El índice paneuropeo FTSEurofirst 300 de acciones líderes europeas cerró con una subida de un 0,9% a 1.645,25 puntos, con lo que superó el máximo de 2007 y suma una ganancia de 20% en lo que va del año.
Las acciones europeas subieron el viernes a su nivel más alto desde 2000, impulsadas por la baja del euro que está apoyando una recuperación económica e impulsando las ganancias corporativas.
El índice paneuropeo FTSEurofirst 300 de acciones líderes europeas cerró con una subida de un 0,9% a 1.645,25 puntos, con lo que superó el máximo de 2007 y suma una ganancia de 20% en lo que va del año.
Tanto el índice alemán DAX y el británico FTSE 100 tocaron máximos históricos, mientras que el francés CAC 40 trepó a su nivel más alto desde 2008.
Las acciones del minorista francés Carrefour subieron un 2% luego de que reportó ventas trimestrales mejores a las esperadas. Los resultados del minorista fueron conducidos por el crecimiento en América Latina y por una mejora en sus hipermercados en Francia.
Los títulos de Nokia avanzaron un 3,9% a un máximo de cuatro años, en un alza generada cerca del cierre de la sesión tras un informe de Bloomberg que sugería que la empresa evalúa la venta de su negocio de mapas.
El euro caía a 1,0603 unidades por dólar el viernes, con una baja de más de un 3% esta semana.
Este año las bolsas europeas han tenido un fuerte avance. Los inversores globales han aumentado su exposición a la región por las expectativas de que la debilidad del euro les daría impulso, dado que casi el 50% de las ganancias corporativas de la zona euro provienen de fuera de la región.
Los estrategas han dicho que una caída de 10% en el euro contra una canasta de monedas se traduce en una subida de 6% a 8% en las ganancias de las firmas europeas.
Con la baja de cerca de 16% que ha tenido el euro en el último año, se espera un impulso de 10% a 13% para las ganancias.
Eso contrasta con el reciente deterioro en los pronósticos para las ganancias corporativas de Estados Unidos, conducido en parte por la fortaleza del dólar.
Se calcula que las ganancias de las firmas que componen el índice S&P 500 mostrarían en el primer trimestre un descenso de un 2,8% con respecto al mismo lapso del año pasado, lo que haría que ese período sea el de peor resultados desde el tercer trimestre de 2009.
