Con el nombre de Mu’hu, que en la lengua Kunza significa semilla, un matrimonio chileno lanzó un espacio colaborativo que incluye sala de lactancia y guardería.

En busca de conciliar la vida laboral y familiar, el matrimonio compuesto por Bárbara Álvarez y Juan David Rayo decidieron crear un cowork que permitira a las familias chilenas lidiar con este dilema y poder cumplir con los desafíos propios de esta realidad. Fue así como lanzaron en febrero de 2019 el espacio colaborativo Mu’hu, que significa semilla en la lengua Kunza.

Álvarez, quien es fundadora y responsable de operaciones internas y marketing de Mu´hu, explica que el cowork familiar sugió porque "no teníamos una red de apoyo muy disponible y como muchos padres no queríamos decidir entre trabajar o criar a nuestra hija. Queríamos que ambas cosas se hicieran sin tantos sacrificios o decisiones forzosas, y pensábamos siempre que debían existir otras alternativas. Por eso decidimos lanzarnos con este cobaby para ser una verdadera opción para todos esos padres que estaban pasando por lo mismo que nosotros”.

El empremiento partió con un piloto donde compartían el espacio con otro negocio orientado a la entretención de niños y con quienes establecieron una alianza comercial con el objetivo de probar la idea para así conocer bien la necesidad y definir mejor la solución. Dado el positivo recibimiento, el septiembre abrieron el espacio colaborativo en su propia casa, en el barrio El Golf, en Las Condes. 

“El nuevo Mu’hu funcionará muy similar al piloto, pero con distintos espacios funcionales como espacios de cowork (hot desk), escritorios exclusivos, box de atención para profesionales independientes, salas para charlas o capacitaciones, salas tipo lounge, cabina telefónica, sala de lactancia, terraza y kitchenette común”, explica Juan David Rayo, cofundador y responsable de la administración y finanzas.

En un espacio separado del primero está la guardería donde se reciben infantes desde los 8 meses hasta los 5 años. “Al ser una casa, contamos con un jardín con áreas verdes, árboles, un huerto, espacios donde los niños pueden experimentar con sus manos y así fomentar su sano desarrollo a través del contacto con la naturaleza”, explica Álvarez.

Mu’hu funciona a través de distintos planes pagados, tienen cuatro modalidades: Plan mensual, por días, horas y el S.O.S, que es para ayudar a aquellos padres que les falló su red de apoyo tradicional. Rayo explica que las ventajas de trabajar en Mu’hu son muchas: “Ganas tiempo, ya que no tienes la obligación del traslado para llegar a reuniones, ahorras dinero, ya que los beneficios asociados son más económicos que pagarlos todos por separado    – sala cuna, arriendo oficina, after school o niñera, entre otros-; y por último pero no menos importante mejoras  tu calidad de vida, ya que permite mantener tu vida familiar a lo largo del día, teniendo a tus hijos cerca y evitando esa ansiedad de separación brusca que afecta tanto a los niños como de los padres. Adicionalmente te permite conocer bien a quienes están a su cuidado lo que te permite trabajar sin culpas ni grandes preocupaciones”.

Como planes futuros, los fundadores explican que le gustaría que este proyecto siguiese creciendo cada vez más, abarcando otras comunas de Santiago y sectores de Chile.