En su carácter de presidente del G20, el presidente mexicano Felipe Calderón dijo que Uruguay fue “injustamente” mencionado como un "paraíso fiscal", en referencia a lo expresado por Nicolas Sarkozy sobre la nación sudamericana, y elogió los pasos dados por el gobierno uruguayo para cooperar con la evasión fiscal.

El presidente José Mujica dijo este mièrcoles que a esta altura de su vida sus huesos “sienten” los “largos kilómetros” a recorrer para visitar otro país. “Pero este es un viaje y un cansancio que me deja muy contento”, sostuvo.

No era para menos. Unos minutos antes de realizar esos comentarios, su gobierno había recibido un enorme espaldarazo de México en la polémica desatada luego que Uruguay fuera calificado como un “paraíso fiscal” por el presidente francés Nicolás Sarkozy.

En su carácter de presidente del G 20, el presidente Felipe Calderón dijo que Uruguay fue “injustamente” mencionado como un país que cumple con esas características y elogió los pasos dados por el gobierno para cooperar con la evasión fiscal. La señal política al mundo es enorme y la satisfacción del gobierno aún mayor.

Gran victoria diplomática. Una vez finalizada la rueda de prensa de ambos mandatarios en Guadalajara, los ministros y jerarcas del gobierno que integraron la delegación se saludaron entre sonrisas. Los dichos que Calderón espontáneamente envió como señal al resto del mundo fueron tomados por el Poder Ejecutivo como una gran victoria diplomática.

México ejerce actualmente la presidencia del G20, un hecho que le da un enorme peso internacional a los elogios lanzados ayer por Calderón hacia Uruguay y ayuda al país a reposicionarse luego de haber sido escrachado por Sarkozy al incluirlo en una lista de países propicios para evadir impuestos. Cuando pronunció ese discurso, el mandatario galo estaba al frente del G20. Es más, Francia se defendió diciendo que no había lanzado una posición propia sino que hablaba en nombre de un grupo, un argumento que nunca fue aceptado por el gobierno uruguayo.

Calderón se desmarcó totalmente de las declaraciones de Sarkozy y pidió “precisar” algunos sucesos que sucedieron en la última cumbre de los países industrializados y algunos de los emergentes. “Quiero hacer una referencia puntual. Como saben en la última reunión del grupo de los 20 México fue electo como presidente, por primera vez para un país en desarrollo. Hay un punto que para mí es muy importante precisar. Ahí se habló del compromiso de los países en materia de transparencia y quiero expresar con toda claridad que el Foro Global sobre Transparencia e Intercambio de Información en Materia Fiscal es una entidad neutral, de carácter técnico que no utiliza desde hace tiempo el término paraísos fiscales, como en algún momento injustamente se hizo alusión al Uruguay”, sostuvo.

Calderón enumeró los avances que ha realizado el país. “Quiero reconocer y felicitar el enorme esfuerzo que Uruguay ha venido haciendo, no solo al suscribir esos compromisos, sino por haber avanzado en 10 de los 12 compromisos que forman parte de este esfuerzo”.

Así, Uruguay encontró en México todo el apoyo que no tuvo de la región. De hecho, la OCDE reconoció que Argentina estuvo detrás de la mala nota del organismo. Así lo declaró al diario El País el jefe de la secretaría del Foro Global sobre Transparencia e Intercambio de Información, Pascal Saint-Amans.

El socio estratégico. La firme salida en defensa de Uruguay tras la polémica desatada en torno a las acusaciones de Sarkozy no fue la única señal política de acercamiento que envió México. “Uruguay es el socio estratégico de México en el Mercosur”, dijo Calderón y recordó que es el único de los integrantes del bloque que tiene un Tratado de Libre Comercio (TLC) con ese país. Más tarde, en un almuerzo de honor ofrecido a la delegación uruguaya sostuvo que es hora de que “Uruguay y México unamos nuestras voces en los foros internacionales”. A su vez, Calderón tuvo elogios personales hacia Mujica.

Por su parte, Mujica se dedicó a celebrar las firmes intenciones de incrementar las relaciones comerciales que quedaron plasmadas ayer. “Hoy tengo que agradecerle a la nación mexicana, a su gobierno, la apertura política en una actitud que nos permite vaticinar que las relaciones diplomáticas, políticas y comerciales se van a ir multiplicando casi automáticamente y que funcionarios de Uruguay tendrán que venir asiduamente a alguna ciudad mexicana”, dijo.

En medio de los elogios a Mujica y al país, Calderón nombró a “Ecuador” al querer decir “Uruguay”.

Además de la política, las necesidades comerciales
El presidente mexicano Felipe Calderón recibió a su par uruguayo, José Mujica, en un edificio con una arquitectura impactante que cuenta con 200 años de historia. Antiguamente, era un orfanato de niños huérfanos y ahora es un instituto cultural. En medio de un inmenso patio central, decenas de militares rindieron homenaje al presidente junto a niños que flameaban banderas de ambos países. “Mexicanos y uruguayos trabajaremos juntos para estrechar nuestra identidad latinoamericana”, dijo Calderón. No solo hablaron de temas políticos. Mujica dijo que no es tan “poeta” o “desinteresado” como para hacer “tantos kilómetros” solo a hablar de esos temas y dejar de lado de la posibilidad de concretar negocios. “Tenemos necesidades comerciales como cualquier sociedad y miramos a México. Pero andar cerca de los países latinoamericanos no es un negocio, es una causa”, sostuvo.