La agencia espacial quiere estudiar Europa, uno de los pocos lugares en el Sistema Solar que podría albergar condiciones favorables para la vida.

La agencia espacial NASA ya se encuentra trabajando en su próxima misión especial, esta vez no a Marte como ha sido en los últimos años sino que a un objetivo mucho más lejano: Europa, una de las lunas del planeta Júpiter.

Esta semana, la organización reveló que ya se encuentra trabajando en su próxima exploración robótica hasta este nuevo destino, que según investigaciones previas podría ser uno de los pocos lugares en el Sistema Solar en albergar vida.

La misión se basará en la nave Clipper, que ya orbita el planeta Júpiter, y que deberá aterrizar varias veces dentro de sus satélite durante al menos tres años. En estas misiones deberá revisar la radiación presente en Europa, pero especialmente la existencia de un posible océano líquido que se encontraría bajo la gran capa de hielo que cubre su superficie.

Esta misión dependerá de la aprobación de un nuevo presupuesto para la NASA, que espera destinar alrededor de US$30 millones para la exploración a la luna de Júpiter. Una cifra que se sumaría, además, a los US$100 millones que ya habían sido entregados previamente a esta misma iniciativa por el congreso estadounidense.