Los analistas prevén que la tasa de interés referencial, Selic, se ubicará en un 12,50% a fines del 2012, por debajo del 12,75% estimado en el sondeo Focus de la semana pasada.

Sao Paulo. Los economistas redujeron sus pronósticos para el nivel de la tasa de interés de Brasil a fines del próximo año, aunque mantuvieron su estimación de una nueva alza antes del fin del 2011, mostró el sondeo semanal Focus del Banco Central divulgado este lunes.

Los analistas prevén que la tasa de interés referencial, Selic, se ubicará en un 12,50% a fines del 2012, por debajo del 12,75% estimado en el sondeo Focus de la semana pasada.

Los economistas mantuvieron además su proyección de una tasa Selic de un 12,75% a fines del 2011.

La tasa Selic es actualmente de un 12,50%, tras cinco alzas en lo que va del año.

La tasa de interés de Brasil es una de las más altas del mundo, en parte debido a que la inflación del país se ha mantenido elevada.

Los analistas mantuvieron su pronóstico para el referencial Indice Nacional de Precios al Consumidor Amplio (IPCA) de este año en un 6,31%, el mismo nivel del sondeo de la semana pasada.

A su vez, esperan una inflación en el 2012 de un 5,30%, comparado con el 5,28% del sondeo de la semana anterior.

Las predicciones del sondeo representan la mediana de los pronósticos de analistas consultados por el Banco Central en alrededor de 100 entidades financieras.

La alta inflación de Brasil ha sido una preocupación para la presidenta Dilma Rousseff. Con el alza de los precios al consumidor afectando su base de poder entre los votantes con bajos ingresos, la inflación se ha convertido en un gran dolor de cabeza durante su primer año de mandato.

La inflación a 12 meses se aceleró a un 6,75% hasta mediados de julio. El Banco Central tiene una meta inflacionaria del 4,5% para este año, con una tolerancia de más o menos dos puntos porcentuales.

Los economistas prevén que la mayor economía de Latinoamérica crecerá un 3,96% este año, más que el 3,94% proyectado en el sondeo de la semana pasada.

La economía de Brasil creció un 7,5% el año pasado, a su mayor ritmo en 24 años y uno de los más robustos entre grandes economías.

Sin embargo, los analistas creen que esa tasa de crecimiento no es sustentable.