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¿Cuáles son los beneficios de incluir metodologías ágiles en las empresas?
Miércoles, Julio 15, 2015 - 09:44

La clave está en el trabajo colaborativo, fomentando la creatividad y la innovación.

Actualmente se habla de metodologías agiles como una nueva forma de desarrollo de productos. Esto tiene que ver con utilizar ciertas técnicas y prácticas que facilitan un proceso más ad hoc a lo que los clientes necesitan, en tiempos más breves y con una gran cantidad defeedback de parte de los clientes, donde la clave está en el trabajo colaborativo, fomentando la creatividad y la innovación, donde los equipos adoptan ciertas formas técnicas de desarrollo que son distintas a las habituales.

El concepto surgió a fines de los años 90, donde la industria del software sufrió una gran crisis en la que una alta tasa de proyectos fracasaban y había mucho descontento sobre cómo se estaban haciendo las cosas. En ese momento, grandes expertos en el desarrollo de software empezaron a pensar en nuevas formas de desarrollo, obteniendo como resultado el concepto de la agilidad, que instauró una nueva forma de desarrollo más eficaz, de entrega continua y regular, que busca entregar valor a los clientes, adaptando los productos a las necesidades que se van presentando, introduciendo así un proceso de “desarrollo incremental e iterativo”. Actualmente, la agilidad no sólo se utiliza en el desarrollo de software, sino que en todo tipo de productos.

En este contexto, las empresas se vieron en la necesidad de incorporar un nuevo método de desarrollo. Es decir, dados los requerimientos del mercado actual también es necesario contar con una velocidad de producción ágil, además de la tradicional, con el objetivo de que el mercado vaya orientando la idea de negocio del producto o marca día a día. ¿Cuáles son los beneficios de incluir metodologías ágiles? Las respuestas saltan a la vista. 

Víctor León, Director Outsourcing de la multinacional everis, explicó que “en primer lugar los clientes quedan satisfechos porque se reduce considerablemente el Time to Market, entregando productos de calidad. Y en segundo lugar, el cliente se siente escuchado, porque existe una continua entrega de valor a través de equipos motivados que incluyen las opiniones que van surgiendo en el proceso de desarrollo”.

Mercado chileno

Si bien para el mercado estadounidense y europeo se trata de una realidad hace muchos años, la madurez de agilidad en Chile ha sido más lenta que el resto de Latinoamérica.  

“Argentina, Brasil y Colombia han tenido iniciativas mucho más grandes en términos de adopción de agilidad y la generación de talentos.  Chile no ha tenido la misma velocidad de adopción, lo que ha creado una necesidad de profesionales que manejen el tema”, señaló Víctor León, quien agrega que “hay iniciativas particulares desde hace años atrás pero en los últimos dos años esto ha crecido mucho más en empresas tradicionales de la industria del transporte, telecomunicaciones, Banca y sector público”. 

Sin embargo, el experto de everis recomienda que el tránsito a la agilidad debe ser orgánico y no de forma radical, siempre teniendo como base un proceso de transformación que tiene el centro al cliente y a las personas que componen los equipos de trabajo.

Los expertos aseguran que en el año 2017, el 75% de las empresas van a tener dos velocidades dentro de su organización, y en este contexto, una organización bimodal tendrá a lo menos 30% de su actividad desarrollada con métodos ágiles, aproximadamente. En la actualidad, el mercado ya pide que una compañía tenga una estrategia Digital y que tenga una capacidad de entrega de producto o servicios a una velocidad muy distinta a lo que se acostumbraba años atrás.

En ese contexto, la multinacional  everis ha trasladado la estrategia bimodal a prestación de sus servicios. De este modo, un mismo cliente puede contar en un mismo contrato con dos velocidades una en modalidad tradicional y en modalidad ágil. Para ello ha desarrollado el Agile Excellence Center, orientado a a apoyar en la transformación de grandes  organizaciones a este nuevo paradigma de trabajo. 

Imágenes | Pixabay

Autores

AméricaEconomía.com