En las calles de la capital china hay en estos momentos 2,35 millones de bicicletas compartidas de 15 empresas distintas,

El Ayuntamiento de Beijing publicó hoy viernes unas directrices sobre el uso de bicicletas compartidas mediante las que les confiere estatus legal como parte del sistema de transportes de la ciudad.

Las bicicletas compartidas serán reguladas y supervisadas por el gobierno municipal. El número de vehículos tendrá un límite y las empresas del sector tendrán que asegurar a los usuarios contra accidentes.

El negocio se ha desarrollado tan rápidamente durante el último año que las autoridades han tenido problemas para regularlo, pero en términos generales lo apoyan porque es cómodo y respetuoso con el medio ambiente.

En las calles de la capital hay en estos momentos 2,35 millones de bicicletas compartidas de 15 empresas distintas, pero la falta de una normativa clara ha suscitado problemas de aparcamiento inadecuado y atasco de áreas concurridas, lo que llevó al gobierno a prohibir la semana pasada la distribución de nuevas bicicletas.

Las directrices dejan claro que los gobiernos de los distritos de la ciudad son responsables del número de bicis existentes y de las plazas de aparcamiento.

Todos los operadores deberán registrarse en bancos de la ciudad y garantizar la privacidad de la información de los usuarios. También están obligados a devolver las fianzas y retirar los vehículos de las calles si cesan en su actividad.

La norma faculta a las compañías a vetar a los usuarios que incumplan las condiciones del servicio.

Según Big Data-Research, el país tuvo 19 millones de usuarios de bicicletas compartidas el año pasado, y la previsióon es que este año lleguen a ser 50 millones.