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Antonia Tapia: la primera mamá chilena becada en Singularity University
Martes, Junio 6, 2017 - 11:52

La chilena pasó de vivir unos de los momentos más difíciles de su vida a resultar ganadora del Global Impact Challenge 2017.

La pesadilla empezó en 2015 y Antonia lo recuerda así. La cesantía llegó tras la llegada de su segunda hija, luego de trabajar por más de 10 años en el sistema privado.

Colomba nació con una enfermedad genética que debía ser tratada inmediatamente. El Síndrome de Beckwith Wiedemann obligó a esta ingeniera comercial de 35 años a reinventarse para ayudar a su hija.

Antonia reconoce que la idea de emprender siempre estuvo presente en su vida. Luego de un fallido negocio ligado al surf, una de sus pasiones, y justo cuando la desesperación aumentaba, llegó un oportuno aviso: la Academia Her Global Impact buscaba a 50 mujeres para dar vida a su cuarta edición.

Así, esta mamá de 2 pequeñas logró un cupo en esta escuela de la innovación que busca reunir a mujeres de distintas partes de Chile. El objetivo es potenciarlas en nuevas industrias y negocios a través de tecnologías que tengan impacto positivo en la sociedad.

Aunque al comenzar este programa se asustó al notar que gran parte de sus compañeras ya tenían experiencia en el rubro, tuvo que inciar sin reparos la instrucción de dos meses en la academia, con 50 horas de aprendizaje entre talleres, clases interactivas, networking y mentorías. Sólo había un objetivo: crear nuevos emprendimientos. 

La idea de Antonia siempre fue relacionada a las algas. “Fue un trabajo colaborativo. Yo tenía una idea, la cual fue transformándose gracias a las mujeres de la academia que fueron aportando sus opiniones y conocimiento. Sin ellas no habría logrado llegar al concepto que llegué”.

Tras prueba y error, esta emprendedora chilena logró crear el Proyecto Koreplast, un empaque reutilizable y biodegradable en base a algas que busca eliminar la utilización de plástico a nivel mundial. Koreplast, incluso, tiene un tiempo de degradación de 10 días versus los 450 años que puede demorar una botella de plástico.

Esta invención logró posicionar a Antonia en la gran final para luego adjudicarse el primer lugar del Global Impact Challenge. “Es un desafio enorme y una responsabilidad gigante, pero tengo todas las ganas de seguir adelante. Me demostré a mí misma que lo que estaba haciendo tenía sentido y que debía luchar por ello”.

De esta forma, esta ingeniera comercial se convirtió en la primera mamá chilena en ganar una beca para asistir el 17 de junio al Global Solutions Program en Singularity University en Califorma, Estados Unidos. “Uno no tiene por qué tener un doctorado o posgrado, sino la convicción y ganas de querer hacer el cambio y lograr algo importante”, señaló.

Antonia va a participar en un programa de 9 semanas enfocado en el Calentamiento Global donde participarán 90 personas de distintos rincones del mundo.

“Más que emocionada estoy ansiosa de que todo resulte de la mejor forma y de lograr resultados. Para mí, el tema del medioambiente es fundamental y lo poco que nos preocupamos de este planeta es alarmante. Me da tranquilidad de que se estén haciendo iniciativas y que pueda aportar con mi granito de arena”.

Antonia ya se prepara para asistir a esta nueva experiencia en Singularity University, mientras su proyecto Koreplast está en vías de ser financiado para, en un futuro, ser una realidad.

Autores

Josefina Martínez