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Alicia Bárcena: “la IED puede contribuir al cumplimiento de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible”
Miércoles, Abril 5, 2017 - 07:12

La secretaria ejecutiva de la Cepal fue una de las principales oradoras del IV Foro Internacional de Inversiones de Chile, inaugurado por Michelle Bachelet.

La inversión extranjera directa (IED) tiene el potencial para contribuir al cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible en América Latina y el Caribe, fomentando sectores y actividades estratégicas para la región, como la infraestructura, la digitalización y las energías limpias, dijo este martes Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), durante el IV Foro Internacional de Inversiones de Chile.

“Nuestra región espera que los flujos de IED puedan contribuir a la diversificación productiva y a la innovación, al desarrollo de nuevas industrias con menor impacto ambiental y a la generación de empleos directos e indirectos, de la mano de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible promovida por las Naciones Unidas”, planteó la alta representante de las Naciones Unidas en el evento organizado por la Agencia de Promoción de la Inversión Extranjera (InvestChile).

Bárcena fue una de las oradoras principales del encuentro inaugurado por la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y por el Director de InvestChile, Carlos Álvarez, con la participación de los Ministros de Hacienda, Rodrigo Valdés, y de Economía, Fomento y Turismo, Luis Felipe Céspedes, ante un auditorio compuesto por ejecutivos de empresas extranjeras en busca de oportunidades de inversión en el país y de compañías ya instaladas en Chile.

“América Latina y el Caribe debe participar en la revolución digital para ser competitiva”, dado que el mundo se está moviendo desde una Internet basada en el consumo a una Internet basada en el consumo y la producción, explicó Bárcena, quien destacó que “el continente americano se está digitalizando rápidamente, por lo que la Cepal ha propuesto el establecimiento de mercados únicos digitales a nivel subregional, que puedan utilizar una infraestructura compartida”.

El complejo escenario global actual, dijo Bárcena, está caracterizado por importantes cambios geopolíticos que están redefiniendo los roles de potencias como China, Europa y Estados Unidos, lo que se suma a la creciente desigualdad, a la emergencia de la llamada cuarta revolución industrial con foco en la digitalización, a amenazas como el cambio climático y a fenómenos como la transición demográfica y la migración.

Según indicó, el crecimiento global se muestra aún débil (2,2% en 2016), el comercio se sigue desacelerando y se observa un estancamiento de los flujos de IED. En este contexto, la economía de América Latina y el Caribe se contrajo 1,1% el año pasado, con dispares resultados según subregiones, mientras que para 2017 se espera un crecimiento de apenas 1,3%, apuntó.

“Nos preocupa especialmente el empeoramiento de los indicadores sociales por la pérdida de empleos”, señaló Bárcena, quien agregó que en 2016 las exportaciones regionales completaron cuatro años de contracción, mientras que la inversión extranjera directa hacia los países de América Latina y el Caribe cayó 9% en 2015 y alrededor de 8% en 2016, según las últimas cifras disponibles de la Cepal.

Aunque destacó el entorno de negocios en Chile, la Secretaria Ejecutiva de la Cepal recalcó que en toda América Latina y el Caribe persisten desafíos como el aumento de la productividad y de la inversión en investigación y desarrollo.

“La productividad de la región representa aproximadamente el 15% de la productividad de Estados Unidos y, si en 1990 América Latina y el Caribe era responsable del 2% de las solicitudes de patentes en el mundo, en 2014 ese porcentaje de mantuvo intacto, mientras que China pasó del 1% al 35% en el mismo período”, detalló.

El principal reto, concluyó, es atraer IED de calidad, que tenga impacto en el capital de innovación, que se alinee con los planes nacionales de desarrollo y que permita construir capacidades en los países receptores.
 

Autores

AméricaEconomía.com