"Hay señales palpables de recuperación económica del país que son percibidas por los inversionistas y que han servido para que se ratifique su respaldo a nuestra economía, a través del interés por adquirir los bonos ofertados", sostuvo el ministro de Finanzas, Patricio Rivera.

Quito. Ecuador colocó este martes US$1.000 millones de una reapertura de su bono al 2026 con un rendimiento de un 9,125%, por debajo de la guía ofrecida, anunció en un comunicado el ministro de Finanzas, Patricio Rivera.

Antes de la venta se había recibido una demanda por US$2.250 millones, dijo una fuente a IFR, un servicio de información financiera.

"Hay señales palpables de recuperación económica del país que son percibidas por los inversionistas y que han servido para que se ratifique su respaldo a nuestra economía, a través del interés por adquirir los bonos ofertados", agregó Rivera en un comunicado.

La operación es la segunda del emisor soberano en poco más de un mes. Ecuador emitió el 8 de diciembre US$750 millones al 2026 con una tasa menor a la guía inicial sobre el 10%, tras recibir una demanda de unos US$2.400 millones.

Los recursos serán destinados para financiar un millonario plan de inversión pública, que ha sido la base del Gobierno del presidente Rafael Correa, quien dejará el cargo el próximo mes tras una década en el poder.

Desde que el socio más pequeño de la OPEP regresó al mercado de capitales en el 2014 ha realizado siete colocaciones, incluida la del martes, por un monto global de US$7.250 millones, según datos oficiales.

Ecuador declaró una moratoria en parte de su deuda comercial en el 2008 para luego recomprarla a precio de mercado.

La economía de la nación andina ha sido golpeada fuertemente por la caída del precio del crudo, la apreciación del dólar y un devastador terremoto en abril pasado que dejó millonarias pérdidas, lo que obligó al Gobierno a buscar ingresos extras a través de venta de deuda interna y externa y créditos bilaterales y multilaterales.

La oposición, que busca ganar espacio con la salida del presidente Rafael Correa del poder tras las elecciones de febrero, ha cuestionado los agresivos niveles de endeudamiento del país y algunos candidatos a la presidencia han hablado de una reestructuración de la deuda como parte de sus ofertas de campaña.

La deuda pública de Ecuador representó el 38,7 por ciento del PIB a noviembre del 2016, según el Ministerio de Finanzas.