Comunicar a través de un post, una fotografía, un video y hasta con 140 caracteres son las maneras de relacionarse con los usuarios de las redes sociales. Un boom que hace ya unos años atrás ha generado que personas de todas las generaciones cuenten con más de algún perfil en las diversas redes sociales y vayan buscando la que más se acomode a sus necesidades.

En Chile, hay más de 9 millones de usuarios en Facebook y Twitter rodea los 5 millones de cuentas activas. La inserción de los chilenos no sólo se debe al fácil acceso a internet, sino que el gran aumento de dispositivos móviles conectados a la red. No es una cifra menor que por cada persona hayan dos celulares y casi el 52% de éstos cuente con acceso a la web.

Pinterest, Instagram, Facebook, Twitter y Youtube lo único que tienen en común es que son una herramienta para comunicarse entre usuarios, pero más allá de eso no tienen punto de encuentro y se diferencian por contenidos, perfil de usuarios, edades de usuarios, etc.

¿Sabías tú que pertenecer a una red social entrega detalles de tu perfil como consumidor? Facebook no comunica lo mismo que Instagram, y Twitter no se parece a la experiencia de Youtube. Es por esta razón que las empresas han puesto sus ojos y se han preocupado por el impacto que generan en los usuarios y han escogido la red social que las acerca a sus consumidores finales con mucho cuidado, y fundamentalmente, sin invadir ese espacio "privado".

No es una coincidencia que uno se encuentre con publicidad de alguna marca en Facebook o en Instagram, eso se debe a que ésa empresa decidió estar ahí por más de algún motivo. Realizar una campaña por Faceboook o Youtube, aparte de ser plataformas distintas, son mensajes completamente distintos, pero que se pueden parecer en cuanto a contenido, ya que tienen el mismo objetivo final, acercar al consumidor.

Las empresas deben tener un importante cuidado y ser conscientes de que con este tipo de plataformas la relación con su target objetivo deber ser manejado con cuidado, ya que pertenecer a todas las redes sociales no es sinónimo de llegar al público que queremos.

Un mensaje mal entregado es un cliente menos o un posible consumidor alejado. El ideal es llegar en el minuto adecuado, con la plataforma indicada y transmitir un mensaje claro.