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Argentinos acaparan dólares a ritmo récord ante el deterioro del peso
Viernes, Septiembre 5, 2014 - 15:56

El martes, compradores individuales salieron al mercado establecido por las autoridades para comprar “dólares ahorro” a adquirir US$42 millones, la cifra más alta para un solo día.

Pese a la insistencia de las autoridades argentinas de que no habrá una nueva devaluación del peso, las presiones sobre la moneda local siguen aumentando, impulsada por la ansiedad de los ciudadanos que se están refugiando en la divisa estadounidense ante el rápido deterioro de la economía local.

El martes, compradores individuales salieron al mercado establecido por las autoridades para comprar “dólares ahorro” a adquirir US$42 millones, la cifra más alta para un solo día, y estas operaciones alcanzaron un récord de US$ 260 millones en agosto.

El peso argentino se ha depreciado 22% en lo que va del año en las transacciones oficiales a 8,42 por dólar, pero en las operaciones informales el tipo de cambio acumula un retroceso de 30% a un mínimo histórico de 14,25 pesos por dólar. Y la tendencia se ha acelerado desde que el gobierno entró en un default parcial de su deuda, el 30 de julio.

Las tasas para las operaciones en el mercado de futuros reflejan las expectativas de los inversionistas de que el tipo de cambio oficial se debilitará otro 12% a 9,5 pesos por dólar en los próximos tres meses.

La moneda trasandina está sufriendo además los efectos de una de las mayores inflaciones a nivel mundial que ya asciende a 38%, el nivel más alto desde el fin de la convertibilidad uno a uno que existía entre la moneda local y la divisa estadounidense hasta 2002.

Ante la creciente incertidumbre, los controles oficiales están fracasando en contener el apetito de la población por el billete verde. Tras la devaluación de comienzos de año, las autoridades flexibilizaron las restricciones que habían impuesto en 2011 para las compras, permitiendo a los ahorristas adquirir dólares por hasta un quinto de su salario y con un tope de US$ 2.000, pero con la condición de que las divisas deben ser mantenidas en sus cuentas por un mínimo de un año. Si los depósitos son retirados antes de ese plazo, se les aplica un impuesto de 20%.

Sin embargo, según cifras de la oficina nacional de impuestos, la mayoría de las personas que está comprando dólares en el mercado oficial está optando por aferrarse al efectivo a pesar del recargo, porque aún así el cambio resulta más conveniente que en el mercado paralelo.

“Estamos viendo una creciente brecha entre los retornos que se obtienen en pesos y en dólares y la gente está comprando todo lo que pueda ante las expectativas de devaluación”, comentó Luciano Cohan, economista jefe de la consultora Elypsis en Buenos Aires, quien predice que las compras mensuales de dólares aumentarán hasta niveles cercanos a US$ 400 millones hacia fines de año.

Ante esta tendencia, crecen los rumores en la plaza trasandina de que el gobierno evalúa recortar el monto máximo para las compras mensuales a US$ 1.000 o elevar el gravamen a la liquidación de los depósitos a 35%.

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ELMUNDO.COM.VE