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Venta de autos en Latinoamérica: la caída abrupta de Chile y Colombia y el despegue sorpresivo de México
Martes, Enero 9, 2024 - 12:30
Fuente: Reuters

Perú, por su lado, arrojó resultados mixtos en ventas de vehículos ligeros. La inflación, la alza de las tasas de interés y la contracción del consumo son algunos factores que impactaron en la industria automotriz regional en 2023.

Repunte económico, descenso de la inflación, aumento del PIB. Es la tendencia que han seguido muchos países de América Latina en los últimos años. Sin embargo, hay sectores que escapan al optimismo de ciertas cifras macroeconómicas. Se trata de las ventas de autos, que en 2023, registraron descensos comparables o superiores a los experimentados durante la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, cada mercado juega con sus propias reglas e incluso pueden evadir los patrones de la región. Lo que sí se podría anticipar es que 2024 sería un año de recuperación: aunque gradual, no definitiva.

CHILE: PRONÓSTICOS RESERVADOS

En Chile, el sector automotriz cerró un año para el olvido: en todos los meses de 2023, las ventas de autos nuevos registraron caídas de dos dígitos interanuales, salvo en marzo, que experimentó la menor baja con -9%. El alivio duraría poco, pues en abril se experimentó un descenso de -48,4%, el mayor que tendría el año. Finalmente, el balance del año fue una venta total de 313.865 unidades. Hablamos de un fenómeno que es reciente en el país austral, pues según la Asociación Nacional Automotriz de Chile (Anac), en 2022, se superaron las más de 426.000 unidades vendidas, en lo que fue un registro histórico para el mercado chileno.

El repentino descenso se habría producido por un conjunto de factores: la Anac establece por ejemplo la debilidad de la actividad económica y las restricciones de acceso al financiamiento de compras de vehículos como las principales causas. Por otro lado, si reparamos en cifras más específicas, notamos la misma tendencia a la baja en ventas, aunque una preferencia de los chilenos por ciertos tipos de autos. Como muestra, los SUV (deportivos utilitarios) dominaron las ventas con 143.696 colocaciones en el mercado, aunque al mismo tiempo, esta cifra implicó una caída del 24% en comparación a 2022. La lista es seguida por las camionetas, con 70.680 (-19%) y los vehículos comerciales, con 32.859 (-26%). 

Asimismo, las marcas más vendidas fueron Toyota (25.947 unidades), Chevrolet (21.319) y Hyundai (20.831), reflejando así que la mayoría de clientes chilenos apostaron por vehículos resistentes y rápidos, aunque prefiriendo los autos a las camionetas. Por su parte, la Anac aclaró que a pesar de la desaceleración de la actividad interna en la economía, es probable que el sector automotor de Chile crezca en 2024. El pronóstico es moderado, pero alentador: este año cerraría con un rango de entre 320.000 a 340.000 unidades vendidas. No se augura un mejor pronóstico, porque la inflación global y los conflictos bélicos en Medio Oriente y Ucrania continuarán presionando las cadenas de suministro de vehículos en todo el mundo, elevando los precios.

COLOMBIA: EL DRAMA DE LAS TASAS DE INTERÉS

Al norte de la línea del Ecuador, Colombia tampoco ha pasado por su mejor temporada de ventas del sector automotor. Recientemente, el informe general de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (ANDEMOS) reportó que las ventas de vehículos nuevos en el país cafetero cerró el año con 186.826 unidades. Esta es una cifra que representa una caída del 28,9% con respecto a 2022. Si aclaramos el panorama, el año pasado, los colombianos adquirieron más de 75.000 autos menos que en 2022. Es un descenso tan dramático que ni siquiera se había registrado algo similar durante la pandemia. 

Asimismo, al igual que en Chile, la caída sobrevino luego de un año de repunte, que sin embargo, podría volver a repetirse: en diciembre de 2023, el sector automotriz de Colombia completó una racha de 12 meses a la baja, pero también implicó una recuperación. El mes navideño cerró con 19.872 unidades vendidas, lo que fue un descenso interanual del 9,3%, siendo el mes con menor variación. En cuanto a las preferencias de los clientes locales, las dos marcas con mayor índice de ventas fueron Renault (26.417 unidades) y Toyota (23.010). Esta última dio el batacazo al crecer 1,1% con respecto al año anterior, siendo de las pocas en registrar un balance positivo. Aunque la mayor sorpresa ha sido probablemente el mercado de vehículos híbridos y eléctricos, al vender 31.500 unidades y registrar así, un alza interanual del 13,1%. De esta forma, Colombia se posiciona como uno de los mercados automotores de Latinoamérica con mayor penetración de vehículos ecológicos. 

Fuera de este caso aislado, conviene preguntarse las razones tras el declive en las ventas de los vehículos tradicionales. Si bien Colombia dispone de una economía relativamente estable con una inflación en descenso continuo, otros indicadores también entran en juego. El más importante son las altas tasas de interés que imponen los bancos colombianos para adquirir vehículos. Por ejemplo, si en México, el BBVA ofrece una tasa máxima anual de 15,99% para comprar un auto, en Colombia, se presentan tasas anuales entre 20,54% y 30,34%. Aunque quizás la reciente tendencia al alza en las ventas pueda mantenerse, debido a que el pasado 19 de diciembre, el Banco de la República de Colombia decidió bajar sus tasas de interés. Ha sido la primera decisión de ese tipo, desde que inició su ajuste de política monetaria en septiembre de 2021.

PERÚ: CRECIMIENTO EN MEDIO DE RECESIÓN

El vecino sureño de Colombia, Perú, tampoco cerró el año con números favorables. La Asociación Automotriz del país andino (AAP) afirmó que de acuerdo con información oficial de la Superintendencia Nacional de los Registros Públicos (SUNARP), se vendieron 11.629 vehículos livianos en diciembre de 2023, registrando así, una baja del -8,1% a tasa anual. Las principales causas de este descenso involucran el enfriamiento del consumo privado, empeoramiento de indicadores del mercado laboral y un aumento del tipo de cambio en octubre. Son síntomas que parecen retratar el panorama de una recesión económica en Perú, que solo fue reconocida por el gobierno de Dina Boluarte en octubre del año pasado. 

Aunque de forma paradójica, durante los 10 primeros meses de 2023, se vendieron 140.534 unidades, lo que representó un aumento del 5,6% anual con respecto al mismo periodo de 2022. Al igual que en Chile, los clientes peruanos prefirieron los vehículos SUV, al sumar 74.943 unidades vendidas y registrar un crecimiento del 5,5% anual. Le siguieron las pickup y furgonetas con 32.401 unidades (+1,2% anual). Finalmente, las camionetas cerraron el año con 23.028 unidades vendidas y un notable aumento del 18,7%. Asimismo, por otro año consecutivo, los peruanos demostraron su inclinación hacia las marcas asiáticas como Toyota (34.000 unidades livianas), Kia (14.000) y Hyundai (13.800).

MÉXICO: LA EXCEPCIÓN A LA REGLA

De los cuatro socios de la Alianza del Pacifico, México cerró el año de forma sorpresiva al finalizar el año pasado con un crecimiento notable en las ventas de automóviles con 1.361.433 unidades. Este no fue el único logro: el país azteca consiguió cifras mayores a las obtenidas en años previos a la pandemia. Según el Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros (RAIVL), elaborado por el Inegi, las ventas de autos acumuladas en 2023 fueron 3,3% superiores a las reportadas en 2019, cuando se obtuvieron 1.317.931 unidades. 

Si acortamos la comparación entre años, las cifras siguen sorprendiendo: de acuerdo al Inegi, las ventas realizadas por 23 marcas crecieron en 24,4% respecto a 2022. En esta ocasión, Nissan lideró la comercialización de autos en México al poseer 17,7% de participación (241.056 unidades). Mientras que en segundo lugar, quedó General Motors con 13,5% (184.051 unidades). Como se mencionó anteriormente, los buenos resultados tendrían que ver con las bajas tasas de interés en ventas de autos, pero también como consecuencia de la disponibilidad de una amplia gama de opciones de financiamiento, que ponen en ventaja al cliente mexicano.

Autores

Sergio Herrera Deza