en febrero en Quito una negociación de paz en busca de poner fin a un conflicto de más de medio siglo que ha dejado 220.000 muertos y millones de desplazados.
El saliente presidente de Ecuador, Rafael Correa, ofreció el territorio de su país para que el Gobierno de Colombia y el ELN se sienten a buscar una solución negociada al fin de la confrontación, y su sucesor -ganador del balotaje presidencial en abril- anunció que continuará con los buenos oficios.
"Vuelvo a recalcar nuestra intención de que Ecuador, Quito en forma particular, sea la sede permanente, hasta que la paz se consiga", dijo Moreno después de una reunión con Santos en la sede de la Presidencia de Colombia.
"En eso comprometemos todo nuestro apoyo, toda nuestra ayuda, porque la paz es buena para ustedes, la paz es buena para nosotros, la paz es buena para todos", agregó el mandatario electo de Ecuador.
Santos firmó en el 2016 un acuerdo con las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) después de cuatro años de negociaciones en Cuba, y para lograr una paz completa con la insurgencia inició diálogos con el ELN.
Ese grupo rebelde, acusado de secuestros, asesinatos, ataques a la infraestructura económica así como de extorsiones a multinacionales petroleras y mineras a las que acusa de apoderarse de los recursos naturales del país, cuenta con unos 2.000 combatientes.
El ELN, que surgió en 1964 con el apoyo de sacerdotes católicos inspirado en la revolución cubana y es considerado por Estados Unidos y la Unión Europea como una organización terrorista, fue acusado por el gobierno del secuestro de ocho jóvenes en una zona selvática del departamento del Chocó.
