Expertos aseguran que la brecha de género se está acortando cada vez más en otras áreas empresariales.

Poco a poco cada vez más son las empresas que están demostrando la importancia que hoy en día tienen las mujeres en la innovación. Y, es que, en la era de la creación ha habido un gran cambio en el paradigma social, profesional y económico global. 

El cambio ya está presente, asegura Beatriz Hamilton, director Técnico en Transforme Consultores, “Cada vez resulta menos extraño ver a mujeres en altos cargos, gracias a su gran capacidad de adaptación y de poder concentrarse en diferentes cosas a la vez. Tienen más confianza en sí mismas, mucha capacidad de coordinación, identificación y de resolver problemas, con una alta sensibilidad social, y una mayor capacidad de socialización y de tolerancia a la frustración, respecto del hombre”.

Pese a estas aptitudes, es un mito, agrega Hamilton, decir que ellas sean más innovadoras que los hombres. “La innovación dentro de las empresas requiere la participación de distintos roles, representados en personas con diferentes habilidades. Mientras unos se encargan de la factibilidad técnica de los proyectos, otros- en un rol más político- se del avance y de hacer que las cosas pasen, otros de asegurar que exista una demanda y que la solución satisfaga problemas reales, sin importar cual sea el género de quién esté haciendo qué”.

Y, si bien, históricamente, las mujeres lideran la innovación en el diseño de nuevos servicios, propuestas de valor y experiencia de clientes, hoy vemos cada vez más a quienes se desempeñan en roles más técnicos. Sin embargo, el bajo índice de participación de las mujeres en el campo de la innovación sigue siendo muy baja en comparación a hombres que hoy están en cargos de liderazgo o que estudian carreras relacionadas al sector.

Para cambiar esta realidad, “romper los estereotipos de género, promover la innovación desde la infancia de las niñas y llevar cabos políticas públicas de educación pública e iniciativas de sensibilización, son parte de las tareas que cualquier sociedad debiera llevar adelante”, asegura la consultora.

Un ejemplo de ello es lo que hoy ocurre en Transforme Consultores, donde la mayoría de los trabajadores son precisamente mujeres. “Asesoramos a empresas e instalamos capacidades de innovación en ellas. Lidiamos día a día con distintas culturas corporativas y diferentes estilos de liderazgo y gestión y, personalmente creo, que las mujeres tienen una mayor capacidad de adaptación a diferentes realidades, esto gracias a la empatía que somos capaces de desarrollar con cada cliente, poniéndonos en su lugar y apoyándolos en el cumplimiento de sus objetivos”, confianza Beatriz Hamilton.