Las empresas necesitan una justificación clara para que las ideas que se desarrollen internamente deban ser candidatas para la colaboración externa.
Por Cra. Evangelina Camacho – Gerente de Auditoría de EY Uruguay. Vivimos en la era de la innovación, impulsada por la rápida evolución de la tecnología, lo cual impacta directamente en el comportamiento del consumidor, creando una presión sobre las empresas de productos de consumo y al por menor poniendo la innovación en el centro de su negocio como vital para su salud a largo plazo.
Sin embargo, para las grandes empresas la innovación es cada vez más difícil pues están programadas para maximizar la eficiencia y evitar la experimentación, siendo esto incompatible con una cultura en la que la toma de riesgos es un requisito previo para el éxito.
Como resultado, un número creciente de empresas están buscando nuevas ideas por medio de la colaboración con emprendedores más pequeños que ofrezcan la agilidad y el pensamiento creativo. Pero en la práctica, es muy difícil conseguir que esta colaboración exista y funcione, superar los retos de dicha colaboración será fundamental para ofrecer innovación. Para lograrlo, las empresas necesitarán seguir nueve principios que implican la creación, la incubación y la activación de las ideas como se describe a continuación:
1. Ser ágil
Las empresas necesitan una justificación clara para que las ideas que se desarrollen internamente deban ser candidatas para la colaboración externa.
2. Cultivar una cultura para la experimentación
Las grandes empresas suelen tener miedo al fracaso y renuencia a experimentar. Los líderes empresariales deben fomentar una cultura en la que se anime a las ideas y la experimentación, y aceptando el fracaso como una oportunidad para aprender.
3. Actuar rápido
Las empresas emprendedoras tienen un enfoque muy eficaz para identificar, descartar o buscar nuevas innovaciones. Las empresas de productos de consumo y al por menor deben abrazar esta actitud tanto como sea posible y potenciar a los gerentes a tomar decisiones rápidas.
4. Identificar el equipo adecuado
Las empresas de productos de consumo y al por menor necesitan buscar a las personas que puedan pensar y puedan servir como traductores eficaces entre el mundo empresarial y el corporativo.
5. Determinar el marco adecuado para cada colaboración
Las empresas de productos de consumo y al por menor necesitan un marco que proporcione flexibilidad para permitir la colaboración, pero dentro de parámetros definidos.
6. Mantener una comunicación abierta y frecuente
Las empresas de productos de consumo y al por menor tienen diferentes culturas, procesos y velocidades de trabajo en comparación con las que se inician, por lo cual la comunicación abierta y frecuente es esencial.
7. Adaptar los procesos y romper las reglas si es necesario
Los líderes empresariales deben aceptar la varianza de la norma corporativa y llegar a que estos procesos y reglas normales pueden eludirse, sin menoscabar su validez para el negocio principal.
8. Definir y medir el éxito
El proceso debe consistir en desarrollar ideas buenas rápidamente y ,a continuación, probar y refinar en un proceso iterativo.
9. Iterar y trabajar de forma incremental
Los emprendedores innovan poniendo su énfasis en la creación rápida de prototipos y en la voluntad de asumir riesgos y aprender rápidamente de los errores. Aunque las empresas de productos de consumo y al por menor no pueden tener esa agilidad, es esencial integrar mecanismos para aprender de los colaboradores más pequeños y refinar su propio enfoque hacia la innovación mediante la adopción de algunas de esas conductas y enfoques.
La realidad indica que tener éxito en la nueva era de la innovación requiere que empresas de productos de consumo y al por menor deban repensar su enfoque de productos y el desarrollo del proceso. Si su empresa está buscando nuevas formas de colaboración con emprendedores, en EY contamos con profesionales con las habilidades y los conocimientos para determinar los pasos a seguir en dicha búsqueda.
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