Tras una larga sesión, la norma que autoriza la refinanciación de la deuda fue aprobada por 202 votos positivos, 37 negativos y 13 abstenciones, con un amplio respaldo de la oposición de centroderecha.

La cámara baja de Argentina aprobó en la madrugada de este viernes un acuerdo firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para reestructurar una deuda de US$ 45.000 millones, que forma parte de los esfuerzos del Gobierno por dejar atrás una larga crisis económica.

El presidente Alberto Fernández envió el proyecto la semana pasada al Congreso, en busca de un consenso con la oposición para la renegociación de la deuda argentina, algo solicitado por el FMI. Para ser ley, el acuerdo debe ser votado por el Senado.

Tras una larga sesión desarrollada en medio de manifestaciones e incidentes, la norma que autoriza la refinanciación de la deuda fue aprobada por 202 votos positivos, 37 negativos y 13 abstenciones, con un amplio respaldo de la oposición de centroderecha.

Paradójicamente, un sector de la coalición gobernante de centroizquierda, crítico de las políticas económicas del FMI, no acompañó la iniciativa, lo que siembra algunas dudas sobre el futuro del oficialismo.

"Es un acuerdo razonable en el marco de muchas dificultades existentes (...) No podemos pagar este año US$ 19.000 millones", dijo durante la sesión el diputado oficialista Daniel Arroyo.

Se espera que el acuerdo sea aprobado en los próximos días por el Senado, ya que Argentina busca evitar un vencimiento por US$ 2.800 millones el 22 de marzo.

El acuerdo final, anunciado el jueves pasado, establece un plazo de gracia de cuatro años y medio y alarga a 10 años los pagos de los desembolsos, por lo que el país comenzará a cancelar la deuda en 2026 y terminará en 2034.

También fija metas de crecimiento, baja de la inflación, fortalecimiento de las reservas de moneda extranjera y confirma la pauta para la reducción gradual del desequilibrio fiscal hasta la eliminación del déficit en 2025, en medio de una larga crisis financiera.

La deuda se originó con un préstamo por US$ 57.000 millones, el más grande de la historia del FMI, que el organismo otorgó a Argentina en 2018, bajo otra gestión. En medio de una crisis, el país rechazó el último tramo del crédito.