Steve McGaw, director de Marketing de AT&T Business Solutions.

A veces, las mayores oportunidades vienen en formas inesperadas. Para mí, la llamada “gran oportunidad” en mi carrera no vino de un ascenso, un cambio a una nueva compañía, o incluso de un proyecto en mi rol de aquél momento. Llegó en cambio de un movimiento lateral dentro de AT&T, en ese momento SBC Communications, a un campo que era nuevo para mí.

Los comienzos de mi carrera y mis antecedentes se centran en las áreas técnicas de Ingeniería y Ciencias de la Computación. Pero en mi séptimo año de trabajo, hice la transición de mi papel en ingeniería a una posición en el terreno de desarrollo corporativo, fusiones y adquisiciones.

Dada mi formación técnica, el campo de análisis y negociación de acuerdos era un territorio nuevo para mí. Afortunadamente, conté con el apoyo de Jim Kahan, quien era el Vicepresidente Senior Ejecutivo de desarrollo corporativo de AT&T en ese momento, y quien invirtió en mí con esta oportunidad laboral. Jim creyó en mí cuando le dije que mis habilidades cuantitativas de ingeniería serían aplicables al análisis financiero e incluso me apoyó mientras realicé mi MBA mientras trabajaba. Mientras que la transición estaba fuera de mi zona de confort, Jim siguió confiando en mí y en mi capacidad para realizar el trabajo.

Con el tiempo, mi papel en desarrollo corporativo creció de tal manera que le reportaba directamente a Jim, manejando todas las fusiones y adquisiciones nacionales bajo su dirección. Durante ese tiempo, formamos Cingular Wireless, y me dieron la oportunidad de dirigir el departamento de fusiones y adquisiciones para la nueva compañía. En ese papel, yo era el líder de Cingular para la adquisición de AT&T Wireless por SBC/BellSouth, por $41 mil millones. Ese fue el mayor acuerdo en efectivo que se hubiera completado hasta el momento.

Tuve el honor de ser parte de ese acuerdo, que fue un elemento clave para que AT&T se convirtiera en la compañía de tecnología y comunicaciones de primer nivel que es hoy. Y la experiencia en fusiones y adquisiciones fortaleció mi visión para los negocios, y amplió mis conocimientos más allá del núcleo de la tecnología. A veces, durante el primer tiempo, fue bastante incómodo meterme en el agua del mundo financiero siendo un técnico, pero realmente me ayudó a ser un líder y un profesional de los negocios más completo.

Por esta razón, recomiendo que cualquier profesional ambicioso se ramifique fuera de su papel típico. Construir nuevo tejido muscular puede ser incómodo a veces, pero comprometerse a eso puede dar resultados increíbles. Una cosa me queda muy clara, sin embargo, y es que hay que “meterse de lleno” para que esto pueda pasar.

Para hacer una transición laborar, ¡hay que empezar por pedir ayuda! Una vez que uno identificó la dirección en la que desea llevar su carrera, hay que pedirle a los líderes de esa área que es lo que se tiene que hacer para llegar allí. Tomará un trabajo adicional por parte de uno, pero si se está plenamente comprometido, los mentores y gente que apoyan pueden ayudar a atravesar los desafíos profesionales para llegar a donde uno quiere ir con su carrera.