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En medio de tensiones, APEC promociona área de libre comercio
Domingo, Noviembre 14, 2010 - 21:12

Dos cumbres sucesivas -primero la del G-20 en Seúl, seguida por la de los líderes del Asia-Pacífico este fin de semana en Yokohama- estuvieron marcadas por divisiones sobre políticas económicas entre Estados Unidos y la economía número dos del mundo, China.

Yokohama, Japón. Líderes de las economías más poderosas del mundo volvieron a casa el domingo, luego de cuatro días de encuentros que no los acercaron demasiado a acordar la mejor forma para recuperar el equilibrio de la economía global y evitar nuevas crisis.

Dos cumbres sucesivas -primero la del G-20 en Seúl, seguida por la de los líderes del Asia-Pacífico este fin de semana en Yokohama- estuvieron marcadas por divisiones sobre políticas económicas entre Estados Unidos y la economía número dos del mundo, China.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no logró grandes avances en su cruzada por convencer a su par chino, Hu Jintao, para que haga más para cambiar la estructura de la economía de su país para que Washington pueda aumentar sus exportaciones a la potencia asiática.

A Pekín le preocupa que demasiados ajustes radicales terminen por debilitar su crecimiento económico.

"Las economías avanzadas deben lidiar con problemas de desempleo serio, mientras que las economías emergentes enfrentan burbujas de activos y presiones inflacionarias", dijo Hu a otros líderes del Foro de Cooperación Económica del Asia Pacífico (APEC), integrado por 21 miembros.

La reunión de dos días de la APEC fijó planes sobre un área de libre comercio que vincule a la región de crecimiento más rápido del mundo y para continuar un acuerdo que impida el establecimiento de nuevas barreras comerciales.

Los líderes también acordaron, como hicieron en la cumbre del G-20, inyectar impulso a la alicaída ronda de Doha y evitar el uso de devaluaciones competitivas para buscar una recuperación económica apoyada en las exportaciones.

Pero Hu ofreció un contraste pesimista en medio de las muestras de unidad de los líderes, diciendo que se ha visto un alza notable en el proteccionismo, lo que representa una amenaza al elemento vital de una región que depende con fuerza del comercio.

Libre comercio. Una de las piezas centrales de la cumbre de la APEC fue adoptar medidas concretas hacia una Area de Libre Comercio del Asia-Pacífico que vincule a las tres economías más grandes del mundo -Estados Unidos, China y Japón- con algunas de las economías de más rápido crecimiento en otras partes de Asia y América Latina.

La reunión se llevó a cabo inmediatamente después de la cumbre del G-20, donde un vago acuerdo mostró una escasa unidad sobre cómo lidiar con los actuales desequilibrios, en particular el que existe entre China y Estados Unidos, que arriesga con desestabilizar la economía global.

El riesgo planteado por la fragilidad económica, y el precio que los mercados financieros pagarán si no se aborda el problema, fue enfatizado cuando se conoció que la fuertemente endeudada Irlanda está en discusiones sobre un financiamiento de rescate.

El objetivo del crecimiento balanceado ha resultado esquivo debido a las profundas divisiones entre las economías avanzadas y emergentes que quedaron de manifiesto en una cumbre del G-20 en Seúl.

Para Obama, quien pudo haber comenzado su gira de 10 días por Asia esperando dejar atrás las derrotas de su partido en las últimas elecciones legislativas, hubo decepciones en las materias económicas que fueron el objetivo primario de su viaje.

Estados Unidos sostiene que la economía global sólo puede recuperarse si su propia situación interna mejora, lo que requiere un incremento en las exportaciones. Washington ha culpado a Pekín y su política de apreciación del yuan como una importante barrera para ese objetivo.

Mientras Washington sostiene que China mantiene subvaluada su moneda para beneficiar a sus exportadores, Pekín responde que la política de dinero fácil de la Reserva Federal está debilitando al dólar para impulsar sus exportaciones y podría desestabilizar otras economías.

Hu dijo que Pekín está comprometido a una reforma en su tasa cambiaria, pero que ésta sería gradual.

Autores

Reuters