Una vez identificadas las prioridades, se deberá crear un documento que contemple los procesos y las funciones que garanticen su funcionamiento en casos de emergencia.

Te has preguntado ¿qué sería de tu empresa si hubieras contado con plan de continuidad del negocio? Aún estas a tiempo de ponerlo de práctica y reanudar el funcionamiento rápidamente.

Después de cuatro meses de confinamiento las empresas comienzas a reabrir, aunque el aforo de algunos negocios, como los restaurantes, solo será del 30% y las plazas comerciales solo permitirán la entrada de una persona por familia, impactando en la liquidez de los negocios, es momento de empezar desde cero y definir políticas que antes habían pasado desapercibidas.

Un plan de continuidad del negocio, ayudará a reducir las pérdidas durante una emergencia sanitaria, económica o de cualquier otra índole. De acuerdo con estimaciones del área de Business Continuity Plan de Zurich México, este tipo de planes pueden mitigar considerablemente las pérdidas o incentivar la recuperación paulatina de la empresa.

Recordemos que en México, las pymes generan 7 de cada 10 empleos, los cuales representan cerca del 80% del sector formal en el país; sin embargo, son las que menos protegidas están ante el COVID-19. El 87% de ellas están perdiendo clientes a causa de la pandemia, mientras que el 77% cerrarán operaciones en los próximos meses para hacer frente a sus compromisos.

“Las empresas de todo el mundo han tratado de hacer frente al impacto de la emergencia sanitaria en sus negocios. Aunque los riesgos son considerables, la crisis también revela áreas en las que las empresas pueden desarrollar su capacidad de recuperación y reestructuración para un mundo post-crisis”, señaló Armando Armesto, gerente de Continuidad de Negocios en Zurich México.

Desarrollar una plan de contingencia, requiere hacer un análisis de impacto y definir prioridades, identificar las áreas, el personal, documentos, proveedores y todo aquello que se considere como crítico esencial para la continuidad del negocio.

También se deben identificar los principales riesgos a los que puede estar expuesto como desatres naturales, interrupción de redes, robo de información, entre otros.

Una vez identificadas las prioridades, se deberá crear un documento que contemple los procesos y las funciones que garanticen su funcionamiento en casos de emergencia, bajo diferentes escenarios.

Al crear este documento hay que tomar en cuenta los recursos a disposición del negocio (personas, herramientas tecnológicas, aparatos electrónicos, cedes alternativas, entre otros) y gestionar los más importantes.

El gerente detalla que se requiere crear un equipo de continuidad de negocios, el cual será el encargado de dar respuesta, desde el primer momento, a cualquier crisis. Además, se deberá crear un diagrama de flujo y funciones para coordinar esfuerzos de manera coordinada y efectiva.

En el tema de capacitación es fundamental asesorar a los colaboradores para que sepan qué hacer en caso de crisis y escucharlos, ya que pueden ver aspectos que no fueron considerados en un inicio.

No hay que olvidar actualizar constantemente el plan de continuidad y comunicarlo al área de Recursos Humanos y usar herramientas tecnológicas que ayuden a continuar con la operación de la empresa.

“La Prevención Inteligente es nuestro mejor aliado para mitigar el impacto de una situación inusual que amenace la sustentabilidad del negocio o de emergencia como la que vivimos actualmente”, concluye Armesto.