Pasar al contenido principal

ES / EN

Cómo Bob Odenkirk halló una respuesta para el éxito en Hollywood
Jueves, Septiembre 7, 2017 - 09:20

El actor que encarna en la televisión al particular abogado Saul Goodman cree que muchos de sus colegas "se distraen con la fama o las drogas".

Una lección que el comediante Bob Odenkirk aprendió en los comienzos fue ir en busca de algo menos ostentoso, simplemente trabajar. Eso lo llevó a escribir guiones para programas como “Saturday Night Live”, “Late Night with Conan O‘Brien” y “The Ben Stiller Show” hasta su papel protagónico actual en la serie nominada a los premios Emmy “Better Call Saul”.

Odenkirk habló con Reuters para la serie de notas “Lecciones de Vida” sobre cómo crear vida y risas en un mundo cada vez más intenso.

- ¿Qué le enseñaron los problemas financieros de su familia mientras crecía?
- Mi padre no estaba muy presente, así que mi madre fue la persona más influyente en mi vida. Cuando niños, pensábamos que nos iban a sacar de la casa en cualquier momento, porque sabíamos que éramos frágiles económicamente. Por suerte mi abuelo era listo con las acciones y nos mantuvo a flote. De hecho, él hizo posible que nosotros siete fuéramos a la universidad.

- ¿Tuvo algunos años malos cuando empezó?
- En realidad disfruté de esas épocas de formación, trabajando como camarero y ganando 15 o 20 dólares aquí y allá en espectáculos de comedia. Vivía con poco dinero, compartiendo apartamentos con dos o tres compañeros por vez. Pero a los 25 años me contrataron para “Saturday Night Live” y de ahí en adelante gané decentemente. No tuve grandes presiones financieras hasta cuando fui mayor y tuve hijos, e hice un par de películas que eran realmente malas. Como resultado, me encontré en medio de una gran deuda y en ese momento la pasé mal. Ahí fue cuando sentí el golpe. Fue una racha dura, pero tenía fe que finalmente iba a salir de eso y así fue.

- ¿Cómo se sintió estar en un trabajo soñado a los veintitantos en SNL?
- Fue muy estresante. Era un trabajo que tenía miedo de perder y de fracasar en él. Y de hecho, fracasé en él. No fui un gran miembro de ese equipo de guionistas. Gané más yo de ese trabajo que lo que el trabajo ganó de mí. Era como una universidad de la escritura de comedia para mí, estar alrededor de personas como Robert Smigel y Jack Handey y Al Franken.

- Muchas estrellas en Hollywood terminan fracasando, financiera o creativamente. ¿Cómo ha evitado eso?
- Muchas personas se distraen con la fama o las drogas. En particular, las personas en el negocio del espectáculo siempre están tratando de hacer su próximo proyecto más grande que el anterior. Es increíblemente duro garantizar calidad de esa manera y no es satisfactorio. Siempre quise una carrera, no fama. Solo quiero seguir trabajando.

- Actualmente está celebrando 20 años de matrimonio, ¿qué consejo puede compartir en ese tema?
- Paciencia. Decir la verdad. Perdonar. También cuidar tus propios temas, porque incluso en el matrimonio, tu vida es tu vida y tus problemas son tuyos. Hay que manejar eso y darle espacios uno al otro. Uno tiene que darle ese respeto a su pareja.

- ¿Cómo maneja sus donaciones a la beneficencia?
- Tomamos una décima parte de nuestros ingresos y la distribuimos a organizaciones como escuelas, organizaciones de beneficencia para el medio ambiente y los derechos humanos. Usualmente una vez al año hay una persona en nuestra vida que está pasando por algún tipo de crisis y necesita ayuda. Lo clave es identificar cuánto se puede dar, crear un fondo y luego ser serio al respecto.

- ¿Qué consejos ha dado a sus dos hijos?
- Quiero que mis hijos puedan enfrentar un recorrido difícil. De manera extraña, Hollywood es bastante genial para eso, porque ya han visto los altibajos de tantas carreras en la industria del espectáculo. Es una manera sana de entender que todos estamos en una experiencia a largo plazo.

Autores

Chris Taylor/ Reuters