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Juan Pablo Cappello y el 'Valle de la Muerte' del emprendimiento
Viernes, Febrero 15, 2013 - 14:08

AETecno conversó con Juan Pablo Cappello, socio en Patagon.com, Co-Fundador de Idea.me y Sauber Energy y accionista de Greenberg Traurig, sobre la realidad del emprendimiento en la región y el modelo de financiamiento colectivo desarrollado por Idea.me.

Según detalla su biografía en LinkedIn, Juan Pablo fue socio y director de Patagon.com, que fue vendida al Banco Santander por un valor de más US$ 750 millones, y ha sido recientemente seleccionado como uno de los 50 líderes emprendedores por la revista Business Leader

Cappello tiene una extensa y abultada trayectoria en el mundo del emprendimiento y de métodos para financiar dichos emprendedores, que lo llevó a co-fundar la primera plataforma de crowdfunding (financiamiento colectivo) de la región, Idea.me, con el fin de, tal como dice él, de entregar más “democracia económica” a los emprendedores.

Para Capello existe una etapa clave en el desarrollo de un emprendimiento, que él denomina el “Valle de la Muerte” y que es la etapa en que la nobel empresa se queda sin el capital semilla original y no puede obtener capital más robusto para desarrollar la empresa. El resultado: la muerte.

-¿Cuál es el concepto vertebral detrás de la creación de Idea.me?
-Nosotros nos percatamos que la democracia económica no existía en Latinoamérica, e Idea.me es una respuesta a ese desafío. La meta de los tres fundadores al montar la empresa, era buscar la manera de atraer algo más de democracia económica a nuestros países.

Tuvimos que adaptar las ideas de financiamiento colectivo que ya existían en otros países a la realidad de los usuarios de Latinoamérica. En Idea.me nos dimos cuenta en un principio, de que teníamos que curar los proyectos, por lo menos en un principio, para evitar problemas de fraude, por ejemplo.

También nos dimos cuenta que en la región teníamos que ser más creativos con los medios de pago, trabajar con diferentes métodos y ser bastante más flexible en la manera que uno montaba la plataforma.

A poco más de un año de la fundación hemos logrado crear algo más de democracia económica en la región. Hemos recaudado más de US$1 millón en los países donde está la plataforma, para casi 200 proyectos, es decir, que más de 200 micro emprendedores lograron levantar capital a través de nuestra plataforma.

-¿Qué tipo de proyectos están en Idea.me?
-Hay proyectos de todo tipo. En México, por ejemplo, hay un proyecto que levantó más de US$30 mil, se llama Machina, que confecciona ropa 'tecnologizada' . En Chile hubo un proyecto social que se llama Bus ConCiencia, donde un bus o laboratorio móvil va a zonas rurales para motivar en los niños el interés por la ciencia.

Hemos tenido casi 200 proyectos exitosos, donde todos ellos han logrado destacar de alguna manera. Vemos que nuestra plataforma ha logrado ayudar a los emprendedores de nuestra a región a recabar ese capital semilla para poder realizar sus sueños. Y ese sueño puede ser una película, una obra de arte, un proyecto con impacto social, o la materialización de un producto.



-¿Qué obtienen los usuarios que apoyan proyectos en Idea.me?
-Nuestra plataforma no significa que alguien está invirtiendo en un determinado proyecto en sí. Por ejemplo, si el proyecto es un disco no quiere decir que uno (el que aporta dinero) se queda con el 1% o 5% de lo que genere el disco. Pero si pusiste US$5 te llega una copia del disco, y si en cambió diste US$50 te pueden invitar a un concierto o al estreno del disco. Por esto es que para nosotros Idea.me está democratizando las cosas, porque el productor puede apoyarse en sus redes sociales y amigos en el mundo real y puede pedir que les ayuden con su proyecto.

Otro elemento interesante es que cerca del 60% al 70% de la gente que apoya un proyecto en general, tiene algún vínculo con el emprendedor del proyecto, es decir, del 30% al 40% no ha tenido contacto alguno con el emprendedor antes de ver el producto. Esto es algo que me abrió bastante los ojos, puesto que no pensaba que en nuestra región uno podía lograr que casi 40% de los que apoyan un proyecto lo hagan sin conocer a las personas detrás de dicho proyecto.

Por eso siento, que más allá del US$1 millón que hemos logrado levantar, sí estamos logrando el impacto que buscábamos de democratizar las oportunidades económicas en Latinoamérica.

-¿Cómo ve el 2013 para los emprendedores en la región?
-Yo fui uno de los socios en Patagon, y tengo inversiones en más de 25 empresas, muchas de la cuales operan en Latinoémerica, pero aspiran a ser empresas regionales e internacionales.

Este 2013 el ecosistema de emprendimiento en la región está funcionando y es algo que no hay como ponerle freno. Existe toda una generación de emprendedores jóvenes que están dispuestos a jugarse y a  tomar riesgos , y hacer las cosas distintas y esa energía y creatividad, ni la economía ni lo gobiernos ni nada la puede detener.

El gran desafío para este 2013 para esta generación de emprendedores, no será la obtención de ese capital semilla, sino el capital más institucional para llevar sus negocios al próximo nivel. Lo que estamos viendo en la región, gracias a plataformas como Idea.me, Start-Up Chile, o Innpulsa (Colombia), es cada vez más oportunidades para que buenos proyectos obtengan ese capital semilla para poder arrancar. Existe capital semilla que no existía hace 5 años atrás. Sin embargo, todavía existe una escasez de ese capital que sirve para apalancar ese negocio que arrancó bien.


El 'Valle de la Muerte'....

En Silicon Valley este capital se conoce como de 'Serie A', donde una compañía necesita levantar US$1, US$2 o US$3 millones para realmente regionalizarse. Todavía existe en la región lo que se llama el 'Valle de la Muerte', que es la etapa en que las compañías pueden morir después de lograr levantar su proyecto, cuando les hacen falta varios cientos de miles de dólares -por no decir millones-, para realmente llevar su compañía y su proyecto al próximo nivel.


El problema que están encontrando muchas compañías de la región es que son demasiado grandes para seguir levantando capital de las fuentes locales, pero al mismo tiempo son demasiado pequeñas para poder levantar capital de fondos de Silicon Valley o de fondos internacionales más institucionales. Este es para mi el desafío que enfrentan las compañías de tecnología en la región este año, el cómo llevar su compañía al próximo nivel donde sí puedan estar en condiciones para levantar capital de fondos de Silicon Valley.

-¿Cómo sobrevir al Valle de la Muerte?
-En Idea.me hemos hasta la fecha ayudado a micro emprendedores a juntar capital semilla de US$20 a US$30 mil y ha funcionado bien. Lo que estamos viendo para este año es analizar que cambios podemos hacerle a la plataforma para que empiece a ayudar a proyectos más grandes y juntar más capital. Queremos que Idea.me pueda llegar a recaudar cientos de miles de dólares este año.

Idea.me partió para intentar cubrir la escasez de capital semilla en el mercado, y ahora viendo que esa escasez tiene montos más altos de capital, estamos viendo como la plataforma puede ayudar a solucionar ese vacío en el mercado.



-¿Cómo ve al emprendedor latinoamericano contra el emprendedor estadounidense?
-Diferencias en términos de conocimiento, creatividad y formación es cada vez menos. Hace 12 años atrás, el típico emprendedor de la región puede haber tenido un buen proyecto, pero no tenía la formación que hacía falta para poder llevar ese proyecto a Silicon Valley.

Lo que estamos viendo ahora es que, por ejemplo, uno se puede meter a Youtube y ver las charlas de TED, o tomar cursos online gratis  de Harvard o Stanford. La diferencia es mucho más estrecha hoy en día.

Crédito foto portada

Autores

Pablo Albarracín