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Arsen Tomsky: el CEO de inDrive y la fórmula que llevó a un servicio de taxis desde Siberia al dominio global
Lunes, Mayo 19, 2025 - 18:09
Fuente: inDrive

La app tiene presencia en más de 700 ciudades en 45 países bajo el modelo disruptivo de permitirle al cliente negociar el precio de sus viajes con los conductores.

Un día lejano de 2012, en la ciudad siberiana de Yakutsk, la temperatura alcanzó niveles extremos de -45 grados y las compañías locales de taxis decidieron subir los precios en simultáneo. Querían ganar más dinero y como era de esperarse, sus clientes habituales protestaron. 

No pasó mucho tiempo para que un grupo de estudiantes universitarios, que tenían sus propios autos, crease un perfil en redes sociales. Escribían mensajes como: “Quiero ir del punto A al B y estoy dispuesto a pagar tal cantidad” y poco a poco, fueron canalizando el descontento por el acuerdo entre taxistas. 

Liderados por el empresario Arsen Tomsky, en poco tiempo, más de 50.000 personas en esta ciudad rusa comenzaron a utilizar el servicio. Al año siguiente, el modelo evolucionó a una aplicación llamada inDrive, servicio de transporte, que se ha expandido a más de 700 ciudades en 45 países. 

Bajo la consigna de la “negociación directa”, esto es, permitir a los pasajeros negociar el precio de sus viajes con los conductores, inDrive fue la segunda aplicación de transporte más descargada a nivel mundial en 2024, por delante de DiDi y Bolt. Tomsky afirma que la esencia de su idea está muy ligada a las circunstancias:

“Cuando inicias un negocio en una ciudad pequeña, sin acceso a inversiones, sin apoyo externo ni mucho talento disponible, tienes que crear una estrategia diferente”, declaró el CEO de inDrive a AméricaEconomía durante su visita a Lima, Perú.

Tomsky señala que inDrive se enfoca en ofrecer “valor real”, pues parten de la premisa que las grandes empresas de ride-hailing usualmente ingresan a un nuevo mercado con precios y comisiones muy bajos, solo para ganar participación. Pero esto es temporal: una vez que obtienen una posición dominante, sea un monopolio o duopolio, comienzan a subir precios y comisiones, lo que perjudica a los usuarios.

“Para mantener esos precios artificialmente bajos al principio, estas empresas deben pagar incentivos enormes a los conductores. Pero luego lo compensa subiendo las comisiones. Por ejemplo, en algunos estados de Estados Unidos, la competencia cobra hasta 60%. Nosotros creemos que ese modelo es injusto”, añade Tomsky.

En consecuencia, inDrive busca proyectarse como una opción “simple y transparente”, en la que no solo el pasajero propone el precio, sino que se cobran comisiones bajas de entre 10 y 12%. 

Tomsky asegura que esta es la “receta secreta” para construir una red global sin inversiones gigantescas. “Uber ha invertido más de US$ 24.000 millones, nosotros alrededor de 50 veces menos”, remata el ejecutivo. En paralelo, el discurso de la inDrive se enfoca en “desafiar la injusticia social”, una retórica que se centra en aspectos como “tratar a los conductores como emprendedores” y expandir su gama de servicios a fletes y préstamos personales. 

“Queremos impactar positivamente la vida de al menos mil millones de personas de aquí a 2030, ya sea a través del negocio o de nuestras iniciativas sin fines de lucro. Y ese compromiso está presente en cada detalle. Por ejemplo, permitimos que los conductores sepan cuál es el destino del pasajero antes de aceptar. Queremos tratarlos como emprendedores, en vez de semirobots”, explica Tomsky.

Autores

Sergio Herrera Deza