Pasar al contenido principal

ES / EN

De la disrupción al estancamiento: ¿por qué no ha despegado aún el prometedor Lifi?
Lunes, Abril 4, 2022 - 17:26

Seguridad, confiabilidad y velocidad. Las bondades de lifi, el sistema que utiliza las ondas de luz para transmitir datos y navegar por internet, aún parecen lejos de aterrizar en nuestros dispositivos. En este artículo desvelamos las razones y la factibilidad de su masificación en el futuro.

Durante el tradicional Congreso Mundial de Móviles de 2015 en Barcelona, uno de los temas que generaba más expectativas entre los asistentes era el de los avances en la definición del estándar de la esperada quinta generación de redes móviles (5G).

Por entonces se conoció también que investigadores de la Universidad de Oxford lograron el hito de transmitir datos a 224 gigabits por segundo (Gbps) mediante el uso de la tecnología de fidelidad de luz, o Lifi, una cifra impresionante considerando que no son muchas las redes con fibra óptica que por estos días permiten navegar a 1 Gbps.

Estas dos tecnologías, que se dieron a conocer al mundo casi en paralelo, viven realidades muy distintas al día de hoy.

Son millones los usuarios que durante 2022 han podido experimentar el funcionamiento de las primeras redes 5G, incluyendo a muchos latinoamericanos de países como Chile, México y Uruguay. Sin embargo, lifi, que además de la velocidad destaca por la seguridad de la señal y la estabilidad ante interferencias, parece haberse estancado en una gran promesa, casi un mito de internet.

**Lea también: Wi-Fi 6, 5G y LiFi: características y análisis de las conexiones que acelerarán el internet del futuro

¿Qué pasó, entonces, con lifi, la disruptiva tecnología que aspiraba a romper todos los récords de velocidad de conexión?

LAS RAZONES DEL ESTANCAMIENTO

Fue a mediados de 2019 cuando Signify (ex Philips Lighting) presentó una de las primeras aplicaciones comerciales de lifi.

Agrupados bajo la marca Trulifi, el sistema incluía una gama de productos como luminarias capaces de brindar conectividad inalámbrica a velocidades de hasta 150 Megabits por segundo (Mbps) en grandes espacios, como salas de reuniones y pisos de oficinas. Presentaron a dos de sus clientes en Europa y realizaron demostraciones en Uruguay y Colombia.

Sin embargo, los avances no prosperaron como se podía prever.

Milenko Vlatko, commercial manager professional trade en Signify, explica que el retraso en los avances de lifi se produjo básicamente en el período de dos años de pandemia, por el impacto en las empresas de transporte y fletes y, a grandes rasgos, la desocupación de las oficinas.

Este golpe al segmento industria ha afectado justamente a los lugares donde se presume que lifi tendrá más cabida, como las oficinas y los hoteles. Otra dificultad que ha propiciado el estancamiento dice relación con la escasez de componentes electrónicos, en particular semiconductores, un problema que está afectando a múltiples sectores y que afecta también al desarrollo de nuevos implementos y componentes.

“Lifi es, efectivamente, una tecnología en desarrollo. Pero eso no quiere decir que no exista y que ya no existan proyectos”, comenta Vlatko.

Desde otra perspectiva, David Ruete, director de Ingeniería de la Universidad Andrés Bello en Viña del Mar (Chile), postula que, a corto plazo, es difícil que lifi reemplace a wifi: “La adopción de nuevas tecnologías es lenta, pues requieren de grandes inversiones iniciales, y de que la tecnología esté a la mano de todos y a un precio razonable. Es probable que sea un caso similar al paso de la bombilla incandescente, luego tubos fluorescentes y finalmente la tecnología led. Cada una tuvo una etapa y un tiempo de adopción”.

El profesor David Ruete identifica además algunas desventajas de la tecnología, como su limitación a espacios cerrados y el hecho de que no atraviese paredes. Resalta también que la mayoría de los dispositivos aún no se adaptan a la tecnología y que se requerirá un diseño e implementación de toda una infraestructura para que funcione adecuadamente.

PROYECTOS Y PROYECCIÓN

Aunque es cierto que lifi aún no se masifica, el representante de Signify revela que algunas de las barreras ya han sido superadas en proyectos concretos.

Por ejemplo, el HSV Fußball AG de Hamburgo se convirtió en el primer club de fútbol del mundo en instalar la tecnología de onda de luz. Signify instaló su sistema en el centro de prensa del Volkspark Stadium; allí los periodistas que usan el sistema reciben una clave de acceso USB que se conecta a sus computadoras portátiles; una solución que ha resultado satisfactoria, pues la red tradicional era propensa a sobrecargarse debido a la alta demanda y la interferencia de los dispositivos móviles de los otros asistentes. Algo similar sucede en el estadio del PSV Eindhoven, en Países Bajos, donde el mismo sistema instalado en el sector VIP propicia mejores conexiones para prensa, invitados y reuniones de negocio.

Otro proyecto es el caso de Globalworth, un desarrollador centrado en oficinas en Polonia y Rumania que instaló Trulifi en la Spektrum Tower, en Varsovia. Funciona en tres salas de conferencias, es compatible con las estructuras de iluminación existentes y actúa incluso con las luces apagadas.

Ahora bien, considerando la gran incertidumbre que se ha producido en los últimos años, con la pandemia y el conflicto bélico en Europa recientemente, Vlatko es cauto a la hora de los pronósticos. Sin embargo, con base en los proyectos que ya están funcionando, cree que dentro de cinco años deberíamos empezar a ver un mayor uso de esta tecnología.

Para alcanzar esa meta será necesario que se estabilice la producción de elementos electrónicos y también las tendencias de retorno a las oficinas, pues una mayor concentración del trabajo remoto podría impactar en nuevas aplicaciones y tecnologías en el sector corporativo, según el ejecutivo de Signify.

Por otro lado, el académico de la Universidad Andrés Bello apunta a la oferta de dispositivos para usuarios finales. Según David Ruete, una tecnología estándar sin protocolos de comunicación propietarios y diseñada por varias empresas será clave, pues implicaría mayor alcance económico para las personas.

Finalmente, otro factor que puede impulsar la masificación es una oferta de servicios novedosos respecto a los que ya entrega wifi. Y, en este aspecto, las posibilidades que se abren pueden ser muchas, pues lifi tiene un potencial más alto que las ondas de radio gracias al ancho de banda que permite la luz. “Es mil veces más grande el caudal de información que se puede transmitir por luz que por las ondas de radio'', grafica Vlatko.


Una aclaración importante respecto a la conexión vía lifi es que asoma como un complemento de wifi más que un excluyente.

Esto, debido a que la fuente de suministro de internet al hogar u oficina -como la fibra óptica- no cambia. Lo que hace lifi es mejorar la capacidad de comunicación de esa fuente hacia un punto específico y de allí distribuir a los usuarios. Como explica Vlatko, es una especie de router. “La capacidad y rapidez se va a limitar por el ancho de banda que tengo contratado”, añade.

El principal elemento para habilitar la conexión, además de la fuente de luz, es un dongle. Se trata de un dispositivo relativamente pequeño que se conecta vía USB al computador o móvil para lograr la comunicación bidireccional que permita recibir y transmitir información a través de la luz.

Según Vlatko, es deseable que la evolución o el desarrollo de la tecnología permita que más adelante las empresas de computadores o dispositivos móviles puedan incluir desde el diseño y la fabricación misma el receptor lifi, tal como sucede con las antenas de los celulares para las distintas redes.

Autores

Héctor Cancino Salas