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Consejos para sortear el proceso de admisión a un MBA
Martes, Marzo 27, 2012 - 10:53

Poets & Quants aporta consejos para postulantes ansiosos.

Chioma Isiadinso fundó una firma de asesoría para candidatos a MBA luego de una larga experiencia  como parte de comités de admisión en universidades como la Carnegie Mellon, Cambridge y la Harvard Business School. Pensando en los potenciales postulantes, que por estos días quizás se consumen en nervios por ser admitidos en los programas, publicó en Poets & Quants un pistas que ayudan a entender el proceso.

El primer apunte que Isiadinso hace, es que cuando se postula a escuelas que suelen rechazar entre 80% y 90% de sus candidatos, el estudiante que aspira al éxito tiene que ser por encima de todo memorable.

Lo primero es que existen tres fases en el ciclo de admisión, pre postulación, postulación y post postulación. Cada uno de estos periodos es importante y requiere un grado importante de concentración y de tiempo a dedicarle. Por lo tanto, recomienda que dos años es un plazo adecuado para planear el MBA. Es suficiente para elegir el programa, observar los ránkings, aprender de las biografías de los profesores y alumni, considerar costos y beneficios, quizás buscar becas, prepararse para los exámenes e ir labrando un historial profesional sin agujeros. Asistir a los eventos de promoción de los programas, además de visitar los campus de las escuelas, son formas de obtener más información y conocer de cerca al tipo de personal con el que se interactuará.

Cuando la decisión de cuál programa está tomada, toca el desafío del proceso de postulación. En este sentido, hay programas que solicitan requirimientos opcionales, es una decisión sabia añadir la información opcional porque es un indicador del compromiso que se tiene como candidato. Las cartas de recomendación, currículums, cartas de motivación, ensayos y transcripciones de notas son requisitos comunes para todos los programas. El postulante debe tener el mayor cuidado con cada uno de ellos, y ser inteligente al elegir quién escribirá sus recomendaciones. La mayor parte de las escuelas son rígidas en cuanto a las fechas límites de entrega.

Una vez aceptado, todavía quedarán asuntos pendientes como es la salida del empleo actual, quizás mudarse de ciudad o país, y adaptarse a una vida estudiantil que quizás ya era una etapa dejada atrás para muchos.

Para acceder a la versión original del artículo, puede consultar aquí.

Autores

AméricaEconomía.com