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Elecciones en Perú: no robo, vote por mi
Vie, 06/11/2015 - 08:44

Carlos Escaffi

Perú: cuando los emprendedores se hacen notar
Carlos Escaffi

Director del think tank Relaxiona Internacional y profesor de la Pontificia Universidad Católica del Perú.

Pareciera ser que no robar hoy es un atributo para ser elegido en el Perú, y es que ya se pueden apreciar algunas piezas gráficas con rostros de circunspectos candidatos que al pie de éstas se puede leer un elocuente y eficaz: “no robo, vote por mí”, la verdad que ver este tipo de campaña o publicidad electoral a más de alguno lo puede dejar sin aliento, no solo por lo pobre de su contenido, sino por la desfachatez que tiene en pretender usar un valor que ni siquiera debiera ser mencionado, salvo que la actual coyuntura reconozca una inminente y triste crisis de valores, en donde se hace necesario explicitar en la hoja de vida frases como por ejemplo: “yo haré obras y no robaré”.

En consecuencia, ante el inminente panorama electoral que se avecina, estamos de cara ante una pobre y tísica campaña política cuya característica principal es la ausencia total de contenidos y propuestas técnicas.

De manera de contrastar lo anterior, lo invito a desarrollar pensamiento crítico, y a reflexionar sobre lo siguiente, ¿cuál es el atributo de la señora de ascendencia japonesa?, respuesta: ser hija de su padre, sigamos, ¿qué es lo que el potencial elector recuerda de la campaña del señor de nombres bíblicos?, respuesta: un cuy que se contorsiona frenéticamente al ritmo de un reguetón calenturiento, continuemos, ¿cuál es el atributo del señor que ha sabido utilizar de manera implícita las vallas publicitarias de su universidad?, respuesta, ser de una raza distinta, además de caracterizarse por lo dadivoso en programas de farándula, continuemos, ¿cuál es la motivación que mueve al candidato con más experiencia en manejar los destinos del país en dos ocasiones?, respuesta: “atender el requerimiento del país, pues la nación lo convoca en esta tercera ocasión”, por cierto que no tienen ninguna injerencia el factor ego, sigamos, ¿cuál es el atributo del candidato que promovió una marcha que emulaba las 4 grandes divisiones del Imperio Incaico?, respuesta: volver a crecer como en la época que le toco gobernar, solo habría que acotar que la coyuntura económica internacional y sus efectos en el Perú en aquel momento eran bastante favorables, continuemos, ¿cuál es el atributo del señor de camisa azul oscura de aspecto muy serio y con una propuesta en particular muy radical?, respuesta: un sensual baile de reguetón reciclado de nombre ¡felino fiero que aruña!, finalmente no puedo dejar de mencionar al inefable especie de precandidato cuyo paso por una singular cartera ministerial lo llevó a la farándula siendo reconocido como una especie de sheriff o súper héroe de comics, que se ha caracterizado por su particular forma enfrentar a sus adversarios políticos recurriendo a una florida gama de adjetivos, amerita acotar que el referido sheriff no fue ratificado y su candidatura fue endosada a un técnico cuyo apellido no solo es de difícil recordación y pronunciación, sino que además su trayectoria política es limitada, no vende.

Probablemente se me esté quedando alguna otra figura en el tintero, alguien que no tenga mayor representatividad porcentual y/o algún potencial outsider, lo que no significa que el autor tenga algún tipo de condescendencia y/o simpatía por los personajes ausentes.

Así las cosas, estamos frente ante una campaña política hueca, sin contenidos, sin propuestas, sin debates, sin análisis, con nulo pensamiento crítico, pero si con mucho flow, reguetón y perreo, una campaña dirigida a un público que solo pareciera interesarle el vacilón, el chongo, el morbo, la chismografía, la crítica destructiva, en resumen, pareciera ser que el target de electores estuviera en modo “webing”.

También pareciera ser que las duras pero reales aseveraciones efectuadas por el periodista César Hildebrandt cobran razón cuando éste señala: “que la falta de cultura se refleja en todos los ámbitos, incluso en la política”, sino recordemos hace algunas semanas cuando reporteros televisivos entrevistaban en algunas universidades de Lima a alumnos de éstas y les mostraban fotografías de uno de los más temibles y sanguinarios líderes terroristas del Perú y les preguntaban quién era, los connotados alumnos muy horondamente respondían con seguridad que era un reconocido, ilustre y laureado escritor colombiano, esto demuestra lo pobre del nivel cultural.

Finalmente, no nos quejemos de nuestras autoridades, los responsables somos todos los que tenemos derecho a voto, la pregunta es, ¿serán conscientes que tienen derecho a voto?, ¿o la estupidez cotidiana ya los terminó de someter? .

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