La japonesa OKI adquirió la división de fabricación de hardware y software para dispensadores automáticos de dinero de Itautec en cerca de US$43M.
¿Es posible construir un imperio rentable sobre la base de la producción de máquinas grandes, pesadas e inmóviles con modelos que se mantienen inalterables durante años? Sí, si las máquinas entregan billetes. Es el nicho que encontró la japonesa OKI, una de las compañías globales en el rubro de hard y software de cajeros automáticos (ATM).
Presente en lugares tan disímiles como Finlandia, los Emiratos Árabes y México; tenía, sin embargo, un gran mercado vacante en su corona: Brasil. Lo resolvió en Enero, al adquirir el 70% del paquete accionario de la División de Automatización y Servicios de Itautec, por cerca de US$43 millones, con lo cual creó su filial OKI Brasil. Si bien el acuerdo había sido anunciado en mayo de 2013, se concretó recién en este 2014 debido a contingencias financieras y la necesidad de aprobación de las autoridades regulatorias.
OKI es la empresa dominante en mercados emergentes masivos como China, Rusia e Indonesia, de manera que Brasil –con su bancarización creciente gracias a la nueva clase media– era un objetivo natural. “Estoy seguro de que el negocio OKI de ATM continuará expandiéndose en América Latina mediante la capitalización de las fortalezas de ambas compañías”, dijo Hideichi Kawasaki, presidente de la empresa, al anunciar la transacción. Y hay mucho de cierto. En 2009, Itautec era la empresa número 24 a nivel global como proveedora de servicios de IT. Y, por medio de la citada División de Automatización y Servicios, poseía el 30% del mercado de cajeros de Brasil, siendo la segunda empresa manufacturera del rubro. Ello, gracias a clientes como Itau Unibanco.
Con la compra, OKI sacará provecho de los 2 mil técnicos propios de Itautec que operan en unos 3.700 municipios de Brasil y de las operaciones de provisión de cajeros de la compañía en Argentina y México.
Es importante destacar que la transacción es parte de un redireccionamiento estratégico de Itautec que, previamente, había anunciado el cierre progresivo de su unidad de hardware de computación Itautec/Infoway, luego de pérdidas trimestrales importantes en su operación.
