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4 beneficios de implementar planes que incentiven un estilo saludable en las empresas
Martes, Octubre 30, 2018 - 11:00

Desde Sodexo explican las ventajas de aplicar este tipo de estrategias.

En materia laboral, un programa de vida saludable tiene por objetivo cambiar los malos hábitos, anticipar y prevenir problemas de salud, aumentar la satisfacción personal y la motivación, y promover las buenas relaciones para que los colaboradores alcancen un equilibrio laboral y familiar.

Dentro de este contexto, Sodexo dio a conocer los principales beneficios que trae la implementación de planes y estrategias que incentiven estilos de vida sana: 

1. Mejores relaciones laborales

Según el último Índice de Calidad de Vida Laboral de Sodexo, a los chilenos les importa cada vez más trabajar en un ambiente de confianza, respeto y compañerismo. Es decir, las relaciones laborales equilibradas son tan importantes para ellos como recibir un sueldo justo.

Así, un programa de bienestar enfocado en la vida saludable ayuda a construir, mantener y fortalecer la relación entre colaboradores y líderes. Al ver que existe oficialmente un esfuerzo por mejorar su calidad de vida, las personas se sentirán apreciadas y consideradas.

2. Disminución de enfermedades y estrés

Un ambiente laboral negativo y estilos de vida deficientes contribuyen a enfermar a cualquier colaborador. No es de extrañar entonces que aumente la tasa de licencias médicas y de ausentismo laboral si la empresa descuida ambas variables.

Si bien la incorporación de una estrategia orientada a potenciar hábitos positivos se enfoca en aspectos técnicos -vida sedentaria, ergonomía, mala alimentación y factores de riesgos psicosociales-, sus resultados pueden impulsar los esfuerzos de mejorar el clima laboral que realice el área de Recursos Humanos.

Mejoras en los hábitos de vida de las personas se traducen inmediatamente en menores niveles de estrés, dolencias físicas y problemas de salud.

3. Mayor compromiso y mejor reputación

Cuando una organización implementa un plan de incentivo de estilo de vida sana, este bienestar se refleja tanto dentro como fuera del lugar de trabajo. El colaborador comunicará su satisfacción laboral a su círculo cercano, mientras que la comunidad que rodea a la empresa notará el positivo desarrollo de su ambiente.

Además, si el programa conecta a la compañía con prestadores de productos y servicios como gimnasios, restaurantes, tiendas, y espacios de entretenimiento, la empresa hará visibles sus esfuerzos y creará una dinámica positiva para su reputación social. 

4. Aumento de competitividad y productividad de la empresa

El colaborador permanece más del 50% de su tiempo en el lugar de trabajo. Aun así, lo que pasa fuera de éste también influye en su rendimiento. Por eso, este tipo de iniciativas deben alinear las tres áreas que componen la vida de una persona: familia, trabajo y salud. Equilibrar estos aspectos dentro de una solución es un desafío, puesto que se requiere conocer en mayor detalle cómo es la vida del trabajador. Por ende, es preciso que el área a cargo de gestionar este bienestar investigue en profundidad cuáles son los hábitos de este y su familia.

Instalar un programa de mejora de calidad de vida laboral en la empresa es una estrategia donde todos ganan. Es importante que en conjunto con la educación y promoción de hábitos saludables y de equilibrio, esto sea parte de la cultura organizacional e impacte de manera positiva su ambiente laboral.

De esta manera, logrará generar ventajas tanto para el negocio como para sus colaboradores, al promover estilos de vida y hábitos sanos que influyen directamente en los niveles de desempeño y productividad y reducen las tasas de ausentismo y estrés.

FOTO: PEXELS.COM

Autores

AméricaEconomía.com