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Europa rechaza presiones del G20 para una solución rápida de la crisis
Martes, Junio 19, 2012 - 18:04

En la cumbre de líderes del Grupo de los 20 (G20), Europa dijo que considera pasos concretos para integrar al sector bancario de toda la zona euro.

Los Cabos. Líderes europeos rechazaron este martes las presiones para lanzar nuevas medidas rápidas contra su crisis de deuda y en cambio prometieron avanzar en un plan de integración económica de más largo plazo, con la esperanza calmar así la agitación de los mercados.

En la cumbre de líderes del Grupo de los 20 (G20), Europa dijo que considera pasos concretos para integrar al sector bancario de toda la zona euro.

Se trata de una profunda reforma buscada por Estados Unidos y otros países para romper el ciclo de países muy endeudados que rescatan a sus bancos en problemas, una solución que endeuda más a los gobiernos.

Las reuniones de dos días, que terminarán este martes, se llevaron a cabo en medio de fuertes tensiones en los mercados financieros.

Los riesgos de que España -la cuarta mayor economía de la zona euro- necesite un gigantesco rescate internacional crecieron.

Sus costos de endeudamiento de corto plazo se dispararon unos dos puntos porcentuales y los rendimientos de deuda de largo plazo superaron el 7%.

El presidente francés, Francois Hollande, dijo que él y la canciller alemana, Angela Merkel, jugadores clave en la crisis europea que ya lleva más de dos años, son conscientes de que la zona euro tiene la responsabilidad de dar las soluciones.

"La señora Merkel y yo sabemos que Europa debe tener su propia respuesta", dijo al margen de la reunión del G20 en el balneario mexicano de Los Cabos. "No debe ser dada a nosotros desde afuera", agregó.

"El FMI no esta allí para sostener a la zona euro, incluso si ha hecho eso con algunos países como vimos en Grecia", sostuvo.

Las tensiones en la economía mundial y las discusiones contrarreloj contrastaron con la relajada atmósfera de Los Cabos, un balneario en el Pacífico mexicano. La declaración de la cumbre fue delineada en un hotel junto a otro llamado Desire Resort And Spa, solo para adultos y donde la ropa es opcional.

El G20 y el FMI han presionado a Europa, la región más rica del mundo, para que den más apoyo a los miembros de la zona euro endeudados y fijen un calendario claro para construir una unión financiera, fiscal y política, pasos que consideran cruciales para salvar a la unión monetaria de Europa.

Grecia, Irlanda y Portugal, abrumados por sus deudas, tuvieron que recurrir a rescates internacionales y la zona euro prometió la semana pasada unos 100.000 millones de euros para sacar a flote al sistema bancario de España.

Pero los inversores ven estas medidas como provisionales hasta que Europa se comprometa a una mayor integración.

Esto requeriría que los países de la zona euro entreguen más soberanía y compartan el riesgo económico, pasos que líderes del bloque aseguran llevaría tiempo a las 17 democracias que comparten la moneda, especialmente a Alemania, que pagaría la mayor factura.

Los peligros de que la creciente crisis de deuda en Europa arrastre a la economía global a una recesión por segunda vez en menos de cuatro años dominaron la cumbre del G20, que agrupa a las mayores naciones industrializadas y emergentes y representa más del 80 por ciento de la producción mundial.

Bajo presión de los mercados financieros y de los ansiosos líderes mundiales, Europa acordó el lunes moverse primero hacia un sistema bancario federal.

Entre los compromisos plasmados en un borrador del comunicado final del G20 obtenido por Reuters figura considerar pasos concretos hacia una "arquitectura financiera más integrada" en Europa.

Ese esquema incluiría una supervisión bancaria común, resolución de bancos en problemas y garantías para los ahorristas bancarios.

Estos pasos ayudarían a romper el vínculo entre la deuda soberana y los problemas bancarios.

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, subrayó el compromiso previo de Europa de lanzar el proceso en junio y terminarlo antes de diciembre. La Unión Europea celebrará una cumbre el 28 y 29 de junio para discutir sus próximos pasos.

"Propondré construir bloques para profundizar nuestra unión económica y monetaria para que podamos mostrarle al resto del mundo y a los mercados que el euro y la zona euro es un proyecto irreversible, y que queremos profundizarlo y darle una fuerte infraestructura política", dijo Van Rompuy en un mensaje de video publicado en Internet.

El primer ministro canadiense, Stephen Harper, mantuvo la presión sobre Europa. "Lo que será importante, lo que estaremos viendo la próxima semana y hacia adelante será la acción concertada, coordinada que hará en realidad estas cosas posibles", sostuvo.

Un funcionario de gobierno alemán negó los reportes que indicaban que la cumbre del G20 había discutido el posible uso de los fondos de rescate de Europa para comprar bonos de los miembros más golpeados de la zona euro. Un ministro italiano puso esa posibilidad sobre la mesa el lunes en Bruselas.

Un importante funcionario de Estados Unidos reconoció que las acciones más fuertes de Europa tendrán que esperar hasta la cumbre de la Unión Europea.

"Pero sí esperamos ver una dirección clara que surja de Los Cabos. Los líderes europeos están comprometiéndose a tomar todas las medidas necesarias para salvaguardar a su unión monetaria", comentó la subsecretaria del Tesoro para Asuntos Internacionales norteamericana, Lael Brainard.

Y dijo que cuatro temas están bajo discusión: el avance en las reformas de Grecia para mantenerse dentro de la zona euro, la construcción de una mayor unión financiera, ayuda financiera efectiva y creíble para aliviar las presiones de los mercados en los costos de endeudamiento de España e Italia, y giro de Europa para apoyar el crecimiento junto con medidas de austeridad.

Un funcionario de la UE dijo que la unión bancaria podía avanzar más fácilmente que un proyecto de unión fiscal europea, que requiere discusiones políticas intensas. "No puede hacerse de la noche a la mañana", aseguró.

Los líderes del G20 dejaron pocas dudas de que Europa es un actor crítico para estabilizar la recuperación global.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, explicó cuidadosamente y con detalle a sus colegas del G20 los riesgos que pesan sobre el crecimiento en un mundo interconectado durante las discusiones sobre la economía global que se alargaron hasta la cena del lunes, dijeron diplomáticos.

Y mostró como cada región es muy dependiente de la demanda de la Unión Europea, el bloque económico más grande del mundo, para sus exportaciones y también para las inversiones.

"Leyó las cifras, cuánto India, China, Corea, etc, cuánto depende cada uno de Europa y de la Unión Europea en una economía global integrada", dijo un funcionario del G20.

Otro funcionario del G20 describió la conversación como "franca". Cada líder recalcó la urgencia de la situación y hubo un fuerte llamado a adelantarse a la crisis en lugar de tratar de apagar los incendios, sostuvo el funcionario.

El borrador del comunicado mostró que los líderes del G20 están listos para comprometerse en actuar "en conjunto para fortalecer la recuperación y encarar las tensiones en el mercado financiero".

También el comunicado dijo que los miembros de la zona euro tomarían "todas las medidas necesarias para salvaguardar la integridad y la estabilidad de la zona, mejorando el funcionamiento de los mercados financieros y quebrando el círculo de retroalimentación entre la deuda soberana y bancos".

Organizaciones civiles se quejaron de que los problemas de Europa se habían apoderado de la agenda de la cumbre y dejaron en segundo plano los planes del G20 para atacar a la pobreza y la escasez de alimentos.

"El coraje político parece ser escaso en Los Cabos", dijo ONE, un grupo global de lucha contra la pobreza fundado por la estrella de rock Bono.

Autores

Reuters