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Cuatro artículos cotidianos que no deberíamos usar
Jueves, Enero 7, 2016 - 13:48

Parecieran inofensivos, pero encierran más daños de lo que el usuario puede pensar.

Ahora que comienza el año y son días para cambios en los hábitos, resulta ideal que se tomen en cuenta las recomendaciones de BBC Mundo, para evitar perjuicios para la salud.

Algunos artículos cotidianos parecieran inofensivos, pero encierran más daños de lo que el usuario puede pensar. Las chancletas, el champú, los jeans ajustados y el poliestiereno son artículos cotidianos perniciosos para la salud, cuyas secuelas pueden ser graves, y a continuación se explica por qué.

Chancletas

Son el calzado favorito de muchos, aún cuando no hace calor. Pero el uso prolongado de chancletas, también conocidas como chanclas o ginas puede generar problemas en los pies.

Su suela, una fina lámina de goma, es incapaz de amortiguar el impacto contra las superficies duras, según el sitio BBC Mundo.

Como consecuencia, pueden generar dolores en las rodillas, la espalda y la cadera, dicen los expertos.

Además, quienes las usan suelen tensar los dedos del pie para mantener mejor la sujeción de la sandalia y la presión de los dedos añade estrés a la zona del tobillo y a todo el pie en general. Los ortopedistas aseguran que su uso frecuente se relaciona con la fascitis plantar, una inflamación del tejido conectivo del pie.

Champú

El movimiento No Poo (abreviatura de la voz inglesa no shampoo, no champú) gana adeptos día a día. La mayoría de personas eliminan los aceites, la grasa y la mugre de la piel una, dos o tres veces al día, al usar champú, jabón o geles.

Las cremas humectantes, los champús y los geles de ducha, como muchos otros limpiadores en el hogar, contienen detergentes.

Esos compuestos químicos no solo eliminar la grasa, aceite y suciedad sino que también son usados para emulsionar los componentes de los productos para lavar, lo cual es necesario para estabilizar las mezclas y mantenerlos en forma de crema.

No obstante, Richard Guy, del Departamento de Farmacia y Farmacología de la Universidad de Bath, encontró que el laurisulfato sódico (SLS), un poderoso detergente presente en un gran número de champús y jabones, puede causar severas irritaciones de la piel y reducir su capacidad de funcionar efectivamente cuando se deja en contacto con cutis sanos.

Casi todos los productos para la piel, incluidas las cremas humectantes, contienen algún tipo de detergente, incluso aquellos que no son tan poderosos o perjudiciales como el SLS.

Jeans

Los jeans –también conocidos como vaqueros, tejanos o pantalones de mezclilla– son una prenda de trabajo que revolucionó el mundo de la moda, y de los cuales hay una gran variedad de estilos en la actualidad.

Pero la moda es lucir el modelo que ha sido todo un furor en la última década: los skinny jeans, pantalones pitillo o de tubo, los que son menos recomendables.

Una mujer de 35 años acabó en el hospital con los pies entumecidos y con dificultad para andar después de haber pasado varias horas en cuclillas mientras ayudaba a una amiga con su mudanza y vestía unos jeans muy ceñidos.

La explicación que dieron los médicos a este daño es lo que se conoce como el "síndrome compartimental", una afección seria que implica aumento de la presión en un compartimento muscular. Puede causar a daños en nervios y músculos, al igual que problemas con el flujo sanguíneo.

Poliestireno

El poliestireno fue inventado por el científico estadounidense Otis Ray McIntire en 1941. Los ambientalistas afirman que el poliestireno expandido (EPS, en inglés) causa graves daños cuando ingresa en los ecosistemas marinos y contamina las aguas. Por eso, son cada vez más las ciudades que están prohibiendo el uso de envases descartables de este material.

Desde un punto de vista químico, las propiedades absorbentes del poliestireno lo hacen aún más peligroso.

"Esencialmente, el poliestireno actúa como una pequeña esponja, recogiendo y concentrando algunos de los contaminantes más dañinos que hay en el océano", señala Douglas McCauley, profesor de Biología Marina de la Universidad de California, EE.UU. "Luego, la ve una tortuga marina y se la come pensando que es una medusa", añade.

"Es muy preocupante que algunos de estos peces que se alimentan de plásticos acaben en nuestro plato", advierte.
 

Autores

Prensa Libre / LifeStyle