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Cuba aprueba nueva ley de inversión extranjera y abre espacio para reformas mayores
Sábado, Marzo 29, 2014 - 18:08

Nueva ley permite que capitales foráneos entren en casi todos los sectores de la economía, incluida la agricultura. Al igual que la anterior, no impide que los cubanos emigrados inviertan en la isla.

La Habana. La Asamblea Nacional de Cuba aprobó este sábado una nueva ley de inversión extranjera para atraer capitales foráneos, una necesidad para el desarrollo del país y el plan de reformas con el que intenta reanimar su maltrecha economía y "actualizar" su modelo estatista.

Con la asistencia del presidente Raúl Castro, los diputados cubanos, reunidos en sesión extraordinaria, acordaron por unanimidad una norma que ofrece beneficios fiscales y tributarios para los inversionistas extranjeros y que permitirá la participación de capital foráneo en todos los sectores de la economía menos la salud, educación e instituciones armadas.

Cuba actualiza así su política de inversión extranjera ante la necesidad de captar capital para desarrollar y dinamizar su economía. Los mensajes desde el gobierno hacia la población para explicar estos cambios, subrayan que la entrada de inversión externa "no supone vender el país o regalarlo en pedazos".

La isla requiere entre US$2.000 millones y US$2.500 millones anuales para hacer sostenible su modelo y sus reformas, según reconoció el vicepresidente del Consejo de Ministros, Marino Murillo, ante el pleno de la Asamblea Nacional, una sesión a la que no tuvo acceso la prensa extranjera acreditada en Cuba.

El personero ha señalado en la televisión estatal que, para acelerar el crecimiento económico, se necesita alcanzar un aumento del Producto Interior Bruto (PIB) entre el 5% y el 7% como mínimo, lo que demanda tasas de inversión anual en torno al 20%.

"Esto demanda un necesario financiamiento externo con el que hoy el país no cuenta", agregó el también coordinador del plan de las reformas económicas cubanas.

En 2013, el PIB cubano creció un 2,7%, cifra inferior al 3,6% previsto y para 2014 se prevé un aumento del 2,2% de acuerdo a estimaciones oficiales.

Presentada como un instrumento "estratégico" y "trascendental", la nueva normativa persigue que la llegada de inversiones extranjeras ayude a diversificar y ampliar los mercados de exportación, acceder a tecnología avanzada, sustituir importaciones y crear empleo.

Cuba dice que esta ley dará a los capitales extranjeros protección y seguridad jurídica y garantiza que esas inversiones no podrán ser expropiadas "salvo por motivos de utilidad pública o interés social previamente declarados por el Consejo de Ministros".

La norma incluye un régimen especial tributario que contempla la exención del impuesto sobre los ingresos personales a los inversionistas extranjeros socios en empresas mixtas o partes en contratos de asociación económica internacional.

Entre otros beneficios, exime del pago de impuesto sobre utilidades por un período de ocho años, un plazo que el gobierno cubano puede extender.

Otro aspecto destacado es que los capitales foráneos pueden entrar en casi todos los sectores de la economía incluida la agricultura, área prioritaria para un país que gasta al año unos US$2.000 millones de dólares en importar alimentos.

Una novedad es que, de forma excepcional, se permitirá inversión extranjera en fórmulas de gestión no estatal, concretamente cooperativas, pero el estado tendrá un papel de control en esos proyectos para que no se produzca concentración de la propiedad.

En cuanto a la contratación de trabajadores locales se seguirá realizando a través de una agencia empleadora estatal, uno de los aspectos que más preocupa a los empresarios extranjeros, si bien esa entidad no tendrá un fin recaudatorio.

La nueva ley, al igual que la anterior, no impide que los cubanos emigrados inviertan en la isla, pero el ministro varios personeros ya han señalado que Cuba "no irá a buscar inversión extranjera a Miami".

Autores

EFE