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República Dominicana: líder en proyectos de Desarrollo Limpio
Lun, 27/08/2012 - 10:23

Yomayra J. Martino S.

Eco-etiquetado: desarrollo sostenible + innovación empresarial
Yomayra J. Martino S.

Yomayra Martino es abogada egresada de la Universidad Iberoamericana (UNIBE) de República Dominicana, consultora independiente, especialista en Derecho Ambiental, Energético y en temas empresariales. Magíster en Derecho de la Regulación Económica y en Derecho Ambiental Internacional. Dentro de su experiencia laboral se encuentra la coordinación de proyectos relacionados a formalización de micro y pequeñas empresas en República Dominicana a través de la Fundación Dominicana Compite y el Consejo Nacional de Competitividad. Fue asesora de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y del Centro de Orientación Integral (COIN). Adicionalmente se desempeña como docente de UNIBE y del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), y estuvo como profesora visitante en el Centro Payson de Desarrollo Internacional de la Universidad de Tulane, Estados Unidos.

Los Mecanismos de Desarrollo Limpio o MDL surgen con la adopción del Protocolo de Kyoto, en la ciudad del mismo nombre en el año 1997, dentro del marco de la Convención de Naciones Unidas sobre Cambio Climático. Kyoto promueve la reducción de las Emisiones de los Gases de Efecto Invernadero (GEI), las cuales provocan el fenómeno del calentamiento global o el cambio climático también llamados “greenhouse gases”.

Básicamente el MDL permite que la reducción de las emisiones se realice a través de un intercambio entre países desarrollados y en vía de desarrollo, donde el primero invierte en el segundo y a cambio obtiene una certificación de la reducción obtenida.

República Dominicana ha suscrito ambos instrumentos internacionales para el combate del cambio climático a nivel mundial. En este sentido para la aplicación de las obligaciones derivada de los mismos, estableció el Consejo Nacional para el Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo Limpio presidido por el presidente de la República Dominicana, compuesto por miembros de organizaciones y autoridades relevantes que trabajan este tema, y se compone de un Área de Administración, Oficina de Cambio Climático y la Oficina de Mecanismo de Desarrollo Limpio que funge como Autoridad Nacional en el proceso de validación y aprobación nacional de proyectos de MDL.

Cambio Climático y la Estrategia Nacional de Desarrollo. La Estrategia Nacional de Desarrollo 2010-2030 convertida en Ley Orgánica 1-2012 el 26 de enero de los corrientes, establece en su 4to Eje, sobre una sociedad de producción y consumo sostenibles y adaptados al cambio climático, que debe procurarse “una sociedad con cultura de producción y consumo sostenible, que gestiona con equidad y eficacia los riesgos y la protección del medio ambiente y los recursos naturales y promueve una adecuada adaptación al cambio climático”.

En este sentido, la END establece líneas de acción de específicas para la mitigación y adaptabilidad al Cambio Climático, a saber:

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Estas medidas establecidas en la END apoyan la ejecución de los compromisos asumidos a nivel internacional para la mitigación de este tema, asimismo conforman las directrices bases para todos los proyectos que se formulen en lo adelante relacionados a todo el sector productivo nacional, sobre todo en lo relacionado a energía, medio ambiente y turismo.

República Dominicana y su posicionamiento en el Caribe en materia de MDL. Desde el 2008 con creación de la Oficina Nacional de Mecanismo Desarrollo Limpio (ONMDL) exhibe un posicionamiento importante en cuanto a la validación y aprobación de proyectos de MDL, llegando a posicionarse por encima de Jamaica y Cuba. Asimismo en Centroamérica y Latinoamericana en general, la República Dominicana ha logrado un sitial importante en la promoción de proyectos de MDL.

Estas medidas establecidas en la END apoyan la ejecución de los compromisos asumidos a nivel internacional para la mitigación de este tema, asimismo conforman las directrices bases para todos los proyectos que se formulen en lo adelante relacionados a todo el sector productivo nacional, sobre todo en lo relacionado a energía, medio ambiente y turismo.

En el recuadro, presentado por el Ing. Moisés Alvarez de la ONMDL (*), se evidencia el gran potencial del sector energético e hidrocarburos en cuanto a la presentación de proyectos innovadores tendentes a cambio de las fuentes de generación a renovables y la sustitución de combustibles fósiles. Así como también el sector agricultura, industrial y transporte se consideran como potenciales áreas de estructuración de proyectos MDL.

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Según lo informado por la ONMDL durante el lanzamiento de su video sobre los proyectos MDL en RD, actualmente en Energía Solar el país se posiciona como 3ros en Latinoamérica y el Caribe y a nivel internacional en 14avo lugar. En cuanto a los proyectos MDL de Energía Eólica se posiciona en el 6to Lugar en Latinoamérica y el Caribe, y 11avo a nivel Internacional superando a Costa Rica y Panamá.

Reto actual internacional. El gran reto en este mercado de transacciones basadas en reducciones de emisiones, así como cualquier otro mercado internacional, lo representa superar la actual crisis financiera internacional.

Así como superar la salida del segundo período del Protocolo de Kyoto de países que originalmente fueron parte de los promotores del mismo y que representan un gran peso para el intercambio de emisiones tales como Canadá y Japón. Estos países alegan la ¨inoperatividad¨ del modelo ya que no todos los principales emisores están incluidos en el mismo, refiriéndose claramente al caso de Estados Unidos.

El combate efectivo de esta problemática sigue siendo un asunto de todos, más allá del posicionamiento individual que como países promotores del MDL podamos alcanzar, la mitigación del cambio climático requiere acciones conjuntas y la cooperación internacional constante. Es una lucha a largo plazo que inminentemente necesita el concierto de voluntades de todos los países, los señalados como mayores contaminantes, economías emergentes y países tradicionalmente considerados como en vía de desarrollo. Sin un cambio evidente en el modelo económico actual y el fortalecimiento de la cooperación en este sentido, difícilmente podamos avanzar más allá de los actuales logros en esta tarea de equilibrar el sistema climático mundial.