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Científicos aseguran que la luna no se formó como pensábamos
Martes, Enero 10, 2017 - 14:43

La teoría más aceptada hasta el minuto es que el satélite surgió luego de un gran impacto entre la Tierra y otro planeta.

El origen de la luna ha sido durante décadas uno de los grandes misterios que la ciencia ha intentado resolver. Hasta el día de hoy la teoría que más sonaba era la de un gran impacto entre la Tierra y otro planeta que dejó material flotando en el espacio y que dieron vía para que la Luna se creara.

Sin embargo, un reciente estudio publicado por la revista Geoscience Nature, asegura que la Tierra pudo haber tenido hasta 20 impactos que ayudaron a formar nuestro satélite tal y como lo conocemos ahora.

El estudio arroja que las colisiones se dieron desde varios ángulos y contra unos planetas del tamaño de Marte.  Luego los impactos generaron un cinturón orbital de sedimentos alrededor de la Tierra que, durante miles de años, se fueron fusionando poco a poco hasta formar la luna actual.

En ese escenario, la formación de la luna sería el resultado de impactos importantes pero no catastróficos que se dieron de manera frecuente durante mucho tiempo. Así que cada choque habría generado pequeños discos de escombros que formaban minilunas y éstas, a su vez, se iban juntando hasta crear la luna actual.

Lo que hizo el equipo de expertos del Instituto Weizmann de Ciencia, de Israel, y del Imperial College de Londres fue realizar diversas simulaciones numéricas de grandes cuerpos planetarios impactando contra la Tierra mientras estaba en periodo de formación.

"Si, como parece probable, la fusión es imperfecta o algunas microlunas se pierden, serían necesarios muchos más impactos, haciendo así la necesaria secuencia de sucesos mucho menos probables que cualquiera de los escenarios de impacto simple, incluidos los más exóticos”, dice el especialista en impactos planetarios, Gareth Collins, sobre el trabajo de sus colegas.

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ELESPECTADOR.COM