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¿Aprender chino... en ocho meses?
Jueves, Diciembre 18, 2014 - 07:37

La compañía 8Belts se creó hace tres y hoy ya tiene 50 empleados. Su fundador, Anxo Pérez, refiere sobre cómo es posible aprender este idioma.

Anxo Pérez, nacido en Finisterre, Galicia (norte de España), ha estudiado en Estados Unidos, Bélgica y China; ha trabajado como intérprete para el FBI estadounidense, en la ONU e, incluso, ha sido traductor simultáneo del presidente Barack Obama. 

Polifacético emprendedor, es también músico, actor y cantante y ha patentado un método para aprender el chino mandarín en solo unos meses. Hace tres años él era el único empleado de su compañía, 8Belts, y ahora cuenta ya con más de 50 empleados.  Es difícil poder sacarle más partido al tiempo. La Agencia Efe entrevista a este particular personaje.

-Anxo, habla nueve idiomas. ¿Cuáles son?

Ruso, alemán, chino mandarín, francés, inglés, castellano, gallego, italiano y portugués (de Brasil). Pero procuro no perder de vista nunca la humildad y reconozco que siempre me queda mucho más por aprender que por enseñar. Vivo pensando que me queda todo por hacer. Hemos venido a este mundo para aprender y yo espero no dejar de hacerlo nunca. Tengo una máxima que es que si bien el conocimiento no hace tu vida más larga, sí la hace más ancha. Para mí, el enemigo de la vida no es la muerte, es el desaprovechamiento. 

-¿Cómo aprendió un idioma tan complejo como el chino mandarín?

Yo cree 8belts.com para mí. Todos los emprendedores, normalmente, damos solución a problemas que  sufrimos en nuestras vidas. Cuando fui a pasar una temporada a China, me di cuenta de que no avanzaba a buen ritmo, y no estaba dispuesto a pasarme cuatro años en una academia sin obtener resultados.  Tenía un sueño, que era crear la primera empresa de enseñanza de idiomas que se vendiera en base a resultados. De tal forma que si no funciona, no pagas. Esto fue un bombazo y hemos crecido una barbaridad.
 
-¿Qué es 8belts.com y cómo surgió?

Estaba trabajando en la ONU, donde el chino es uno de sus idiomas oficiales, y por eso empecé con él. Todo el mundo, independientemente del país, consideraba este idioma un imposible y  decidí demostrar que eso era mentira. No es que el chino fuera difícil, es que se enseñaba incorrectamente y estaba convencido de que si se hacía adecuadamente, todo el mundo podía aprenderlo.  De ahí nació lo que hoy es 8Belts, el único método del mundo que enseña chino online en menos de ocho meses y, si no se consigue, se devuelve el dinero. Se trata de un método que ofrece resultados en muy poco tiempo. 

-¿Existirá mucho esfuerzo para poner en marcha una iniciativa de este calibre?

8Belts nació tras más de 40.000 horas de trabajo y seis años de investigación. En este tiempo hemos estudiado el idioma y hemos logrado mejorar los procesos de aprendizaje con una rigurosa jerarquización de las palabras por grupos y la creación de un mapeo del idioma. Todos estos avances suponen acelerar el aprendizaje y optimizar la asimilación del conocimiento del chino.

Comenzar una maratón antes que el resto de los corredores

-¿Por qué eligió ese idioma y no otro como el japonés o el ruso?

Elegí el chino porque no existe ningún otro idioma que, hablándolo, te permita comunicarte con un sexto de la población mundial. A ello hay que sumar que en 2014 China superó a EE. UU. como primera potencia del comercio mundial. Aprender chino hoy en día es como empezar una maratón una hora antes que el resto de corredores. 

- Asegura que, con este método, es posible hablar chino en ocho meses. ¿Qué nivel se puede alcanzar?

Esto no es un método milagro. Tras ocho meses, que son un punto de partida y no de llegada, no vas a poder dar discursos ni redactar un contrato de arrendamiento en chino, pero este tiempo de estudio sí que te va a permitir hablar de forma correcta y con fluidez, durante más de una hora en chino mandarín.
 
-¿Cuál es la clave del éxito de su método?

Que ofrecemos resultados a corto plazo. En un momento tan complicado como el actual, los alumnos precisan y buscan que lo que hagan tenga sentido y unas metas alcanzables en periodos de tiempo inminentes. Otra de las claves, según la opinión de nuestros alumnos, es que se trata de una apuesta y una inversión en formación seguras, tanto por los resultados como por el tiempo en el que los consigues.

-¿Cómo lo organizan?

Para nosotros, la principal clave es la selección de información. Si la enseñanza de idiomas fuera un puzle, las piezas centrales contendrían la mayor parte de la información que necesitas para poder identificar lo que representa. Y las piezas periféricas son miles, pero proporcionan muy poca información. Me di cuenta de que unas poquitas contienen la mayor parte de lo que necesitas y son tremendamente relevantes y, sin embargo, las periféricas son muchas en número pero con muy poca utilidad. 

- ¿Qué dedujo de esa situación?

Esto me llevó a una conclusión: las piezas del puzle son todas igual de grandes, pero no igual de importantes. Otro aspecto a considerar es que nuestro método se basa en que el sistema tradicional está diseñado, no para recordar información, sino para olvidarla. Donde ponemos el acento, no es de cuánta información entra, sino de cuánta se retiene. 

Desde luego el espíritu que ofrece Anxo al entrevistador es de pura energía y seguridad en sí mismo, por ello no es de extrañar que se haya concedido a su empresa el Premio Emprendedor del Año de la prestigiosa casa Deloitte, la primera firma privada de servicios profesionales del mundo por volumen de facturación,  y que tengan alumnos, según indica Pérez, en más de 40 países.
 
-Señor Pérez, ¿qué es la regla de 80-20?

Esa es la primera clave de 8Belts. El 20% de un idioma se usa el 80% de las veces y nosotros hemos llevado a cabo, durante más de 40.000 horas de trabajo, una selección y jerarquización del mandarín para que el alumno pueda aprender ese 20% lo más rápidamente posible. 

--¿Qué tipo de términos conforman ese 20% que eligen?

Son términos y expresiones que se usan con mayor frecuencia y se combinan de forma fácil en esta lengua. Este mapeo conforma el 20% del corpus idiomático necesario e imprescindible que permite a los alumnos mantener una conversación en chino tras pocos meses de estudio. 

Lo que entra, ya no sale

-¿Y qué es lo que denominan el saco elástico?

El sistema tradicional está diseñado no para recordar información, sino para olvidarla. 8Belts se preocupa de cuánta información se retiene. Hemos dado con una interesante fórmula que ha logrado elevar enormemente la rentabilidad por cada hora de estudio del alumno. La fórmula resulta de la unión entre el mapeo explicado anteriormente y un segundo componente: un software creado especialmente para maximizar la retención. Este sistema funciona como un "saco elástico", donde lo que entra ya no sale, el cual contiene todo el conocimiento del alumno para un repaso selectivo y continuo que  hace que el número de fugas sea igual a cero.

- ¿Cuánto tiempo de estudio es necesario cada día para ir avanzando en su método?
30 minutos diarios, siempre que la constancia, sea una pieza clave del aprendizaje. El método utiliza técnicas de gamificación, es decir, aprendes jugando. Ahora bien, no es un método milagro. Requiere esfuerzo, pero da resultados. Si lo que quieres es ser un experto, los ocho meses no son un punto de llegada sino de partida. Si te contentas con mantener una entrevista de trabajo en chino, en 8 meses lo podrás conseguir. 

- ¿Qué cree que es lo más difícil del chino para un hispanohablante?
Si se enseña adecuadamente, todas las personas aprenden. En mi opinión, no hay malas formas de aprender, sino formas mejorables de enseñar. Por tanto, no creo que haya dificultades especiales para los hispanohablantes, ni para los hablantes de ninguna otra lengua si el método de aprendizaje es el adecuado. 

-- ¿Y con respecto a la escritura?
La escritura del chino es altamente compleja y, desde la compañía, entendimos muy pronto que si queríamos que la gente tuviera acceso al chino de forma rápida, sencilla y eficaz debíamos centrarnos en el habla. Los alumnos también prefieren favorecer la rapidez en el avance sacrificando la escritura ya que en la mayoría de los casos no la utilizarán. La perfección requiere foco. Sacrificamos la escritura para centrarnos en el habla.

-¿Considera que, una vez que se ha aprendido un idioma, resulta más fácil aprender otros?

Se podría decir que sí. El cerebro tiene una zona especializada en el aprendizaje de idiomas y, cuanto más la ejercitemos, más soltura tendrá en la siguiente ocasión. 
Eso pasa también con otros campos del saber. Por ejemplo, saber tocar un instrumento musical facilita el aprendizaje del segundo, y así sucesivamente. Cuando aprendes el primero tienes que dedicar tiempo a los conceptos teóricos, al solfeo, etc. Y cuando llegas al segundo, eso ya lo tienes aprendido. 

"Pozos de petróleo"

"Yo no me considero más que nadie y creo que mis talentos no son mayores que los de otros, sino simplemente diferentes", comenta Anxo. "Yo defiendo que todos tenemos, al menos, un talento que dejaría al resto del mundo boquiabierto y nuestra función es encontrarlo. Cuando lo hacemos y lo aprovechamos, el mundo gana, y cuando no lo conseguimos o no lo aprovechamos, el mundo pierde. 

Eso es lo que yo llamo “pozos de petróleo”. Si nos conocemos bien a nosotros mismos y nuestros puntos fuertes, el éxito está al alcance de todos, pero para llegar a  él tenemos que haber aprendido lo suficiente", afirma el emprendedor. 

"Eso es lo que yo trato de hacer con los idiomas. Conocerlos me ayuda a alcanzar un fin. Si yo, al final de mis días, miro atrás y lo único que he conseguido es tener más fama y más dinero, mi vida habrá sido un fracaso. Pero si consigo haber dejado una huella en el mundo que aporte valor a la sociedad, entonces mi vida habrá sido todo un éxito", matiza Pérez, autor del libro "Los 88 peldaños del éxito".

El éxito, según Anxon Pérez

El emprendedor Pérez también ha escrito un libro, “Los 88 peldaños del éxito”. Sobre su concepto de éxito, afirma:  "Con este libro he intentado dar una serie de herramientas de efecto inmediato. Es decir, que la gente lo pueda leer por la mañana y aplicarlo por la tarde. Ha sido complicado realizar la criba de los más de mil peldaños que yo encontré, hasta quedarme con los 88. Pero el esfuerzo ha merecido la pena".

Sobre su definición de éxito, opina: "El éxito es obtener aquello que tú definas como éxito. Al leer el libro cada uno encontrará sus "Peldaños de Oro", los que más se adecúen a él y los que más le van a ayudar en sus propósitos. Tengo una máxima que dice: “algunos esperan a que salga el sol, otros bailan bajo la lluvia”, y creo que  si eres del segundo grupo, tienes muchas posibilidades de lograr el triunfo. Desde luego, el éxito siempre viene precedido de fracasos, pero como digo en el peldaño 22 : “los fracasos son cuentakilómetros del éxito”.

No me interesa cuántos fracasos he tenido, sino qué he aprendido de cada uno de ellos. 
Emprender y sacar un proyecto  adelante no es un trabajo sencillo, pero si no desistes, fijas unos objetivos claros y avanzas hacia ellos con determinación, es posible. Además de la determinación, existen otras cualidades como la constancia, la ilusión y la inquietud que te hace seguir trabajando a diario, que te permiten, no solo alcanzar tus objetivos, sino consolidarlos y perfeccionarlos en el futuro. 

Suelo decir que el éxito es como un cisne: hay una parte visible – reluciente, bella, que sobresale por encima del lago – y una parte invisible – las patas, que no dejan de agitarse y patalear para provocar el movimiento–. De las dos, la gente ve la primera (la cabeza), pero a mí me interesa la segunda (las patas que no paran de agitarse). El éxito no está en el glamur, sino en el esfuerzo. Es esta parte oculta la que supone el motor del éxito y que nos permite conseguir aquello que nos proponemos.

 

Autores

EFE