Así lo señala el dictamen de la auditoría realizada al banco por la empresa PriceWaterhouseCoopers en la anterior gestión. Según el Estado de Resultados del informe, la entidad registró el 2010 una pérdida de US$16,23 millones, siendo que el 2009 sus utilidades alcanzaron los US$21,45 millones.
El Banco Central de Bolivia registró una pérdida de US$16,23 millones como resultado de la política monetaria expansiva implementada el 2010. La entidad gastó US$36,42 millones en la impresión de billetes y la acuñación de monedas. El 2009, sus utilidades fueron de US$21,45 millones.
Así lo señala el dictamen de la auditoría realizada al banco por la empresa PriceWaterhouseCoopers en la anterior gestión. Según el Estado de Resultados del informe, la entidad registró el 2010 una pérdida de Bs 113.468.161 (US$16,23 millones), siendo que el 2009 sus utilidades alcanzaron los Bs 149.958.600 (US$21,45 millones).
“El resultado negativo de la gestión 2010 se debió principalmente al pago por la impresión de billetes de la Serie I y la novena acuñación de monedas, afectando al gasto por un total de Bs 254.591.308 (US$36,42 millones)”, informó el BCB, ante un cuestionario enviado por La Razón.
De la Serie A (1986) a la Serie I (2010), la impresión de billetes tuvo un coste de US$11.730 millones, mientras que la emisión de monedas, de la primera hasta la novena acuñación tuvo un importe de US$144,57 millones, señala el documento.
El Banco Central recordó que las principales funciones de la entidad son la implementación de las políticas monetaria y cambiaria. Ambas “se reflejan en los resultados del ente emisor. Si la política monetaria es contractiva o expansiva (o) si en la gestión hay una apreciación o depreciación del boliviano tendrá su efecto directo en el estado de resultados del BCB”, explicó la entidad.
Política. El 11 de marzo, el titular del BCB, Marcelo Zabalaga, dijo que, mientras el país siga enfrentando una presión inflacionaria externa “tan aguda”, la entidad “está obligada” a seguir apreciando la divisa para preservar su capacidad adquisitiva, lo cual incentiva su uso en el mercado.
“Hemos hecho un intento de cálculo, a través de aproximaciones econométricas, y hemos detectado que por cada punto 1% de apreciación (del boliviano) el impacto es de 0,8% en la reducción de la inflación”, dijo. Entre las medidas de la entidad para que el índice inflacionario no supere la meta anual del 6%, también se contempla la emisión de títulos valores de fácil acceso para la población.
A decir del expresidente del BCB, Armando Méndez, las políticas del ente emisor —como las modificaciones al encaje legal— son expansionistas, porque también “tiene el propósito de desincentivar el uso de la moneda extranjera” en el sistema financiero.
El porcentaje de depósitos en moneda nacional se incrementó de 47%, el 2009, a 56%, el 2010, y los créditos otorgados crecieron de 40%, el 2009, a 58%, el 2010, y 62% a abril de este año, según datos del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.
Utilidades. El Banco Central precisó que la utilidad obtenida en la gestión 2009 es resultado, principalmente, del rendimiento obtenido por la inversión de las Reservas Internacionales Netas (RIN) y por “el mejor nivel de las tasas de interés en los mercados internacionales respecto al 2010”.
Asimismo, se recordó que hubo utilidades porque “no se realizaron gastos por la impresión de billetes y acuñación de monedas”.
Valor de los billetes en mal estado
-Según datos del Banco Central de Bolivia (BCB), el 2010, la entidad retiró de circulación billetes en mal estado por un valor de $us 2.309,81 millones, de los que se destruyeron US$2.135,86 millones (MM).
-El 2009, el ente emisor retiró del mercado nacional billetes por un valor de US$1.907,72 millones, de los cuales se destruyeron US$1.758,18 MM.
-El Banco término el 2010 con un efectivo en bóveda de US$2.323,11 millones, US$1.580,39 millones más que en el año 2009.